La estrella del Sur

⭐ Dieciocho ⭐

Jungkook se baja de Phensho.
Se arrodilla junto a Jimin, su cuerpo frágil estaba herido, y una lágrima caía por el costado de sus ojos.

Jungkook lo tomó pasando un brazo por debajo de sus rodillas y la otra por detrás de su espalda y Jimin abre sus ojos, adormilados y rojos,

— encontraste a Phensho, gracias Jungkook, déjame tocarlo, quiero sentirlo.

—Ya lo harás cariño, —le dice Jungkook mientras camina con él hacia la gran ave.

Este hace un ruido agudo, y  Jimin le acaricia alrededor de su ojo rojo. — Lo abraza como puede,—te extrañe tanto.
Phensho cierra sus ojos disfrutando del tacto de Jimin.

Jungkook sube a su lomo y deja a Jimin ahí mientras acariciaba sus plumas, suaves y firmes en sus manos.

Jackson y Lisa son llevados por Jin y Tae hacia la aldea, las heridas de sus brazos se veían graves pero ellos se sentían orgullosos, habían ayudado a la estrella,  todos lo reciben para poder curarlos.
Se encuentran con Nam y Jhope arrodillados aún junto al cuerpo de Yoongi.

Tae golpea un poco a Nam sobre su hombro haciendo que este levante su cabeza mirándolo.

—Brujo, puedes darle ritual y sepultura a Yoongi aquí, fue un héroe pese a todo, dio su vida por la estrella, todos tenemos la oportunidad de hacer lo correcto aunque sea al final de nuestros días.

Nam se abraza a Jhope, el dolor de sus corazones lo sentían esos dos, Tae y Jin los abrazan para dar consuelo.

Jungkook es recibido con aplausos hasta que Alaska ve a Jimin con el abdomen destrozado.
—Llévenlo a la cabaña, lo curaremos de inmediato.

Jimin estaba inconsciente ahora, se sentía solo un leve respirar, y una lágrima caía por su ojo.

Jungkook lo lleva a la cabaña y Alaska se acerca a él tocando su abdomen desgarrado

—Necesito saber si está bien, murmura.

Toco su corazón ahora opaco que latía muy lento, tomo su abdomen y sonrió, —Está bien, esa herida no fue tan profunda.

Jungkook la miro con una sonrisa pero con interrogación, no sabía a qué se refería ese comentario.

—¿De que hablas Alaska?— pregunta  Jungkook con su ceño fruncido no entendiendo de que se trataba.—Me extraña brujo, ¿no te has dado cuenta?

Jungkook miro a Alaska y está le pidió que cierre sus ojos.

Alaska acerco la mano de Jungkook para que colocara esta sobre la parte baja del abdomen de Jimin y sintió el segundo corazón latiendo, tan rápido como la lluvia en tempestad, fuerte y preciso.

Jungkook abrió sus ojos, y una tonta sonrisa se dibujó en su rostro

—Tú eras la semilla ¿recuerdas?— le dice Alaska— y está creciendo dentro de Jimin para convertirse en la nueva estrella, tu podrás ahora ser feliz junto a ella, criar a tu hija y morir junto a Jimin cómo los mortales. Todo lo que ha sido escrito está hecho.

Los curanderos llegaron con sus esencias, aceites ,remedios, vendas, cubriendo a Jimin y curaron la herida que día a día sanaba.

Jungkook sentía él corazón  de Jimin mejorando, y colocaba la mano en el vientre  para sentir el latido del segundo corazón.

Le hablaba al oído a Jimin porque sabía que estaba en un sueño profundo y reparador y no lo ayudaría a despertar, Jungkook quería que su estrella descanse todo lo que tenía que descansar para volver a amarlo y así estar juntos hasta su muerte.