CSMS: CWFPDLDXGB (1)

Capítulo 137

Xu Jin: Lo que es mío es tuyo

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Ciudad Shixi.

Si al principio se encontraban con muy pocos zombies en el exterior, a medida que se adentraban, los zombies salían de repente de un lugar determinado y cada vez aparecían más detrás de ellos.

Xu Jin tenía la intención de quedarse en la ciudad Shixi durante algún tiempo, principalmente para trabajar en las habilidades psíquicas de Lu Si, así como en la velocidad de sus manos.

Aquí hay muchos edificios y bloques de pisos, así que por comodidad, Xu Jin se llevó a Lu Si y encontraron un hotel al azar, mataron a los zombies que había dentro y encontraron una habitación vacía en la que alojarse.

Despejaron a todos los zombies que habían aparecido en este pequeño hotel.

Lu Si y Ma Chengye jadeaban.

Miró al hombre sin siquiera tomar aliento y, después de su última experiencia, Lu Si no volvió a preguntar a Xu Jin por miedo a que el hombre volviera a demostrarse a sí mismo su fuerza física.

"Encontraré una habitación para quedarme." – Ma Chengye se pellizcó la cintura con una mano y levantó la otra, sabiendo muy bien que llevaba las provisiones que acababa de recoger de aquella gente.

Ni que decir tiene que la bolsa estaba llena de galletas prensadas y otros azúcares cargados de calorías, así como chocolate y algo de pan.

Eso le satisfacía lo suficiente.

"Oh."

Xu Jin entró en la otra habitación con el brazo alrededor del hombre y, nada más cerrar la puerta, bajó la cabeza para besar a Lu Si en los labios.

"Um... um... la ropa está sucia." – Lu Si se sintió inmediatamente impotente ante el beso del hombre e intentó en vano separarse de él.

La lengua de Xu Jin lamió: "Está bien, tu cara no está sucia."

Lu Si sólo podía permitir que el hombre hiciera lo que quisiera.

"Entremos juntos en la ducha." – Dijo el hombre, levantando al adolescente con facilidad y llevándolo hacia el baño.

Pum.

La puerta se cerró de golpe y se oyó un ruido de agua que se escurría, seguido de una voz desde el interior.

Tardaron más de dos horas en lavarse y salir.

Lu Si salía o Xu Jin le llevaba directamente, le llevaba dentro y le llevaba fuera, un servicio directo de ventanilla única.

Xu Jin sentó primero a la persona en la silla, tomó la iniciativa de hacer las sábanas y luego lo llevó a la cama.

"Acuéstate bien, te prepararé lo que quieras comer." – Dijo Xu Jin, mientras frotaba el cabello mojado del adolescente con una toalla seca.

Lu Si dijo que estaba cómodo, y cuando oyó al hombre decir eso, se quedó un poco perplejo: "¿Sabes cocinar?" A primera vista, Xu Jin era una persona cuyos dedos no tocaban el agua del manantial.

El hombre dijo sin pensar: "Estoy un poco oxidado, pero eso no significa que no sepa cocinar."

Significa que ya lo había hecho antes, pero ya había pasado mucho tiempo de eso.

Lu Si se moría de ganas de que Xu Jin le hiciera la comida para poder disfrutar del trato, ¿así que ahora era él el amo?

Pero en la superficie, todavía tenía que fingir: "Oh, es así."

Xu Jin casi había terminado de frotar y envolvió el cabello de el adolescente en una toalla: "Acuéstate bien."

Dijo, inclinándose y besándole, antes de marcharse satisfecho.

Lu Si se cubrió la cara enrojecida e hinchada con la mano, enseñó los dientes y miró al hombre que se disponía a arremeter: "No me has pedido la olla ni los utensilios, ¿cómo vas a cocinar?"

Xu Jin miró a Lu Si: "Ya lo tengo."

Dijo, y aparecieron en su mano ollas, sartenes, arroz morado y otras cosas.

"¿No me lo diste todo y dejaste que me lo quedara?"

"Oh, eso fue hace mucho tiempo." – Xu Jin respondió sin cambiar su expresión.

Lu Si: Gam.

Al ver la mirada molesta del adolescente, Xu Jin rió ligeramente: "Lo que es mío es tuyo, y no pretendía no decírtelo."