Attracted Magnents [+18] [Tonway]

Capítulo 31

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「𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖𝙙𝙤𝙧 - 𝙏𝙤𝙣𝙞 𝙂𝙖𝙢𝙗𝙞𝙣𝙤」

Mis manos se frotaron con fuerza contra mi cara, rasgando levemente aquellas vendas que envolvían parte de mi mandíbula y frente. Me miré al espejo, mirando mi verdadero reflejo, mi verdadero ser... Esto no podía estar pasando. Simplemente me negaba a esto.

Las lágrimas caían por mis dañadas mejillas, sin querer creer mis propios sentimientos. Mi propio corazón.

Tenía miedo, mucho miedo y no podía controlar el hecho de que mi ritmo cardíaco aceleraba con cada pensamiento que tenía sobre él.

Nadie me había hablado, no sabía ni en que hospital estaba, mis "amigos" no habían vuelto a visitarme ni a mandarme ningún mensaje ¿Tal vez se habían cansado de mí? ¿Vieron que mi estado ajeno a la realidad no podía solucionarse y terminaron dejándome en este hospital lleno de gente estúpida?..
Cualquier opción era buena, cualquier lágrima valía una mierda.

Estaba sólo, estaba sólo de nuevo. Nadie podía salvarme, no podía escapar de la oscuridad que tanto me aterraba, de que mis pensamientos terminasen de volverme loco, de que él estuviera ahí para aprovechar la más mínima oportunidad para manifestarse.

— ‹fottuta puttana›... ¡Ojalá te mueras, Pogo! — Grité con todas mis fuerzas contra el espejo al ver su asqueroso reflejo detrás de mí. Después de todo nadie podía escuchar mis lamentos, nadie podía escuchar mis gritos y nadie podía ver la sangre y las lágrimas que derramaba cada día que pasaba en este asqueroso hospital el cual estaba: probablemente muy lejos de Londres.

¿Por qué? ¿Por qué alguien querría hacerme tanto daño? ¿Por qué la vida no me dejaba ser feliz y ser quién soy? ...

Todo era mi culpa.
Yo elegí esto sin darme cuenta.
Pero estaba dispuesto a cambiarlo todo aún si las consecuencias eran morir.

Después de todo: Lo amaba.

Amaba a aquel hombre del cual mis pensamientos se volvían locos, aquel hombre al cual le había mentido tan descaradamente y como consecuencia ahora estaba sufriendo. Estaba seguro de que los dos estabamos sufriendo.

Lo admitía, por una vez lo admitía y ya me daba igual lo que la gente pensara.
Miré de nuevo mi reflejo en el espejo, sentí varias miradas de asco sobre mí a pesar de que yo era el único que estaba en aquella desolada habitación, en aquel desolado baño.

— Tardé en darme cuenta.. — Dije contra el espejo, sintiendo mis ojos humedecerse rápidamente ante lo que me iba a confesar. Ante lo que tenía que asimilar a la perfección — Tardé tanto en saber que tú no eras cómo un padre para mí — Seguí, ahora escuchando gritos en mí pecho, gritos que querían salir de mí boca pero yo los retenía con todas mis fuerzas ya que sabía que si los dejaba salir: mis pensamientos iban a cambiar drásticamente — En realidad, al principio pensé que sí, te quería cómo si fueras el papà que nunca tuve, y te sigo queriendo pero.. — Apreté el borde del lavabo, sintiendo mí cuerpo ponerse en guardia y notando todas las sensaciones dignas de estar en peligro. Cada palabra era un detonante, no para mí, sino para Pogo. Pero estaba harto de esto, él tenía que aceptarlo o salír de mi cuerpo.

Las lágrimas bajaban con más intensidad por mis mejillas, queriendo parar al suelo: pero sin poder hacerlo gracias a las vendas. Cerré mis ojos con fuerza al sentir cómo algo arañaba mi espalda cómo si fuera un León hambriento y rápidamente tome el aire correspondiente.

— ¡Te amo Jack Conway! — Dejé salir mi acento italiano, gritando aquello como si mi vida dependiera de ello, notando cómo de repente todo se volvía silencioso. Tragué saliva y miré a mi alrededor en busca de algún susto o algún grito que me haga caer del miedo. Pero nada, no había nada, no había nadie. Estaba sólo y seguro en aquel baño.

Mis sentimientos se resolvieron en mi estómago, sintiendo un gran nudo en mi garganta provocado por la gran confesión que le hice al espejo cómo si fuese un completo esquizofrénico. Y en teoría: lo era.

Lamentaba tanto no poder estar con Conway, no poder decirle lo que sentía, quien era yo y en donde estaba su verdadero hijo.

— Si tan sólo p-pudiera volver en el tiempo.. Haría las cosas bien contigo, pero soy un i-idiota.. — Golpee la pared con mis brazos, con toda la fuerza que tenía, la golpee hasta sentir mi cuerpo desfallecer sobre el suelo ante las heridas y el gasto de energía que claramente aún no tenía.

Yo era un gran idiota y Conway seguramente quiera matarme, seguramente él me estaría buscando pero no precisamente para hablar conmigo: sino para arrancarme los dientes uno a uno y dejarme sin extremidades. Darle de comer a los perros mi sucia y asquerosa piel..

¿Y por qué no ahorrarle el trabajo?

*¿Qué?.. *

Él parecía estar sorprendido mientras yo comenzaba a reírme cómo un desquiciado.
Me lo merezco, me merezco sufrir..

Un cambio tan exquisito de bipolaridad, algo más que añadir a la lista de: Informe de un loco el cual necesita una camisa de fuerza. Comencé a reirme de mi propio chiste, ni siquiera sabía si eso era un chiste pero de igual manera comencé a reirme cómo un idiota. Como el idiota que era.

Cerré mi puño derecho con fuerza y así: me pegué con todas mis fuerzas en la cara, sin sentir ningún tipo de remordimiento, tenía que hacerlo, me lo merecía.
Las lágrimas caían con mucha más intensidad que antes, mientras que de mis encías salía un leve rastro de sangre.

*No lo hagas..*

Seguí dándome puñetazo tras puñetazo, notando mis ya dañados nudillos cubrirse de un líquido rojizo, sentí un leve "crack" al dar uno de los puñetazos y estaba más que claro que con suerte: más de 2 dientes se habían roto.
Respiré agitadamente sintiendo el dolor y la sangre mezclarse como si fuesen el uno para el otro, haciéndome escupir y darme cuenta de que efectivamente: me había roto un diente y una muela.

*¡Vas a morir si sigues así maldito gilipollas! ..*

Volví a darme otro puñetazo, esta vez en la mandíbula, notando cómo también las vendas de esta se volvían rojizas.
Sentía el dolor, el majestuoso dolor que tanto merecía, que tanto tenía que sufrir para al menos poder estar en paz conmigo mismo aún que sea algo mínimo.

— T-Te amo tanto J-Jack Conway.. Que me mataría s-si así lo quisieras.. Soy tan.. ‹Estúpido› — Dije al aire, sintiendo todas mis fuerzas abandonar mi dañado cuerpo. No podía caminar bien, mi cuerpo dolía, todo en mí dolía.

Pero lo que más me marcaba eran las tantas cicatrices de mí espalda..

Yo tan sólo quiero ser amado..
¿Esto es lo que quería que mamma que hiciese?
¿Conway seguramente es lo que habría querido.. Pero y mí mamma? ¿Carlo?..

*Tengo la culpa*

*No tienes la culpa*

*Tengo la culpa y siempre la tendré*

Sería mejor si mí vida hubiese terminado aquí, tendría que haber muerto, tendría que haber dejado en paz a Conway.

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