Detencion - L.S (PAUSADA)

Parte 7

Narra Louis

Mis ojos se quedan clavados en el folleto durante un rato, todavía luchando por creer que realmente pertenece a Harry.

Bien, ¿y si es de Harry? Quizá esté confundido sobre su sexualidad. Al fin y al cabo, es un adolescente enloquecido por las hormonas. Esta etapa de la vida es confusa para un chico de su edad, y a veces tu cerebro se descontrola un poco.

"Hola", me dice una voz profunda e intimidante detrás de mí, sacándome de mi trance mental. Oh, no... Reconozco esa voz en cualquier parte.

Giro sobre mis talones y veo a Zayn Malik. Es el capitán del equipo de fútbol y, si no me equivoco, creo que es amigo de Harry. Tiene fama de matón, por no decir otra cosa. Su meta en la vida es hacer miserables a todos los que no son populares. Tu típico, matón adolescente.

Lleva el pelo negro engominado y su piel bronceada se oculta tras la camiseta de fútbol. Ah, es verdad. El entrenamiento de fútbol era hoy después de clase, pero Harry obviamente no podía asistir por estar castigado.

La semana pasada me enteré de que le suspendieron unos días porque pegó a un chico en el vestuario. Tiene fama de violento, así que su presencia me inquieta un poco.

Sus ojos se posan en el folleto y una sonrisa de satisfacción aparece en sus labios. Siento un nudo en el estómago cuando empieza a caminar hacia mí. ¿Qué me va a hacer? Va a pensar que el folleto es mío. Y para colmo es un homofóbico empedernido, así que lo más probable es que me pegue.

El da un paso hacia mí y me arrebata el folleto de la mano con un movimiento rápido. Ni siquiera me molesto en negar que no es mío. De todos modos, nunca me creerá.

Se queda mirándolo y se le dibuja una sonrisa en los labios.

Zayn: - Así que eres marica, ¿eh? Supongo que debería haberlo sabido - dice, observando mi elección de ropa.

Louis: - ¿Perdona? - digo en voz baja, intentando evitar problemas. Malik tira el panfleto al otro lado del pasillo y vuelve a centrar su atención en mí.

Me rodea el cuello de la camisa con los nudillos y me golpea contra unos casilleros. Mis pies cuelgan a unos centímetros del suelo y me quedo mirando a Zayn con miedo. No hay nadie más en el pasillo, así que ni siquiera me molesto en gritar pidiendo ayuda. Es inútil. Me duele la espalda al golpearme contra los casilleros metálicos, pero no dejo que se note que me duele. Pongo mi mejor cara de póquer y le miro a los ojos, sin mostrar miedo, pero sin oponer resistencia.

Zayn: - No me gusta la gente como tú en mi colegio, ¿me oyes? - me dice, apretando más fuerte el cuello de mi camisa. Asiento con la cabeza. - Bien - dice en voz baja.

Sus ojos oscuros se clavan en los míos con puro odio.

La otra mano de Malik se cierra en un puño y choca contra mi estómago con fuerza, luego lo hace otra vez, y otra. De mi boca se escapan unos leves gemidos cuando me golpea, pero aparte de eso, permanezco en silencio. Duele, pero ni de lejos tanto como cuando esos chicos de Anchorage me patearon las costillas.

De repente, me suelta la camiseta y deja que mis pies choquen con la sensación familiar y tranquilizadora del suelo.

El moreno me pincha el pecho con el dedo índice.

Zayn: - Este es tu primer aviso.

Luego se marcha sin decir nada más. Se dirige al pasillo despreocupadamente y abandona la escuela, dejándome en el frío y vacío pasillo. Permanezco allí un rato, intentando recuperar el aliento y asimilar lo que acaba de ocurrir.