Amor a la Medida

Capitulo 30

Cuando abrio los ojos, faltaba poco tiempo para que amaneciera. Naruto bostezo y miro la habitación, no había ningún rastro de Sai, algo que agradecía mentalmente. Estaba todo en silencio, el olor a tierra mojada penetro sus fosas nasales.

Estaba empezando a hacer frio.

Miro las sábanas y su ropa y se dio cuenta que eran demasiadas delgadas para cubrir totalmente su cuerpo. 

-Comprare una calefacción -

Naruto abrio los ojos de la sorpresa, giro mecánicamente la cabeza y miro nervioso al pelinegro. Estaba apoyado en el marco de la puerta, con los brazos cruzados sobre el pecho y el pelo estaba ligeramente húmedo, cayendo sobre su frente. Naruto aparto la cabeza y bajo la mirada hacia su estómago, por instinto lo cubrió con ambas manos.

Sai no dijo nada.

-Una calefacción, suena bien - dijo el rubio, no estaba nada interesado, lo único que quería es salir de aquí y regresar con Sasuke. Pero necesitaba mantener a Sai tranquilo, para que no se atreviera a hacerle algo.

-Si, iré a la ciudad a conseguirlo ¿Necesitas algo? -

Sai se apartó de la puerta, caminando hacia el interior. Naruto se puso rígido, apretando con fuerza su estómago.

-Ah... si... yo quiero algo dulce - "en realidad no tengo ánimos de comer" - También una cobertor más grueso y unos suéteres -

Sai sonrió - Claro - dio un paso al frente, consiguiendo que Naruto retrocediera instintivamente - ¿Algo más? -

-No, es todo -

-Bien -

Naruto miro detrás de Sai, distrayéndose con las manchas que había en la pared. Trataba de mantener la calma y despejar la mente, pero a pesar de todo, no consiguió quitar los nervios que tenía.

-No te hare nada - la voz de Sai se había endurecido - No algo que tú quieras -

-Entonces, apártate, invades mi espacio personal -

Sai soltó una risita y se apartó del rubio - Bien, espérame. No te vayas a ninguna parte -

Naruto puso los ojos en blanco "Aunque quisiera irme, no puedo"

-Te traeré lo mejor - Sai se acercó rápido y le dio un beso en la mejilla - Nos vemos - se despidió, con una sonrisa en el rostro. 

Naruto por fin quedo solo, miro la puerta varias veces para cerciorarse y luego presto atención a los sonidos. Por primera vez desde que llego aquí, escucho el sonido de un motor y supo que el pelinegro dijo la verdad cuando dijo que estaban lejos de la ciudad.

"Por lo menos tiene auto"

Sabia manejar, pero nunca se dio el lujo de comprarse un auto. Si lograba escapar... no, primero tenía que estar Sai para que el auto estuviera.

Pensó por varios minutos, luego miro hacia la cadena.

"Lo primero es romper esta estúpida cadena"

Durante unos minutos se permitió mirar el candado sin ninguna solución en su cabeza y pese a estar cansado y con deseos de dormir, fue incapaz de cerrar los ojos y su mente siguió trabajando. No podía creer que Sai lo tuviera secuestrado y  que actuara como un esposo, podía tener la esperanza de suavizar su corazón y que lo dejara libre o esperar a que Sasuke viniera.

Algo que le resultaba imposible, porque ni siquiera él sabia donde rayos estaba.

Ya pasaron dos dias y el tercer dia era el cumpleaños del azabache.

"Ni siquiera le compre un regalo" pensó.

Los juguetes que habia comprado ese dia, era para su bebe que todavia no habia nacido.

-Mi pequeño, te prometo que saldremos de esta - acaricio su estómago algo abultado - Te comprare todos los juguetes que quieras y a papá le comprare algunas corbatas - 

-¿Me estas escuchando? - pregunto Madara, molesto, con los brazos cruzados, sosteniendo un papel en una mano y moviendo irritado los dedos.

-No - se sincero Sasuke, estaba demasiado irritado y el dolor de cabeza no ayudaba en nada.

-Tienes que dormir, ya llevas dos dias sin pegar el ojo -

Sasuke se masajeo los sienes "¿Quién demonios duerme cuando alguien importante en tu vida está desaparecido?" no tenía ganas de discutir y se sentó en la silla.

-Esta todo en orden -

El comandante se acerco a ellos con varios papeles - Hemos revisado las camaras de seguridad y descubrimos que la persona que secuestro a Naruto Uzumaki, es Sai -

-Dime algo nuevo -

Madara miro de reojo a su sobrino y le sonrio al comandante - Sin ofender, pero lo que nos importa es la ubicacion -

-Si - el comandante cerro los ojos - Si, ya lo encontramos -

Al escuchar eso ultimo, el azabache se levanto de su asiento y tomo de los hombros al comandate.

-¡¿Dónde demonios esta?! -

-Sasuke...-

El comandante no se ofendió - Esta en una parte lejos de la ciudad... al parecer es una propiedad privada y ya que el satélite no nos permite verlo de cerca - 

Sasuke lo había previsto, estos dos días fueron un infierno. Madara no parecía querer ayudarlo, ya que no utilizo ninguna de sus conexiones y él no podía esperar hasta mañana. Y para mayor frustración, Sai estaba con su rubio, no quería pensar en las cosas malas que le había hecho, pero al parecer a nadie le parecía importarle.

-Bien - Sasuke miro a su tío - ¿Estas esperando que cumpla los dieciocho , tío? -

Madara alzo una ceja - ¿Por que dices eso? -

-¡No estás haciendo nada! -

Madara no respondió ¿Qué si no estaba haciendo nada? ¡Claro que estaba haciendo algo! no era un monstro para no ayudar a Naruto y más si estaba esperando un bebé de su sobrino. 

-Comandante, mande sus patrullas a revisar alrededor del lugar-

-Pero es un procedimiento algo largo - 

-¿Largo? - Sasuke perdió los estribos - Escúchame, bastardo... cuando den las doce de la mañana yo ya estaré cumpliendo la mayoría de edad ¿Sabes que significa eso? Voy a heredar una gran fortuna de mi abuelo, que puede comprar tu estúpida estación de policía - las palabras que soltaba no tenían ningún sentido, pero ya estaba desesperado. 

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¡Feliz navidad y próspero año nuevo! 

Nos vemos el 8 de enero con doble capitulo :)