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Dream salió de la habitación tras explicarle el plan a los reyes, los cuales comenzaron a informar a las tropas del posible ataque del Sindicato. El caballero llegó al ala oeste, lugar donde los capitanes se preparaban para cumplir la orden real, y se dirigió específicamente a tres de ellos que al verle no dudaron en saludar a su amigo.

–¡Hey Dream!– saludó Sapnap al verle llegar.

–Hola, tengo órdenes reales de que dejéis a vuestras tropas al cargo de Bad, vosotros vendréis conmigo en otra misión– explicó Dream.

–¿Sólo nosotros cuatro?– cuestionó uno de ellos, un chico rubio de ojos azules.

–En efecto, ahora os explicaré el plan, tenéis diez minutos– y con esto Dream vio a los tres chicos asentir y caminar hacia sus tropas para avisarles del cambio de planes.

No habían pasado ni cinco minutos cuando los tres caballeros volvieron a donde Dream se encontraba para que esté pudiese explicar la nueva misión.

–Bien, como ya sabéis el príncipe George ha sido secuestrado– comenzó a hablar Dream.

–Nos han informado de que se trata del Sindicato– respondió el último hombre, era relativamente alto, con el pelo castaño y unos ojos color miel parecidos al amarillo.

–Pues así es Karl. Nuestra misión es sacarlo de la base en la que lo tengan retenido, no tenemos que preocuparnos por nada más.

–¿Ni en capturarlos?– cuestionó el caballero rubio.

–No, nuestro objetivo es sacar al príncipe de ahí sano y salvo, recordad que ellos tienen a Technoblade, Punz.

–Estoy de acuerdo, estaríamos en desventaja si nos capturan a alguno de nosotros– añadió Sapnap.

–Es por eso que os he seleccionado a vosotros de entre el resto de caballeros– dijo Dream– Ahora el plan, tenemos claro que, según lo que cuentan los pueblerinos, la base del Sindicato se encuentra en las montañas nevadas hacia el este del palacio. Ningún caballero que haya pasado por ahí ha vuelto a palacio.

–Es casi seguro que la base es ahí pero ese valle es prácticamente impenetrable– añadió Karl– he perdido muchos soldados ahí.

–Está claro que habrá que tener cuidado con ellos si es que queremos colarnos en su base– añadió Dream– pero cuento con que podamos.

Dream comenzó a explicar el plan que tendrían que llevar a cabo ese mismo día, jugaban a contrarreloj puesto que no sabían cuanto tiempo de vida podía quedarle al príncipe.

Los cuatro del grupo iniciaron el camino en sus caballos en cuanto todos hubieron entendido el plan y se dirigieron al este, en dirección a las montañas nevadas que tantas leyendas urbanas protagonizaban.

Tras al menos una hora de viaje a caballo la nieve comenzó a amontonarse a los lados del camino, a medida que la altura aumentaba también lo hacía la nieve. Habían dejado atrás L'Manburg hace ya más de media hora por lo que caminaban sin un rumbo fijo hacia la supuesta base del Sindicato.

Tratando de no perder altura en la montaña y mirando fijamente al valle a sus pies finalmente a Sapnap le pareció divisar algo parecido a una edificación.

Debido a la niebla del lugar debían estar en completo silencio, no sabían cuan cerca podía estar el enemigo ni cuando esté podría atacarles. Estaban en el territorio rival por lo que eso los colocaba inmediatamente en desventaja.

Al cerciorarse de que realmente era una vivienda lo que veían y no cualquier otra cosa el plan dió comienzo.

Sapnap se mantendría en la montaña escondido y vigilando el perímetro. Al ser el capitán asignado para el cuidado de las murallas estaba claro que era el mejor para ese puesto en el plan.

Rewrite the stars - DreamnotfoundDonde viven las historias. Descúbrelo ahora