Herencia

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El día que Irene tanto lamentaba había llegado, su padre había fallecido y lo primero que hizo fue llamar a taeyeon, quería que estuviera ahí con ella.

Claro la castaña no tardó en llegar junto a su madre y hermana, cuando estuvo ahí la menor la abrazó y su llanto fue desconsolado, había perdido a sus dos padres muy joven y era duro para ella a pesar de hacerse la seria.

Taeyeon se encargó de tranquilizarla y consolarla mientras el asistente de su padre junto a Boa preparaban su ceremonia de despedida.

En cuanto a Jessica, ella simplemente estaba ahí, presente, aunque un poco shokeada.

Las horas pasaron y las cuatro vistieron de negro, se dirigieron al salón, Irene se paró a solas para comenzar a recibir a aquellos que iban a dar sus respetos hacia la memoria de su padre.

Taeyeon y Boa se encargaron de los invitados sin descanso por horas, no era algo difícil para ellas.

-cariño, Irene no está bien, no a comido nada aún- la pelinegra se acercó a su novia para llamar su atención.

-esta bien, iré con ella- taeyeon se había ocupado tanto que había olvidado por completo a su hermana.

Las dos se acercaron al lugar, la pelinegra se quedó a una distancia considerable mientras que taeyeon se acercaba al lado de la menor, no había nadie ahí, aún así debía estar alguien presente siempre.

-deberias ir a comer- Irene alzó la mirada para ver taeyeon.

-no tengo apetito- la castaña extendió su mano para tomar la de ella, quería darle fuerzas.

-me quedaré- llevó de apoco su mano al brazo de la menor y le quitó el brazalete para luego mirarlo -sabes lo que pienso sobre que te alimentes mal-

Sabía que tenía esa responsabilidad como su hija, a pesar de todo lo era y lo había alcanzado a vivir con él, solo que no había podido perdonarlo correctamente.

-yo te acompaño Irene- la castaña miró a su novia y a su hermana, luego se puso el brazalete para quedarse ahí.

Taeyeon volvio a ver a Tiffany y solo le artículo un gracia mientras ella guiaba a Irene del brazo, podía confiar en que se alimentaría.

Las personas siguieron llegando a lo largo del día, mientras taeyeon los recibía, muchos no sabían quién era porque todos estaban al tanto de que Rain no tenía familia y la madre de Irene se había marchado al extranjero luego de su fallecimiento, así que no habían parientes directos.

Muchos se enteraron de la primera familia de Rain, de sus hijas y de la mujer que la mayoría pensaba nunca iba a volver a ver, pero que estaba ahí presente en ese momento.

Una semana paso desde ese día, taeyeon se quedó en la mansión con Irene, a veces dormían juntas, otras la menor quería estar sola pero la castaña la acompañó lo que más pudo.

Ahora mismo estaban las cuatro otra vez frente al abogado de Rain Kim, ni jessica, ni Taeyeon, ni mucho menos Boa querían estar ahí porque no esperaban nada luego de su fallecimiento.

-agradezco mucho la presencia de las 4, Boa Kang, Taeyeon Kim, Jessica Kim e Irene Kim- taeyeon soltó un suspiro, solo esperaba que él no le hubiese dejado nada, todo ese dinero le correspondía a Irene y es lo que pensaba -ahora procedere a leer el testamento de Rain Kim-

Boa apretó la mandíbula, no quería ser parte de ese testamento, porque temía que su pasado la alcanzara, no con Rain, sino con su verdadera familia.

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