Capítulo 45

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Tan lindo

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Cuando terminó, Lu Si llevó los dos cuencos de fideos secos a la única mesa pequeña de la había.

Moviendo la silla, se sentó en ella y espero en silencio a que Xu Jin saliera.

"Lu Si." – Sonó la voz de Xu Jin.

Cuando Lu Si escuchó que Xu Jin le llamaba, se puso de pie, tomó la palabra y le preguntó: "Xu ge, ¿qué pasa?"

"Ropa." – Xu Jin fue breve y consiso.

"Oh, oh." – Lu Si sacó apresuradamente la ropa de Xu Jin de su propio espacio y dudó un momento antes de llevársela.

De pie frente al baño, Lu Si miró a la puerta del cuarto de baño: "Xu ge, te he traído la ropa, así que, abre la puerta."

"Mmm."

La puerta se abrió y todo el cuerpo de Xu Jin quedó al descubierto.

Lu Si tuvo la suerte de ver el cuerpo entero de Xu Jin por primera vez, su piel estaba en el lado más claro, pero tenía abdominales de sixpack, y la parte inferior de su cuerpo era indescriptible, ¡era un cuerpo que los hombres envidiarían!

Lu Si no pudo evitar derramar lágrimas de envidia: "Xu ge, tienes un bonito cuerpo."

"Mmm, gracias por el cumplido." – Xu Jin aceptó el comentario de Lu Si sin ningún pudor.

"Emm, tu ropa." – Lu Si le entregó la ropa.

Xu Jin observó a Lu Si que estaba frente a él, luego le rodeó la cintura con los brazos y lo llevó al cuarto de baño, los dos estaban muy apretados, especialmente por la parte inferior.

Lu Si se agarró la ropa con las manos e intentó por todos los medios liberarse de la atadura del otro hombre, y cuando un extraño toque le llegó desde abajo, se apresuró a explicar: "¡Xu ge, yo no vendo mi cuerpo!"

"¿Mmm?, ahora estoy ** aquí abajo, ¿ok?"

Un hombre a esa edad debía estar en la cúspide de su deseo *sexual*, había estado dando vueltas los últimos días y necesitaba desesperadamente liberarse, entendía el razonamiento, pero ¿por qué era él el objetivo?

Al hombre se le salían las lágrimas.

Cuando vio que Lu Si había dejado de moverse, Xu Jin tenía una sonrisa en la cara y pasó la mano por el cabello del adolescente que tenía algo de humedad y dijo: "Eres tan bueno."

No era bueno en absoluto.

Sólo tenía miedo de morir.

Sólo después de que Xu Jin lo liberara, dejó ir a Lu Si y continuó enjuagándose.

Lu Si sentó en la silla, con la cabeza vacía en estado de reposo, las manos sobre las rodillas, que en este momento estaban apretadas, la cara un poco enrojecida y un entumecimiento que le salía de los muslos.

En cuarto de baño no estaba insonorizado, se podía oír el sonido de la persona sentada afuera.

Xu Jin tardó un rato en salir y vio que Lu Si estaba sentado en la silla con dos tazones de fideos que aún humeaban sobre la mesa, pues llevaban allí demasiado tiempo.

"¿Por qué no comes?"

Al escuchar la voz, Lu Si levantó la cabeza para mirar a Xu Jin, aflojó los puños, se sentó erguido y respondió: "Esperándote."

"Mmm." – Xu Jin se sentó en la silla de al lado y vio que en el cuenco que tenía delante había muchas salchichas de jamón mientras que en el de Lu Si habían muy pocas, tomó los palillos y tomó una y la puso en el cuenco de Lu Si, apoyando la mano izquierda en el hombro del otro hombre.

"Come más carne, cultiva más carne."

Cuando la mano del hombre se posó en su hombro, el movimiento de Lu Si de recoger los fideos se congeló y asintió con una sonrisa forzada: "Sí."

La mano del hombre frotó su espalda durante un rato antes de alejarse.

Sólo entonces Lu Si se relajó y siguió comiendo los fideos.

Después de comer apresuradamente, Lu Si terminó la sopa de su cuenco y miró a Xu Jin, que aún no se había comido la mitad de los fideos, pero si la salchicha de jamón y los huevos.

Así que preguntó con cautela: "¿No están buenos los fideos?"

"¿No deberías saberlo?"

Lu Si se rascó la mejilla, recordando los fideos que acababa de comer: "Estaban un poco duros, pero el sabor estaba bien." – La razón principal era porque no es muy exigente con la comida, estaba bien siempre y cuando pudiera llenar el estómago.

Xu Jin dejó los palillos y dijo sin rodeos: "Es un poco difícil de comer."

"Entonces, ¿aún tienes hambre?, te lo haré de nuevo."

"No, ya estoy lleno." – Dijo Xu Jin con un rostro inexpresivo mientras empujaba su propio cuenco delante de Lu Si: "Termínatelo, no puedes desperdiciar comida."

Esto hizo que Lu Si se avergonzara un poco y explicara secamente: "Xu ge, en realidad aún no estoy lleno." – Tomó los palillos y se comió el cuenco que Xu Jin le había acercado.

Al parecer, el adolescente había olvidado lo que acababa de ocurrir en el cuarto de baño.

Tan lindo.

"Come despacio, no hay prisa." – Una sonrisa silenciosa apareció en el rostro de Xu Jin.

CSMS: CWFPDLDXGB (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora