Una Rueda en el Tiempo

Capítulo II: Una pregunta difícil de responder

Hola a todos! Bueno, acá agregué algunas ideas que me pidieron. 

Según los libros Drogon es bastante más pequeño que la mayoría de los dragones de la danza de dragones, así que respete eso acá, aunque en la serie lo hacen ver bastante grandecito. Pero yo quería respetar los tamaños del libro, y me pidieron también que hiciera esa diferencia en algunos mensajes, así que si lo hice.

Me preguntaron si Daenerys iba a tener un interés romántico en esta historia, y la verdad es que si, pero no del tiempo correspondiente, sino alguien que también viajará en el tiempo, y no será Jon Snow porque lo detesto.

Los invito a comentar, y si quieren dar ideas, las leeré y veré si puedo ponerlas de alguna manera jejeje.

Besos y abrazos.

Daemon Targaryen no podía creer lo que veía, bajó hacia las escaleras de piedra de Rocadragón casi al mismo tiempo que Daenerys lo hizo, seguido de su familia.

Observó a la chica que decía venir del futuro correr hacia el dragón, y observó como apoyaba su frente contra el dragón y la gigantesca criatura parecía tan en calma con ella, como si tuvieran una conexión mucho más fuerte que cualquier jinete de dragón. 

Daenerys corrió hacia Drogon y cerró sus ojos disfrutando de estar cerca de su dragón nuevamente. Había perdido a Rhaegal y Viseryon, solo le quedaba uno de sus amados hijos. Los únicos hijos que alguna vez tendría. Había tenido miedo de perderlo también, y al final había sido él quién la había perdido a ella.

La habían traicionado, pero su dragón jamás la traicionaría. Acarició las escamas del dragón para inspirarle calma, estaban juntos ahora, no comprendía cómo, no comprendía de qué manera drogón había llegado a ese tiempo. Pero estaba junto a él ahora, no estaba sola en un lugar desconocido.

Mientras Daenerys se reencontraba con Drogon, no era solo la conexión jinete-dragón de esos dos lo que sorprendía a Daemon, ni tampoco que el gigantesco animal hubiera aparecido allí de repente con un destello cegador.

Lo que le sorprendía, era que no se veía un dragón con esas características desde Balerion, el terror negro.

Él conoció a Balerion, lo vio en sus últimos días de vejez. Y ese dragón que veía ahora, era por lejos, el más parecido a Balerion que había visto, aunque en tamaño, aún le faltaba bastante por crecer.

Ese dragón no debía tener más de cinco años, pero era casi del tamaño de Syrax. 

Avanzó hacia donde estaba la chica y ella se dio cuenta de su presencia cuando él ya estaba cerca.

- Cuidado, Drogon no está muy acostumbrado a que los demás se acerquen a él- dijo Daenerys que sabía que Drogon no era muy amigable con las demás personas.

Sin embargo, ella se sorprendió de que Daemon ni siquiera hizo caso de sus palabras y simplemente se acercó a Drogón.

Recordó que no estaba en su tiempo, donde cualquier persona se aterraría al ver a un dragón porque en ese tiempo los de ella eran los únicos que vivían, estaba en el tiempo donde la casa Targaryen aún gobernaba los siete reinos y los dragones eran algo común para cada Targaryen.

Daemon caminó hacia Drogón y Daenerys lo escuchó hablarle en alto valyrio. 

- Lykiri- dijo Daemon hablando en alto valyrio y a pesar de que el dragón rugió ante la cercanía de Daemon, pareció quedarse completamente en calma.

Daenerys observó como él tocaba las escamas de Drogon, como si comprobara algo, aunque ella no sabía exactamente que.

- Él último dragón que vi con estas escamas era Balerion- dijo Daemon explicándole que era lo que él estaba comprobando.