Attracted Magnents [+18] [Tonway]

Capítulo 18 🔞

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「𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖𝙙𝙤𝙧 - 𝙏𝙤𝙣𝙞 𝙂𝙖𝙢𝙗𝙞𝙣𝙤」

Me desperté: sintiendo el dulce olor de un perfume muy particular junto a unas caricias en mi abdomen desnudo, las suaves y calidas manos ajenas que envolvían mi cuerpo me hacían querer dormir otra vez.

— Despierta princesito ¿O voy a tener que hacer yo todo el trabajo? — La voz de Jack inundó mis oídos de una forma placentera, no sabía de que trabajo estaba hablando, solo sabía que sus manos comenzaban a recorrer mi cuerpo gustosamente — Supongo que tendré que consentirte, después de todo siempre eres tú quien toma el control — Sentí su ardiente respiración en mi cuello, abrí mis ojos, mirando los suyos al no entender que quería hacer.. No entendía muy bien la situación.

— ¿Por qué no te quitas la americana? ¿No tienes calor? — Lo veía sudar mientras sus movimientos lentos y cariñosos acariciaban cada aparte de mi ser y me dejaban pequeños jadeos los cuales soltar.

Mis manos se posaron en sus hombros y poco a poco bajaron hasta el borde de aquella americana, comenzando a quitársela hasta dejarla a un lado de la gran cama matrimonial en la que estábamos.

Él no decía nada, solo se dejó hacer por mi y continuó con sus caricias hasta llegar a mis mejillas, las cuales sorpresivamente tomó para luego besarme.. Conway me estaba besando.

Sus suaves y finos labios envolvían los míos con total facilidad, con total desdén, con total pasión y lujuria. Mis manos rodearon su cintura, acariciando esta mientras sus dientes rozaban mi labio inferior, logrando atraparlo para saborearlo. Nuestras lenguas comenzaron a juntarse, al principio tímidamente: para luego hacer una pequeña batalla que supuse que Jack me dejó ganar.

— ¿Te acuerdas cuando me dijiste que por una parte me seguias considerando un padre? — Sus palabras me erizaban la piel, él lo sabía, no entendía como ni cuando.. Pero él parecía saberlo todo sobre mi.

Ambos nos separamos, aún que sin dejar de juntar nuestros cuerpos: él se enderezó mientras comenzaba a quitarse la corbata, poniéndola junto a la americana.

— Si.. Me acuerdo de eso — Me moría de vergüenza ¿Quién consideraría 'padre' a alguien que se supone que es su pareja? O al menos eso pensaba que éramos, pues su brillante mirada jamás había dejado de mostrarme las grandes emociones que siente al estar conmigo.

Él me seguía mirando, esta vez con una sonrisa mientras sus manos se posaban con delicadeza sobre mi bajo vientre, alarmandome levemente.

— Shh.. Sabes que no me importa que me llames "papá" de vez en cuando, entiendo que a veces se te escape, pero me gustaría más su diminutivo — ¿No le importaba? ¿Que clase de sueño/paraíso se supone que era este? Mi corazón comenzo a latir cada vez más mientras sus labios tocaban los míos de nuevo, callandome por completo.