Esta tarde están todos reunidos de nuevo en la taberna, Marius ha llegado un poco retrasado, está pasando el mayor tiempo con Cosette y se ha distraído de todo lo que tiene que ver con la insurrección.
El grupo de amigos lleva una hora aproximadamente esperando que llegara, para este momento Grantaire ya está alcoholizado cómo es su costumbre, Enjorlas lo ve con desagrado, a veces piensa que tenerlo en el grupo solo es una carga, no hace nada, siempre tiene miedo y para colmo en las reuniones siempre acaba perdiendo la conciencia, Marius no es muy diferente, sigue teniendo dudas y aún no acaba de aceptar todos los privilegios que tuvo y puede recuperar cuando quiera, aunado a eso su reciente enamoramiento lo distrae de lo importante, no pone el empeño suficiente y Cosette está primero que cualquier otra cosa, lo que reafirma que no puedes mantener a una mujer feliz si estás intentando luchar por la libertad e igualdad.Courfeyrac es el único que está realmente en sintonía con Enjorlas, participa en todas las reuniones y pone de su parte para seguir llamando adeptos y animar a la gente del pueblo a unirse a ellos, por lo menos tiene un buen amigo con el cual hablar todo el tiempo.
—¿Cómo te fue en el baile?— pregunta Marius apenas ha llegado —Fue una tortura— Enjorlas se deja caer en su asiento para recalcar mucho más su sentimiento —No puedo creer que estuve ahí 3 horas y no morí.
Dejando de lado todo eso por lo menos la misión funcionó y pude escuchar muy buena información— todos se acercan más a él para hablar más bajo y no perder ningún detalle —El rey pronto anunciará nuevos impuestos— todos están sorprendidos, la gente no tiene dinero suficiente para comer y ahora deberá pagar más al parlamento —Dicen que hay infiltrados en los grupos— voltea a ver fijamente a Marius sospechando de él —¡No me veas así!— sabe lo que está insinuando Enjorlas con su mirada- No soy un infiltrado, no estaría sacrificándome a vivir en un cuarto más pequeño que mi baño al lado de unos vecinos ruidosos solo por servir al rey —No sé, todos son sospechosos y tú eres el más nuevo del grupo— Debemos estar muy atentos y no hablar con cualquiera— dice Courfeyrac para mediar entre los dos —Confío en Marius se que es honesto— abraza a su compañero por los hombros para darle ánimos —Tengo mis dudas— Dice Enjorlas antes de pasar al siguente punto —Debemos tener mucho cuidado en las calles y mantenernos en el anonimato todavía más, están intentando eliminar gente poco a poco sin que el pueblo se de cuenta —Eso explicaría porque han desaparecido algunos compañeros de zonas cercanas— Courfeyrac está haciendo conjeturas —Escuche por las calles que hace dos días unos hombres se llevaron por la fuerza a Thierry— Contesta Marius todavía más bajito para asegurarse de que nadie más escuche.
—Traten de no levantar sospechas y no hablen con cualquiera y tu— señala a Marius — no hables nada de lo que se dice aquí con tu noviecita Cosette nunca sabremos quién está realmente de nuestro lado— toma el tarro de cerveza y se relaja en su asiento después de soltar toda la información —¡Hey! A ella no la metas en estos asuntos, no sería capaz de delatarme— Marius está ofendido por la actitud de Enjolras —¿Cómo estás tan seguro?— pregunta desafiante —Porque me ama— le responde confiado —Pero que vas a saber tu de eso sí nunca te has enamorado, no tienes ni idea— Grantaire a despertado de su siesta por la acalorada discusión —¡OH SI QUE SE HA ENAMORADO!— grita embriagado y todos lo voltean a ver —¿O no Enjorlas? Cuéntales de la chica que cortejaste alguna vez pero sus padres no creyeron que fueras suficiente— todos están viendo a Grantaire sorprendidos por la información que está soltando aún ebrio —¡Cállate zascandil!— Enjorlas está molesto por lo que está escuchando, alguna vez entre cervezas le confesó a Grantaire de una hermosa chica rubia que conoció a los 17, fue su primer amor realmente, se reunían a escondidas algunas veces, podían hablar de cualquier cosa y sentía que era la indicada, pero el día que la joven lo convenció de por fin hablar con su padre no salió del todo bien, todo esto sucedió previamente al golpe de suerte de Léopold por lo que Enjorlas aún vivía en la pobreza y por supuesto que el padre de la chica no acepto la relación, después de todo el amor no pone comida en tu mesa, carbón en la chimenea, un abrigo cuando la noche se vuelve fría; No había nada que pudiera ofrecerle y terminaron por separarlos, dolió mucho y eso fue una de las razones por las que Enjorlas se concentro tanto en el pueblo y sus injusticias, fue la manera en la que pudo sobrellevar el dolor en ese momento, tiempo después se enteró que la chica había contraído matrimonio con un caballero de Londres y se marchó de París.
No creyó que Grantaire recordaría la historia, estaban tan ebrios esa vez que él solo tiene lagunas mentales de lo que sucedió esa noche, pero parece que el gordo cobarde tiene buena memoria.
—Así que el señor de piedra si tiene corazón— se burla Marius -cuéntanos de ella, no puedo creer que no confiaras en mi pero si en este- le reclama Courfeyrac señalando al otro que ya ha caído dormido de nuevo como si no hubiera soltado el mayor secreto de Enjorlas —No tiene importancia, eso paso ya hace mucho y ahora no tengo tiempo para ese tipo de cosas— Enjorlas está molesto, ahora no podrá librarse de las burlas de sus compañeros —Tengo que irme, debo ayudar a mi madre con algunas cosas en casa— está poniendo un pretexto, recordar el asunto nunca le cae bien y necesita estar solo, montar a caballo por el bosque para relajarse y sentirse un poco mejor.

ESTÁS LEYENDO
Hasta la muerte- Enjolras (Joseph Quinn)
Fanfiction𝓙𝓮 𝓷𝓮 𝓿𝓲𝓿𝓻𝓪𝓲𝓼 𝓺𝓾𝓮 𝓹𝓸𝓾𝓻 𝓽𝓸𝓲 1832 Paris Francia Sus ideales parecían bastante claros. No había manera de que se desviara del objetivo: La revolución y la igualdad de derechos para cada habitante de Francia. ¿O sí?