Capítulo 24

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Plaza Xinhu (3)

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Acababan de agacharse hacia el otro lado cuando inmediatamente escucharon unos pasos.

Al cabo de un rato, Xu Jin asomó la cabeza y miró a la gente que entraba y salía. El policía que custodiaba la entrada del cobertizo tenía una pistola en la mano, pero la cabeza gacha, y de vez en cuando levantaba la vista y bostezaba, y la persona que acababa de pasar resultaba llevar la misma ropa que el que custodiaba la puerta.

En este punto, había un plan en mente.

Dos hombres con uniforme de policía y pistolas en las manos, estaban uno al lado del otro, discutiendo, qué iban almorzar hoy.

Estaban dando la vuelta a la esquina cuando sintieron un dolor en el cuello y perdieron el conocimiento.

Arrastraron a los dos hombres a una tienda y les cambiaron la ropa.

Cuando volvieron a salir, los dos se habían cambiado.

Con la pistola en la mano, Lu Si se bajó el sombrero y saludó a Xu Jin: "Xu ge, qué buena idea." – Luego susurró: "¿Qué haremos ahí dentro?"

Xu Jin miró a los que estaban allí y dijo: "Todavía no estoy seguro, entremos primero."

En ese momento se acercó otra patrulla y los dos hombres pasaron apresuradamente con la cabeza gacha.

"Hey, has ido bastante rápido esta vez." – Dijo el portero al ver a los dos, Xu Jin y Lu Si.

Sin preguntar a Xu Jin quiénes eran, los dos compinches dijeron una palabra y dejaron que se escabulleran ágilmente, sin importar si eran los guardias o si tal vez los dos bastardos eran vagos y buscaban a alguien que les sustituyera, siempre que fueran humanos los dejarían pasar.

Lu Si y Xu Jin se cambiaron con facilidad y entraron en cuanto se fue la patrulla.

El exterior estaba cubierto por un gran cobertizo, pero no se podía ver lo que había dentro.

Una vez dentro, Lu Si echó un vistazo al interior, lleno de grandes y pesados camiones.

"¿Quién está ahí?" – En cuanto sonó la voz, Xu Jin tiró inmediatamente de Lu Si hacia la parte trasera de un camión.

El hombre que acababa de ver la silueta se acercó, sin ver a nadie, por un momento pensó que estaba ciego.

El hombre de mediana edad a su lado se acercó: "Lao Er, ¿qué pasa?"

"Acabo de ver una figura." – Dijo el hombre que tenía el mismo aspecto que el de al lado pero con barba alrededor de la boca.

¿No era la misma voz masculina que acababan de escuchar dentro de la tienda?

Lu Si giró la cabeza para mirar a Xu Jin y vio que tenía los ojos bajos y escuchaba atentamente, así que Lu Si también tuvo que escuchar pacientemente su conversación.

"Hey, mira hacia otro lado, estamos vigilando afuera, ahora sin más preámbulos, tenemos que comprobar estos suministros y enviarlos a la ciudad de Jianfei más tarde."

"Mmm, tú sigue adelante, yo revisaré este lado."

A continuación, se oyeron fuertes pisadas.

Después de un momento.

Otra voz sonó: "Ayudante."

"Dile a Wang Shan y a los demás que giren en el cruce de la esquina de la ciudad de Jianfei y la ciudad de Jingyang en la parte trasera de las seis grandes caravanas mientras transportan suministros a la ciudad de Jingyang."

"Eh...." La voz llevaba un matiz de vacilación.

"Fue el jefe Zhang quien dijo que teníamos que hacerlo." – El hombre suspiró.

"De acuerdo." – El otro hombre dejó de preguntar y tuvo que hacer lo que le decían.

Los pasos de los dos hombres se desvanecieron antes de que Xu Jin se llevara a Lu Si hacia otro lugar.

Algunas de las puertas traseras de los camiones estaban cerradas, pero otras no.

Había varios policías patrullando en el cobertizo y, al ver que llevaban la misma ropa, Xu Jin y Lu Si dejaron de escabullirse y caminaron abiertamente, con la pistola en mano, fingiendo estar patrullando.

Al entrar, vieron que llevaban cajas de embalaje verde militar que contenían algo desconocido.

El encargado de la verificación vio a Xu Jin y a Lu Si y gritó.

"Ustedes dos vengan aquí y ayuden."

Al principio, Lu Si y Xu Jin no creyeron que les estuviera llamando.

El hombre se acercó y dijo: "Los dos, el alto y el bajo, no hace falta que miren, son ustedes a los que llaman."

Lu Si miró a Xu Jin en busca de una señal suya.

Xu Jin se acercó y tuvo que seguirle.

Cuando se acercaron, el hombre empezó a sermonearles: "¿Por qué se distraen? Vengan cuando se los diga."

"Van y llevan las cosas, se meten en el camión y las recogen." – El hombre señaló a Xu Jin y luego a Lu Si.

Dos hombres se encargaban de un camión, y Lu Si subió y se inclinó para ver cómo Xu Jin llevaba los suministros con la cara desencajada.

El hombre dio instrucciones y se dirigió al otro lado.

Lu Si lo recogió y susurró: "Es bastante pesado."

"Mmm." – Xu Jin respondió y siguió llevando las cosas.

Después de que Lu Si los subiera, se quedó solo en el camión, abrió una caja y se le iluminaron los ojos, ¡era un botiquín médico!

Xu Jin llevaba algo debajo cuando de repente se dio cuenta de que había alguien y se volvió hacia un lado, mirando a esa persona.

¿Ah? Qué coincidencia.

CSMS: CWFPDLDXGB (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora