Capítulo 38: Juntando piezas

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Scarlett

Estaba esperando en la sala de inspección al profesor Daniel cuando vi que un hombre alto y peli castaño llegó discutiendo por celular y procedió a sentarse en la silla frente al escritorio del inspector, después de unos minutos llegó otro señor vestido de terno con el gesto totalmente serio y un aura de autoridad lo rodeaba por completo.

—buenas tardes. – saludó el inspector y vio a los padres por lo que se sorprendió un poco, me hizo una sea que esperara tranquila y me quedé en el asiento sin siquiera decir una palabra, luego uno el hombre que tenía terno colocó una hoja sobre la mesa.

—como hablé ayer con usted, señor inspector. —continuó. —quiero que se expulse al muchacho que está besando a mi hijo por corromperlo. – entonces él es el padre de José.

—disculpe no creo que mi hijo haya besado al suyo sin que este no quisiera. – se defendió el castaño y deduje que era el padre de Leo, incluso por el gran parecido.

—señores, entiendo que estén molestos porque esta fotografía se difundió por todo el colegio, pero el acto que hacen sus hijos en la foto es fuera de la institución. –

—entonces cualquiera puede aplastar la reputación de mi hijo como si nada. – se quejó el padre José.

—¿por amar libremente? – pregunté y vi el terror en el rostro del inspector mientras ambos padres se giraron a verme. —señores sus hijos no cometieron ningún pecado o nada que dañe su reputación, se aman y ya.

—¿y esta mocosa insolente? – el padre de José parecía molesto.

—se supone que ustedes los padres siempre quieren que sus hijos sean felices, pero siempre se molestan o critican cada que ven que lo son. – arremetí. —José y Leonel se aman y eso no los hace tener mala reputación, mala reputación tienen personas como ustedes que se atreven a juzgar el amor de otros. –

—lo se... — respondió el hombre castaño. —llevo pensando en eso mucho tiempo. –

—sus hijos son brillantes, tienen buenas calificaciones y ayudan con los negocios de sus familias y hacen todo eso para hacerlos felices a ustedes ¿qué les cuesta entrar en razón y dejarlos ser felices a ellos? –

Ambos padres se observaron entre sí un momento, luego salieron de la sala de inspección sin volver a decir una palabra. Para mí, aquellos que se atreven a juzgar la forma en la que otros aman, no son más que personas que no tienen la menor idea de lo hermoso que es amar de verdad ni ser amado de verdad.

—creo que tus amigos te lo agradecerán. – añadió el profesor Daniel mirándome con una sonrisa de alivio.

—ya no son mis amigos. – respondí y suspiré. —vine a retirar mis papeles del colegio, sé que he faltado y que faltan como 2 exámenes, pero con las notas que faltan es más que suficiente para graduarme ¿verdad? –

—pero —pude ver el gesto de asombro en su rostro. —Scarlett ¿estás segura? – preguntó y le entregué el permiso y los papeles firmados de mi padre.

—si – respondí.

—pero eso significa que dejarás que ella se salga con la suya. – protestó.

—ella ya se salió con la suya desde el momento que empezó a molestarme y a hacerme un sinnúmero de cosas horribles que ustedes permitieron y jamás sancionaron por mantener la "buena imagen" en el colegio. – confesé. —ella ganó desde que empezó todo, ella siempre ha ganado, solo que esta vez me retiro antes de volver a perder. –

—mañana es fin de curso y la semana entrante es la graduación – intentó convencerme. —es una experiencia muy linda que puedes compartir con tus amigos. –

¿Todo fue un sueño?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora