Te Amo

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-tiffany..- la castaña ni siquiera pudo decir algo más porque fue arrastrada por la pelinegra lejos de todos a una sala.

Ambas se vieron nuevamente cuando Tiffany la soltó de la muñeca, la pelinegra no sabía si debía sentirse herida o no.

-te ves hermosa- claro la pelinegra llevaba un lindo vestido ajustado a su cuerpo, lucia un pequeño escote.

-es todo lo que dirás después de tres años? Te fuiste sin decir nada- al menos tiffany quería una explicación, después de eso podría seguir su camino, es lo que pensó.

En ese momento estaba algo molesta pero por alguna razón también se sentía más aliviada de tener a taeyeon en frente de ella una vez más.

-te amo- esas palabras por fin se escucharon entre ambas, nunca se lo dijeron y nunca pensaron que la castaña sería la primera en decirlo.

Tiffany la vio algo sorprendido, su mal humor se fue, pero por alguna razón tampoco se sintió mucho mejor.

-qu..que dijiste?- porque sentía en ese momento que era solo un lindo sueño.

-que te amo- porque no podía simplemente creerle luego de sus rechazos y que se marchara.

-no me hagas esto- la voz de Tiffany se apagó totalmente.

-Tiffany, si me fui sin decir nada fue porque necesitábamos que fuera así, yo necesitaba hacer esto- pero en cambio la voz de taeyeon era cálida y calmada.

-porque? Porque no pudiste decirme nada- la pelinegra estaba presa del enojo.

-porque si lo sabías ibas a buscarme- quería saber todo, quería entender a taeyeon, quería creer en ella.

-y tú no querías que yo te estorbara no?- esas palabras salieron sin filtro de parte de Tiffany, por mucho tiempo se había sentido de esa forma para la castaña.

-no vuelvas a decir algo así porque no es cierto- taeyeon entendió que no podía simplemente decirle que la amaba porque la había lastimado por mucho tiempo.

La castaña se acercó a ella y tocó su mejilla, estaban a centímetros, pegó su frente a la de ella y Tiffany bajó por fin sus defensas.

-te haz alimentado bien?- fue en lo primero que pensó taeyeon, sabía que la pelinegra era horrible con sus horarios para alimentarse.

-casemonos- pero Tiffany quería decir algo más, quería saber si esta vez iba a decirle que si.

-deberia hacerte una propuesta romántica?- la castaña se alejó un poco para verla bien con una suave sonrisa.

-tae..- la pelinegra se sintió algo avergonzada, su corazón estaba a mil.

La castaña volvió a pegar su frente a la de Tiffany cerrando los ojos, pudo sentir su rico aroma, espero tanto porque algo así pasara entre ambas, las dos lo hicieron.

Taeyeon cerró la brecha entre ambas y beso a su pelinegra de forma suave, era un beso anhelado y dulce, se podía sentir el cariño entre las dos.

-fue un si?- tiffany por fin posó sus manos en la cintura de la castaña.

-fue un si- una electricidad recorrió su cuerpo con esa respuesta de taeyeon, era lo que había estado esperando.

Pero tiffany aún tenía un montón de preguntas de por medio, aún no podía asimilar todo lo que estaba pasando.

-en donde estuviste todo este tiempo?- la pelinegra siguió sosteniendo de taeyeon, no quería que huyera, aún sentía cierto miedo.

-en Estados Unidos, fui ahí a estudiar- la castaña se escuchó bastante animada -soy chef tiffany-

-eso es grandioso- tenía una gran sonrisa, eso le alegro a la pelinegra.

-lo es, se que no es mucho para estar contigo pero si me vuelvo alguien reconocida entonces podré..- la castaña aún seguía con lo mismo y Tiffany la detuvo.

-no sigas, yo me siento orgullosa de que hayas estudiado algo que te gusta y no me importa si no eres reconocida, yo te amaré de todas formas- las dos se sonrieron, de algún u otra forma ya estaba todo bien, taeyeon había vuelto.

-en las buenas y en las malas?- la castaña también quería sentirse segura de que Tiffany aún la quería.

-en ambas- porque había pasado mucho y su temor siempre fue que cuando volviera ella ya no sintiera lo mismo.

Se volvieron a besar, las manos de taeyeon se movieron por la cintura de la pelinegra y la pegó a ella lo que más podía, parecía que se fundían con sus cuerpos mientras se besaban y recuperaban el tiempo perdido.

-tiffany- ambas se separaron al escuchar aquella voz.

-papá- la pelinegra se vio algo exaltada.

-señor hwang es un placer volver a verlo- la castaña se inclinó para saludarlo formalmente.

-taeyeon, llegaste a tiempo- el hombre ingresó acercándose a ambas.

-como lo prometí- taeyeon sonrió suave -estudie y bueno aunque no sea demasiado soy Chef ahora, comencé a trabajar hace un par de días en un restaurante de la familia Kim-

-ustedes, padre lo sabía?- tiffany soltó un suspiro, que estaba pasando ahora mismo.

-si lo sabía- no podía entenderlo, acaso se habían puesto de acuerdo y por eso su padre no le insistió sobre casarse en ese tiempo?.

-fueron tres largos años- la castaña extendió su mano para tomar la de su pelinegra.

-ahora van a casarse?- el señor hwang quería estar seguro.

-lo haremos, prometo hacer una propuesta romántica- la castaña estaba tan animada que simplemente hablaba sin filtro.

-no lo digas así- las mejillas de Tiffany se tornaron rojizas.

-es un secreto?- y una inocente taeyeon la quedo viendo luego de la pregunta.

-no es eso- mientras que la pelinegra medio sonreía, entre avergonzada y feliz.

-bueno, tiffany debes estar con los invitados, varios preguntan por ti- pero su padre las sacó de su momento -así que luego podrían hablar-

-es cierto, dejé a Irene sola- la castaña había olvidado por completo a su hermana.

-entonces vamos- el señor hwang fue el primero en acercarse a la puerta, mientras Tiffany seguía de la mano de la castaña, no iba a soltarla hasta que se fuera con Irene.

Los tres salieron de ahí, taeyeon se separó de los hwang para buscar a su hermana, cuando la vio se acercó a ella y tomó de su mano, le dio una explicación y ella entendió enseguida, después de todo el propósito de llevarla fue para encontrarse con Tiffany.

Siguieron toda la noche en aquel lugar, ambas no se quitaban la mirada de encima, aunque estaban lejos Tiffany fruncia el ceño al ver a las chicas revolotear al rededor de taeyeon y la castaña hacia una mueca cada vez que veía como su pelinegra sonreía con esos chicos hijos de papis ricos.

Al final de la noche por fin se vieron desocupadas, taeyeon iba a acompañar a Irene a casa pero ella no se lo permitió, apenas y la dejó llevarla hasta el carro.

Mientras tanto Tiffany la esperaba porque esa noche no iba a escaparse, ella quería dormir a su lado, porque la extrañaba demasiado.

Cásate Conmigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora