En un mundo donde la dictadura consiste en clasificarte por tu signo zodiacal se sale de control cuando unos jóvenes deciden "saltarse las normas"
//EN PROCESO.
¿Alguna vez has imaginado que el horóscopo fuera mas allá? Debido a diversos problemas...
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El atardecer desde este edificio, se ve increíble. Los colores rosas y amarillos son los protagonistas en todo el cielo a la vez que se mezclan junto con el mar, realmente componen una pintura.
-Estoy hecha polvo.- Escucho como Janeth entra en la habitación. -Esa profesora siempre ha sido una mandona. Y encima hoy, nos hizo hacer ejercicio desde el primer momento.-
-¿Muy duro?- Pregunto pero sin parar de mirar las vistas.
-Demasiado. Escalar unas piedras enormes, y escondernos de "enemigos" imaginarios. Si ella nos veía, nos pegaba con una escoba. Debe considerarse maltrato. -Escucho el sonido de la cama hundirse. -¿Aún no han llegado los chicos?- Niego con la cabeza como respuesta. -Pareces una loca viendo tanto afuera.-
-¿Nunca has pensado cómo estará el mundo hoy en día?- Me atrevo a preguntar. -Es decir, la sociedad cambia, capaz tienen la capacidad de comer aire.-
-¿Comer aire? Lo dudo, creo que siguen igual de estancados, pagando facturas, y el gobierno robando dinero.- Me giro para ver a Janeth. -Solo espero salir de aquí pronto.-
De repente, la puerta se abre despacio. Dejando ver a Josh con una herida en la cabeza, cubierto de sangre seca. Sus lágrimas caen rodeando sus mejillas.
No me da tiempo a reaccionar, mi cuerpo actúa inmediatamente. Corro hacia su posición para ayudarlo a entrar, dándome cuenta que Benxamin le sujeta del otro lado.-¿Que paso?- Pregunto angustiada. Odio la sangre.
-¿Josh?- Janeth salta de la cama.
-Lo encontré llorando en una esquina, detrás del cubo de limpieza.- Murmura Benxamin.
Le consigo quitar la camisa al rubio, para meterlo en la bañera. Lo bueno de estas habitaciones es que no tenemos que compartir baños, cada habitación tiene uno propio. Me sorprendo al verla espalda del rubio. Marcas de látigos, están al rojo vivo, como recién hechas.
-Dios mío.- La voz de Janeth se escucha detrás mío, viendo la misma situación que yo.-¿Quien te hizo esto?-
Josh sigue sin contestar. El único ruido que se presencia es el agua llenando la bañera, y a Benxamin abriendo los armarios en busca de toallas.
-Sé que no nos conocemos mucho. Pero puedes confiar en nosotros. ¿Qué sucedió?- Preguntó a la vez que con una toalla húmeda, le quitó la sangre seca de la cabeza. Tiene la mirada perdida, viendo el movimiento del agua.
-Eran cinco, contra mí. Fue al salir del entrenamiento, me acorralaron.- Su voz es tan dolorosa, que siento unas ganas de llorar junto a él. -Intente pelear, pero me golpearon la cabeza. Cuando desperté estaba atado, me dolía mucho la espalda.-
-¿Quienes?- La voz de Benxamin emite enfado, como a punto de gritar tan alto que lo escucharan los del último piso. Hace que se me ponga la piel de gallina.
-Tenían uniformes negros. Uno de ellos era pelirrojo.- Sin dar más información, Benxamin toma la decisión de salir de la habitación de un portazo. No tengo ni idea de a dónde se dirige, si a cobrar venganza por parte de Josh o a saciar su ira.
Me concentro en Josh, que sigue llorando diciendo con más detalles de lo sucedido. Su profesor dio la orden de que entre ellos "se hicieran más fuertes" y sus compañeros se lo tomaron como vía libre para torturar. Incluso afirma que vio a dos de ellos maltratando a una compañera, pero no pudo impedirlo porque estaba atado, intentando no desmayarse del dolor.
-Este lugar, es una jaula enorme sin control alguno.-Afirma Janeth, también se le nota enfadada.-Los únicos que nos podemos cuidar, somos nosotros mismos. Tenemos que intentar, sobrevivir, y luchar por nuestra vida.- Se queda en silencio, pensando en algo.
-¿Que?-
-Hay que saber más que ellos.- Su rostro se ilumina. -Hay que aprender a pelear.- Josh y yo la miramos a la vez.
-¿Estás loca?- Susurra el rubio. -¿Has visto lo que pueden hacer?-
-No me meteré en peleas, sabiendo que ellos son capaces de torturar a una persona, por simple diversión.- Digo decidida.
-¿Y qué hacemos? ¿Nos quedamos aquí, esperando a que nos torturen a todos? ¿O a que le vuelvan a hacer lo mismo a Josh? Benxamin es uniforme negro, es un salvaje, lleva aquí metido más de dos años, y es capaz de matar a alguien si quiere. Es el mejor maestro.-
-No.-Digo. -Es una mala idea. Nos estaremos metiendo en su terreno, y seremos una diana más fácil.- A lo mejor la de las rastas tiene razón pero no soy capaz de pelear, de ver sangre delante de mí o de saber que en cualquier momento estaré a punto de matar a alguien.
-No se de donde vienes Freya. Pero aquí, nadie se va a parar a preguntarte si te viene bien que te peguen un puñetazo. Está bien que no quieras aprender, pero yo al menos no quiero ver entrar a Josh de nuevo así, o a ti o peor, a mi misma.- Se nota que se preocupa por nosotros, aunque apenas sepa su historia. -Hablaré con él, si quieren apuntarse, está bien.- Y dicho esto sale del baño, dejándonos solos a mi a Josh.
-Tiene razón.- Susurra Josh.- No podemos quedarnos quietos.- No digo nada, me concentro en curarle las heridas siguiendo sus instrucciones. Me doy cuenta que Josh sabe bastante de enfermería.
-Fui ayudante en la Iglesia. -Me confiesa al ver que miro las vendas durante mucho tiempo. - Mi padre era cura y mi madre era doctora. Aprendí todo de ella por cómo ayudaba a los indigentes, les curaba de las palizas de gente que no les importo pegarle a un sin hogar. Al poco tiempo, me metieron aquí, prometiéndome un futuro mejor. - No se que decir, así que me mantengo callada.
-Hay que sobrevivir Freya, por las buenas o por las malas.
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¡Hola! Disculpen la tardanza con el capitulo, tuve varios problemas para subirlo.
¿Qué tal las vacaciones? ¿Ya empezaron la rutina de nuevo?
