PAREJA DE UN MAFIOSO

Capítulo 29

—¿No crees que sería bueno que mientras arreglas las cosas yo me quedé en mi departamento?

—No.

—¡Jeon!

—Sabes que mi respuesta seguirá siendo un rotundo no —se cruzo de brazos —Y deja de hacer ese puchero que no me vas a convencer.

—Pero Jeon — pateó el suelo mientras fruncía el ceño como un niño pequeño—No quiero causarte inconvenientes en un lugar que ni siquiera es de tu propiedad.

El mafioso ya le había contado a Jimin en dónde era que se estaba quedando y también le comento sobre la ayuda del ruso, el ahora peligris escuchaba todo con mucha atención, le había comentado también sobre lo que hizo en su ausencia, todo los movimientos que tuvo que hacer hasta poder llegar a Rusia.

—No me causaras ningún inconveniente gatito — se acerco y acaricio la mejilla derecha del menor bajo su atenta mirada — Victor está de acuerdo con que te lleve a su mansión.

—Pero...

—Pero nada gatito — beso suavemente su nariz —Apresúrate en guardar tus cosas, te estaré esperando en la sala.

Jimin vio como Jeon salía de su habitación y no pudo evitar llevar su mano a la zona que este había besado, una sonrisa junto a un sonrojo aparecieron en su rostro por la reciente acción.

Termino de guardar su ropa junto a sus cosas personales en la maleta, tomo de su cómoda un perfume que Sunho le regalo no hace mucho, desde que llegó a su vida ha sido un ángel, le agradece todo lo que ha hecho por él y en algún momento se lo devolverá.

Solo que la duda le carcome su mente, ¿Debería decirle lo que está sucediendo? ¿Lo que le sucedió a él? Está más que claro que no le dirá que Jeon es perteneciente a la mafia, pero aún piensa si debe contarle algunos detalles.

Ya cuando esté en la mansión del amigo de Jeon pensaría con claridad, por ahora solo iría a dónde ese mafioso que si se tardaba un poco más era capaz de entrar nuevamente a su cuarto y sacarlo de ahí.

Tomo su maleta y comenzó a arrastrarla para salir de ahí, vio una última vez su cuarto y suspiró sonriendo, no paso mucho tiempo ahí pero guardaba cierto cariño, era el primer lugar decente que podía pagar con su propio esfuerzo.

—¿Estás listo gatito? — Jeon al verlo salir de su habitación se levantó rápido de su asiento.

—Si — asintió viendo su apartamento con nostalgia.

—¿Estás bien? — Jeon se acercó con preocupación.

—Si, tranquilo — sonrió.

—Esta bien, entonces nos vamos — asintió e iba a replicar cuando el mayor tomo su maleta para cargarla —Permíteme hacer esto por ti — no le quedó de otra más que aceptar ya que este se pondría a insistir hasta que aceptará.

Al cerrar la puerta le coloco llave, en recepción la entregaría para así no tener que volver, se dirigieron al elevador y presionó el botón que los llevaría a la primer planta, ya estando ahí se dirigió al escritorio donde estaba una chica viéndolo con una sonrisa.

—¿Ya te marchas?

—Si — afirmó con una sonrisa leve — Fue un placer conocerte.

—Igualmente Jimin.

Se despidió de la chica con la cual en pocas veces entablo una conversación, normalmente solo se saludaban porque prefería mantener cierta distancia con las personas por el miedo que se mantenía presente, pero aún así, con lo poco que la conoció le agrado y espera que en un futuro tal vez poder verla nuevamente, aunque hasta en ese momento se acordó que nunca le preguntó su nombre, bueno, en otra vez será.

Ya cuando llegaron al auto Seokjin le sonrió para abrirle la puerta del auto mientras Jeon metía sus cosas en el maletero, una vez terminó se sentó a su lado en el asiento de atrás, se acomodo mejor viendo cómo pasaban por las calles transitadas de Rusia, Jimin amaba el clima frío de ese país aunque en ocasiones llegaba a molestarle por las bajas temperaturas que se llegaban a dar, era raro.

—Jimin — le llamo Jin y volteo a verlo prestándole atención —¿Quién era ese muchacho con el que estabas?

Sin voltear a su lado pudo suponer que Jeon ya tenía puesta su mirada fija en él, aunque aún no se lo preguntara, sabía que tenía una gran curiosidad por Sunho.

—Es un amigo que conocí en mi trabajo.

—¿Enserio? — alzó sus cejas —¿Cómo sucedió?

—Un día llegó a buscar una correa para el perro de su mamá — sonrió al recordar —Yo trabajo en una tienda de mascotas y él no sabía cuál escoger así que le ayude, ambos nos caímos bien, Sunho comenzó a llegar a la tienda a saludarme cada que podía y de a poco nos fuimos conociendo hasta hacernos amigos.

—¿Amigos? — preguntó esta vez Jeon.

—Si, amigos — asintió con inocencia — Sunho ha sido una estupenda persona conmigo, me apoyo en todo esto aunque no sabe que estaba huyendo de Corea, en poco tiempo me ha inspirado mucha confianza y puedo decir con seguridad que es una gran persona.

—Ya veo — Jeon trono su cuello —Es maravilloso ese chico entonces.

—Si que lo es — el peligris hablaba con emoción.

Jin al escuchar el tono del menor sonrió, más al ver cómo Jeon hacia todo lo posible por disimular su molestia.

Porque si, Jeon estaba claramente celoso del nuevo amigo de Jimin.

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