Axel
— ¿irán conmigo a casa de Scarlett? — preguntó Sofía.
—me parece buena idea. —respondió José.
—a mi igual. — añadió Leo de forma emocionada.
—eso es obvio, necesitamos acordar que haremos como proyecto. — decía Fabián risueño.
—no me parece buena idea. — dije en automático y todos clavaron su mirada sobre mí.
—no me importa tu opinión. — me respondió Sofía en tono arrogante.
—ganamos por mayoría. — decía Leo mientras reía a todo pulmón.
—solo no mencionen lo que pasó hoy, ni ayer enfrente de su padre — la cara de Sofía al pronunciar esas palabras cambió de arrogante a preocupada. —en frente del señor Roberts no mencionen nada incoherente. —
A penas tocó el timbre salimos en dirección a la casa de Scarlett, quien para mi sorpresa vivía una manzana detrás de mi casa.
— ¿es aquí? — pregunté confundido.
—sip, aquí es — respondió Sofia balanceándose de adelante hacia atrás, como si fuese una niña. — ¿algún problema Axel? —
—es por aquí vivo yo — hable en voz baja, pero fue lo suficiente para que todos me escucharan y se rieran de mí.
—parece que tú y Scarlett están destinados a vivirse encontrando. — se burló José y Sofía soltó una carcajada.
—no es su tipo — dijo.
— ¿perdón? — pregunté confundido.
—lo que oíste. — me volvió a responder ella con una mueca de compasión fingida. —no eres su tipo. —
—pero si yo soy lindo — añadí entre risas
— ser lindo no te sirve de nada si la chica es Scarlett Roberts. — dijo y todos nos callamos porque la puerta de la casa se abrió.
—Sra. Rose ¿cómo está? — saludó Sofía con una gran sonrisa y aquella mujer le devolvió la sonrisa, parecía amable.
— ¡querida! — añadió mientras la saludaba con un beso en la mejilla. —pasen, yo saldré al trabajo dentro de poco. — volvió a decir en tono sutil.
Todos entramos tras Sofía, quien se sentó educadamente en uno de los sillones de la sala y todos la imitamos.
—Scay bajará en un instante, siéntanse como en casa. Yo debo retirarme. — añadió la Sra. Rose y se retiró.
—¿Scay? — pregunté confundido.
—así le dicen a Scarlett las personas más cercanas a ella. — me respondió Sofi.
—pero tú no le dirás nunca así. — reclamó José risueño.
—ella lo odia. — añadió Sofi riendo. —no se les ocurra decirle así enfrente de la clase, ella les haría la vida de cuadritos. —
—hola. — escuchamos desde atrás de nosotros y volteamos.
—¡Mi amorrrr! — gritó Sofía y se le tiró encima para abrazarla. Definitivamente eran mejores amigas, ambas estaban igual de locas.
— ¿por qué diablos estás con buso y calentador? — preguntó Leonardo asustado. —hace un calor insoportable en el ambiente, rarita. — añadió de forma bromista pero amable, Scarlett solo sonrió ante la expresión de él.
— ¿tienes fiebre? — preguntó Fabián. —porque de ser así podemos reunirnos cuando estés mejor. —
—no, tranquilos. Estoy bien. — respondió. —síganme. — nos dijo, guiándonos a la mesa del comedor. — luego ella entro por una puerta que al parecer daba con la cocina.
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¿Todo fue un sueño?
أدب المراهقينEl acoso escolar y los problemas familiares son dificultades a las que Scarlett está acostumbrada a enfrentar mientras las sufre en silencio con el único apoyo de Sofi, su mejor amiga, pero ¿Qué tan mal puede terminar el acoso escolar? ¿puede alguie...