⭐Nueve⭐

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                                                                                                Año 525  de la era Terrestre, Clan de Jeon.

Min Young tenía dieciséis años, caminaba libremente por el sendero abierto en la pradera azul hacia el lago de los peces cristalinos. Amaba pasear y sentir el viento entre sus cabellos rojos. 

Se sentó en la orilla del lago con los pies en el agua riendo por las cosquillas que le daba el deslizamiento de los pececitos entre sus dedos.

Su corazón saltó cuando sintió a su amado Hyun Bin.

Se sentó a su lado con un suspiro.

— ¡Amada mía!—y se fundieron en un abrazo y un pequeño beso que le dio Hyun Bin en su pequeña nariz.

—Tengo un regalo para ti, cierra los ojos.

Ming Young cerró sus ojos, con una sonrisa nerviosa.

—Ábrelos.

Ming Young mira el huevo gigante de color negro con pintas rojas que tenía en sus manos.

Mira a Hyun Bin con lágrimas en los ojos.

—¿Dónde lo encontraste?

—Me lo regaló el brujo Goong, es uno de tres que tuvo la belleza negra. 

— ¿y...?

— Es para ti, Amor mío, debes cuidarlo. 

—¡Claro que lo haré! será un bello Cisne Negro. Te llamarás Phensho —le dice Min Young, dejando un pequeño beso en el huevo que se iluminó al tacto.

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                                                                                                                                                  Actualidad.

Jimin estaba sentado con los ojos en su taza de té, no hablaba y tenía la cara aún sonrojada.

Tae se puso de pie, —debemos ir a trabajar.

Jin y Jimin se pusieron de pie, y tomaron sus mochilas con sus documentos.

—Jin — habla Tae —Debemos conseguir documentación a los chicos, ¿podrías hacerlo después de volver del trabajo?

— Si

— Vamos a acompañarlos, debemos comprar teléfonos y saber dónde se encuentran — dice Jungkook mirando a un Jimin aún más sonrojado.

— Vamos entonces.

Los seis chicos salieron del edificio. Cuando Jungkook llega a la entrada, pasa por una extensión de prado donde habían dos ciruelos japonés.

Se detiene porque su cuerpo se estremece, una alerta.

— ¡Jimin!—le dice Jungkook.

Este se gira, —mira lo que encontre.

Este se acerca y se coloca en cuclillas tal como Jungkook frente a él.

Lisa y Jackson ya habían captado y rodearon a los dos.

—Jimin, toma mi mano y cierra los ojos.

Cuando Jimin hace eso, siente a Taemin en el edificio de al lado. 

—No te asustes, es un brujo, — le dijo Jungkook.

—No puedo leerlo — le dice Jimin frustrado.

—Trata Jimin, sé que puedes.

La estrella del SurDonde viven las historias. Descúbrelo ahora