Moira pasó sus últimos días en Qatar aprovechando cada momento, sabiendo que iban a ser los últimos. Acompañó a su hermano y a su papá a los museos del futbol y a cada actividad que podían encontrar, recorrieron las diferentes calles, yendo de un lugar para otro, hasta que tuvieron que pedir indicaciones, porque se habían perdido totalmente. Sus piernas dolían y estaba más bronceada que de costumbre. Por suerte se había puesto bronceador, porque sino lo más seguro era que iba a terminar roja como un tomate. No podía decir lo mismo de su inteligente hermano, que había dicho que el bronceador no hacía nada y estaba bien así. Ahora se encontraba totalmente rojo y su viejo lo había cagado a pedos por no hacer lo mismo que su hermana. Moira no quería ser mala, pero aún siendo menor que Mateo, era mucho más madura e inteligente.
En una de las salidas, le había contado a su hermano sobre las promesas que habían hecho con Julián si Argentina ganaba la copa del mundo. Mateo se había puesto feliz, porque al igual que ella, lo más lejos que habían ido era a Santa Teresita a vacacionar y bueno, ahora habían conocido Qatar. El chico estaba seguro que Argentina iba a ganar el mundial, según él, había muchas señales de que su país iba a ser campeón. Así que, su hermano también estaba completamente seguro que se iba a ir con ella de vacaciones a Inglaterra. Desde el momento en que se lo había contado, él ya había planeado excursiones, lugares a dónde visitar y por supuesto, le había dicho que era una obligación ir a la cancha para ver a los ingleses jugar. Lo poco que la fotógrafa sabía del Manchester City, era por las conversaciones que tuvo con su pareja.
En cuanto a Julián, sus momentos juntos habían sido breves y siempre eran interrumpidos, ya que Scaloni los tenía bien cortitos cada vez que el futbolista desaparecía para ir con ella. Juli le contó que su director técnico lo cagó a pedos en privado y le dijo que aguantara sus hormonas, hasta que terminara el mundial. Moira se había reído, lo único que tenían permitido hacer era darse besitos y abrazos, cosa que Enzo y Candela no dejaban pasar por alto, ya que todo el tiempo los estaban jodiendo cuando se daban un beso que duraba más de cinco segundos. Cada vez que el futbolista tenía un momento libre, se encontraban en algún área pública o en su habitación y hablaban. Sus charlas duraban horas y nunca se cansaban, podían comenzar hablando de temas simples y ella terminaba contándole teorías conspirativas, también le hablaba de sus libros favoritos y la historia completa de Taylor Swift. En el caso del futbolista, la quiso introducir al fútbol y le explicó sobre los jugadores más importantes argentinos, sobre los diferentes mundiales de fútbol y Messi. Julián era igual de fan de Messi que ella lo era de Taylor Swift.
—¿Viste la cuenta de Instagram de Televisión Pública?— preguntó ella, mostrándole su celular astillado.— No sé quién maneja esa cuenta pero quiero ser su amiga. Necesita que le aumenten el suelo.
Julián se rio ante su emoción, porque él también había notado las ediciones que subían haciendo referencia a la ídola de su novia. Moira siguió en Instagram, mirando las diferentes historias y publicaciones. Las personas habían dejado de hablar mal de ella, o al menos, la mayoría. Los hinchas argentinos estaban enfocados en el mundial y los malos comentarios habían desaparecido bastante, cosa que agradecía. Candela le había contado que las cuentas dedicadas a Julián Álvarez habían compartido cosas a favor de la pareja, así que al menos tenía mucho menos odio en su contra.
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Spiderverse ✓ ⋆ Julián Álvarez 🕸️
Fanfiction"Te pareces un poco a Tom Holland, arañita." Moira disfrutaba ver las películas del Hombre Araña con Julián, mientras se besaban en la privacidad de la habitación. astrolupin © COMPLETA