Capítulo 167

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Ciudad de Kadong: Suave

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Lu Si giró la cabeza para mirar detrás de él y no encontró nada sospechoso, al ver que el hombre no había subido todavía, tuvo que tomar la iniciativa de volver caminando él mismo.

"Xu Jin, ¿qué te pasa?"

"Nada." – Xu Jin se metió las manos en los bolsillos y caminó hacia Lu Si.

"Está bien, entremos." – Al ver que el hombre actuaba normal, Lu Si le agarró del brazo y los dos caminaron juntos en dirección al frente.

La puerta del almacén se había abierto y la luz del exterior iluminaba el interior. Justo cuando entraron, unos cuantos zombies salieron de la máquina de un lado, atacando hacia Lu Si con los dientes y las garras abiertas, antes de ser abordados por Xu Jin.

En el interior había un amplio espacio y varios camiones de carga, y había signos evidentes de una lucha en el espacio abierto, donde los que huían por sus vidas habían luchado a muerte contra estos zombies desquiciados que tenían delante.

El objetivo de Lu Si no eran estos vehículos, y tiró de Xu Jin.

En el lugar señalado en el texto original, detrás de una máquina elevadora, se pulsaba el botón rojo y se abría la puerta del almacén subterráneo.

Hizo lo que le decía el texto, y sin dificultad vio abrirse la puerta del almacén subterráneo, y cuando la luz de la linterna brilló en el interior, vio muchos paquetitos de edredones blancos en plástico transparente.

"Mierda, realmente hay algo aquí." – El rostro de Lu Si estaba radiante de alegría.

Estaba a punto de arremangarse y ponerse manos a la obra cuando el hombre que tenía al lado le sujetó la muñeca: "¿No buscas un generador?"

Cuando estraron, el hombre ya sospechaba, y ahora lo hacía aún más al ver esto.

Lu Si estaba tan feliz que se olvidó del hombre, sobre todo porque todo había salido bien.

Al oír la pregunta del hombre, la sonrisa de su rostro se endureció: "Me lo dijo un compañero de clase, así que pensé en probar suerte, pero no esperaba encontrarlo."

"Pero, sólo somos dos, ¿necesitamos tanto de esto?" – Preguntó el hombre.

Lu Si parpadeó, viendo que si podía pasar el primer obstáculo, el segundo sería fácil: "Xu ge, no lo entiendes, podemos usar estas cosas para atraer a la gente, y además, podemos venderlas como mercancía a los necesitados."

Xu Jin guardó silencio un momento y dijo: "No es necesario atraer a la gente."

"Definitivamente lo necesito." – Lu Si no creyó en absoluto las palabras del hombre, cuando Xu Jin reunió a sus hombres en la retaguardia, la vida material de la otra parte estaba garantizada antes de que siguieran a este jefe, o bien su fuerza por sí sola seguía siendo ligeramente inferior.

"Mmm, entonces recógelo por tu cuenta." – Xu Jin no quería discutir mucho con Lu Si, podía cobrar lo que quisiera, no importaba.

Viendo que el hombre creía en sus palabras, Lu Si se apresuró a decir: "De acuerdo, Xu ge, tú te encargas de vigilar mientras yo voy a recogerlos y guardarlos en el espacio."

CSMS: CWFPDLDXGB (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora