Hasta la muerte- Enjolras (Joseph Quinn)

XIII

Al estar de nuevo fuera de la mansión da un respiro de alivio por saberse bien librado de toda la situación.
El camino está totalmente desierto y sin señales de Fabron por lo que Enjolras decide caminar hacia el bosque en dirección a los caballos.

Su mente está desordenada, revive la desesperación de ser descubierto, pero no hay nada más que se repita una y otra vez con tanta insistencia que el momento del beso ¿Por qué la chica lo besó? Que bien se sintió, los labios suaves de Bernardette en los suyos, el aroma a jazmín de su pelo, su cuerpo pegado al suyo sintiendo el calor de ambos y la sensación de vértigo en el estómago.
No puede contenerse y un suspiro largo sale de su boca.

-Ahí está el galán- se escucha hablar a Fabron que está recargado de un árbol en el camino -creí que no saldrías vivo de allá. ¿Por qué no dijiste que tenías una aventura con la hija de Pierre? Ahora entiendo lo bien que conoces la mansión- se ha incorporado al camino con Enjolras y los dos se dirigen hacia el lugar donde dejaron los caballos hace ya más de 2 horas.

-No tengo ninguna aventura- dice Enjolras un poco molesto -ni siquiera habíamos tenido una conversación, lo único que estaba intentando hacer era darte más tiempo, la mujer estaba dispuesta a llamar a todos los guardias-

-Si claro- dice Fabron incrédulo -Es obvio que entre ustedes hay algo y te entiendo, la chica es excitante, si tú no lo aprovechas yo estoy dispuesto a divertirme con ella en tu lugar-

-No vuelvas a expresarte así de ella- Enjolras ha acorralado a Fabron en un árbol y amenaza su cuello con el puñal que portaba cuando inició la misión - Bernardette es una chica decente así que te voy a pedir que saques su nombre de tu boca y si me entero que anduviste contando lo que sucedió esta noche a alguien más, me va a importar poco que seas parte del grupo de la insurrección-

-Uuuy tranquilo- dice alzando ambos brazos en señal de paz -No sabía que era algo tan importante para ti, solo te recuerdo que esa familia está implicada en cosas muy turbias y no es para nada algo que te beneficie con los líderes-

-Eso no es asunto tuyo- responde Enjolras soltando el agarre y bajando el puñal que apuntaba al pecho- ¿Encontraste los papeles o no?-

-Bueno, pues gracias a tu conveniente ayuda pude revisar cada rincón del estudio, no fue fácil amigo- está alardeando -pero encontré lo que necesitábamos- saca de su bolso un papel con la dirección, coordenadas, hectáreas y construcción de la propiedad sospechosa -todo lo tengo aquí apuntado, no podía tomar los papeles, sería demasiado sospechoso si desaparecen-

-Por lo menos conseguimos lo que queríamos- dice Enjolras acercándose a Sauvage que espera tranquilo al costado del árbol donde está amarrado -mañana te veo en la taberna a la misma hora para entregar la información y saber que paso es el siguiente -sube de un solo movimiento al lomo del caballo y mira desde arriba a Fabron -¿Sabes regresar desde aquí no?- Fabron asiente mientras desata a su caballo y Enjolras se marcha sin despedirse.

Esta molesto por la actitud de su compañero y además de todo confundido por lo que pasó.
Se resiste a aceptar que está teniendo sentimientos por una mujer, una Montparnasse además de todo.
Después de lo que pasó con Emelié estaba convencido que no volvería a enamorarse nunca y que solo sería una pérdida de tiempo interesarse en las mujeres, hasta que Bernardette apareció en su vida poniendo de cabeza todo lo que tenía claro hasta hace un mes.

Han pasado apenas unos minutos desde que se fue de la mansión y ya está pensando si volverá a verla de nuevo, recuerda las palabras de Rosella "luche por ella" "vió en usted algo que no había visto en nadie más" "ella lo escogió" ¿Pero y si solo fue un impulso por la adrenalina del momento? Sería una total vergüenza intentar cortejarla para que al final reciba un rechazo como ha sido desde el primer día que la vió en el baile de inicio de año.
Y está seguro que cuando se entere que es un disidente y está en contra de la corona recibirá un rechazo contundente y posiblemente una acusación con el ejército, no puede arriesgarse de esa forma.

Entre todos sus pensamientos ha perdido la noción del tiempo y sin darse cuenta ha atravesado el bosque hasta llegar a casa, todo gracias a Sauvage que conoce perfectamente el camino y no necesita que lo guíen para llevar a su dueño sano y salvo de regreso.
Después de meter al caballo al establo y darle una buena ración de comida como premio por el buen trabajo de hoy, Enjolras se dirige a casa, necesita tomar un baño, comer algo y leer un poco para despejar su mente.

Por su parte Bernardette ha quedado igual de confundida en su habitación, aún no entiende las razones que la llevaron a besar al chico del que no sabe ni su nombre, ni tampoco porqué se decepcionó al escucharlo decir que no volverá a la mansión.

-No puedes ser tan tonta, seguro es igual a todos los hombres que conoces-
Intenta negar lo evidente, está teniendo sentimientos por él y eso le da miedo.

Esta recostada boca arriba pensando aún en lo que acaba de ocurrir y tratando de descubrir cuáles serían los motivos que lo llevaron a entrar a la mansión, cuando sus hermanas irrumpen en la habitación.

-Bernnie te perdiste de la mejor velada- dice Lorette dejándose caer en la cama y quitando sus zapatos -habia bocadillos deliciosos, miles de chicos lindos para bailar y obvio fuimos las mejores vestidas del lugar.

-Matieu estuvo ahí y preguntó por ti- dice Elise tumbandose en el sillón que está frente a la cama - tuvimos que decirle que estabas indispuesta y por eso habías faltado -Se negó a bailar con otras chicas Bernardette ¿Sabes lo que es eso? -

-Está realmente interesado en ti, dijo que solo fue a verte- Lorette soba la planta de sus pies cansada de tanto bailar -Yo no entiendo porqué no le haces caso, si yo tuviera 3 años más ya estaría casada con él, es tan atractivo y amable- suspira y abraza a su hermana que la ve con un poco de desagrado.

-Te lo regalo- dice Bernardette quitando el brazo de su hermana que descansa al rededor de su hombro -ya les dije que no me interesa y no pienso volver a salir con él y mucho menos casarme, es tan antipático y aburrido que solo hable del ejército y de su amor por el rey, seguro si pudiera se casaría con él- sonríe de imaginarse a Matieu pedirle matrimonio al rey.

-Bueno y tú qué hiciste en nuestra ausencia ¿No te aburriste aquí sola?- Elise cambia el tema -No puedo creer que mis padres creyeran que de verdad estabas enferma-

-Soy una buena actriz- presume Bernardette con una sonrisa -en realidad no tuve tiempo de aburrirme, fue todo muy emocionante en serio tenían que haber estado aquí- su boca traviesa estaba a punto de traicionarla contando todo lo que sucedió, pero pudo callarse a tiempo.
-Bueno me refiero a que disfruté mucho estar sola, pude leer en paz sin escucharlas pelear por vestidos y pinté un poco-

-¿Ya nos vas a enseñar lo que tienes en ese bastidor grande que escondes?- pregunta curiosa Lorette mientras se dirige a la esquina con pinturas

-NO NO NO- Bernardette se levanta de un salto y evita que su hermana chismosa vea la pintura.

No puede dejar que nadie la vea, es vergonzoso saber que está pintando al chico que hace unos minutos estaba en su habitación besándola con pasión.