Al segundo mes, Miyeon conoció a los padres de Minnie.Todo parecía indicar que sería un día normal, por supuesto, pues los grandes momentos no suelen anunciar su llegada con un arcoiris.
Miyeon despertó antes de que la alarma de su celular sonara, y no fue extraño porque siempre hacía esto.
Lo primero que hizo fue enviarle un mensaje a Minnie, con quien había estado hablando hasta tarde, deseándole unos buenos días.
Tomó una ducha, se cambió la ropa, se maquilló y fue a desayunar al pequeño comedor.
No era extraño que Suni ya estuviese allí, sirviendo la comida a sus hijos inquietos, Shuhua ayudándola a llevar y traer los platos.
Suni estaría mintiendo si decía que la presencia de Shuhua en esa casa no le agradaba ni un poco.
Soojin estaba sentada en una de las sillas.
Miyeon: ¡Buenos días! -Saludó al llegar.
Su numerosa familia respondió al unísono con un simple “Buenos días Miyeon”.
Suni: ¿Dónde están tus hermanas, Miyeon?
Y, como si hubiesen sido invocadas por el llamado de su madre, Yuqi y Chuu llegaron cantando al lugar una canción de Beyoncé, abrazando a los presentes y gritando letras a sus oídos.
Miyeon se preguntaba como el horario nocturno de trabajo, más las clases en la universidad no terminaban por agotar a las chicas.
Yuqi: Minnie me ha llamado -Notificó en cuanto fue el turno de la tatuadora de recibir su mensaje-. Quiere que contestes sus mensajes.
Miyeon simplemente sonrió y tomó su celular para leer con una cara boba los típicos mensajes de “Buenos días, tatuadora” y “¿Cómo has dormido?”
Es curioso como dos simples mensajes pueden hacer feliz tu día.
Suni: ¿Hablando con esa chica que te gusta otra vez? -Preguntó con una sonrisa mientras le entregaba su plato repleto de tostadas a la tatuadora. Ella solo pudo asentir mientras sus mejillas enrojecían.
Aparte de Yuqi, nadie sabía cuan en serio iba su relación con mine. Ni siquiera Shuhua. Ella solo pensaba que Minnie era una chica loca que quería dibujar a Miyeon todos los días.
Suni: Si tanto te gusta, deberías pedirle que sea tu novia ¿No lo crees?
Yuqi estuvo a punto de perder un pulmón debido al ataque de tos que comenzó a tener en ese momento.
Miyeon: Suni… yo… -Tartamudeó.
Se escuchó un silbido.
Miyeon acababa de recibir otro mensaje.
Soojin: ¡Toma su celular, Sana!
Y, aunque Miyeon intentó mantenerlo entre sus manos, Sana fue más rápida y logró arrebatárselo para luego entregárselo a su hermana.
Soojin: Miyeon le ha deseado un buen día al despertar -Notificó a todos los presentes.
Sus hermanos rieron bajo y Doyun rodó los ojos.
Miyeon intentó alcanzar su celular, pero Sana, Yoon y el pequeño espacio para circular se lo impidieron.
Soojin: Minnie le preguntó cómo había estado su noche, y luego comenzó a contarle un cursi sueño que tuvo… También dice que extraña besarla.
Miyeon: ¡SOOJIN! -Chilló horrorizada-. ¡Dame eso! ¡Es privado!
Y en cuando la pequeña le entregó su teléfono, todos en la mesa comenzaron a cantar: “Miyeon tiene novia. Miyeon tiene novia”
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La tatuadora de libélulas
RomanceCho Miyeon es una joven tatuadora de veinte años. Aunque no esta en el podio de los mejores tampoco es realmente mala y todos sus clientes suelen salir de la tienda bastante conformes con su trabajo. Sus compañeros admiran la pasión que desbordan su...