CSMS: CWFPDLDXGB (1)

Capítulo 125

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"Mucho mejor." – Lu Si asintió.

"Mmm."

"Xu Jin, déjame preguntarte algo." – Lu Si habló de repente.

"Di."

"¿A dónde vas en la ciudad K?"

Xu Jin miró a lo lejos, al cielo gris, y habló: "Ciudad Jingbei."

La ciudad de Jingbei, la segunda ciudad de la ciudad K, no es la capital de la ciudad de Jingzhong.

"Ah, sí." – Lu Si escuchó pensativamente.

Xu Jin puso una mano en el hombro del adolescente y dijo: "Mmm. Voy a buscar el laboratorio." – Tras una pausa, añadió: "Pero no hay prisa, tú eres más importante."

Lu Si apartó la mirada del hombre: "Xu Jin, yo diría que el laboratorio es peligroso, tus padres no deberían estar allí, si siguieran vivos habrían sido recogidos por alguien del gobierno."

Al ver que el hombre fruncía los labios y no decía nada, continuó: "Es realmente peligroso si buscamos tan a ciegas." Puede que las primeras veces hayan sido casualidad, pero ¿y la próxima, quién lo garantiza?

"¿Tú también ves que algo va mal en el laboratorio? A decir verdad, el laboratorio es tan peligroso como crees." – Tras una pausa, añadió: "¿Es porque no me crees?"

"No es eso, sólo estoy siendo honesto, Xu ge, nosotros..."

Lu Si ni siquiera había terminado de hablar cuando la mano del hombre arrastró a la persona hacia sus brazos con fuerza.

Su nariz apenas rozó el duro pecho del hombre.

"Ya que decidiste seguirme, no retrocedas." – Dijo el hombre en voz baja.

Ah, ¿es cuestión de retirarse?

Lu Si desvió la mirada: "Aunque yo también tengo curiosidad, pero Xu Jin te digo que, según la ley general, cuanto más avanzas, más peligroso es."

Por los ojos de Xu Jin pasó una luz fría y soltó una ligera risita: "Je, ¿una ley general? Entonces anularé esta llamada ley general."

Viendo que no podía persuadir a Xu Jin dijera lo que dijera, Lu Si desistió por el momento: "Bien, escucharé a Xu ge. Démonos prisa y pongámonos en marcha ya."

Ahora el nivel de zombie es así, y si te vas temprano, tendrás más tiempo para sentirte aliviado, es la capacidad personal integral pero hay algunas lagunas en la capacidad y la calidad.

"No hay prisa." – Xu Jin retorció el cabello entre las orejas del adolescente y dijo en voz baja.

"......"

Lu Si permitió que el hombre jugara con él, con la esperanza de que este caballo negro suyo no se perdiera con este hombre.

Los dos hombres se pararon un momento, luego volvieron hacia el auto y, al salir el tubo de escape, el auto arrancó.

En ese momento, en el condado de Gangyang, un cielo nublado se cernía sobre el territorio y el olor a podrido flotaba en el aire.

Enormes montones de zombies salieron de algún lugar y caminaron sin rumbo por las calles, varias veces más de los que se había encontrado Lu Si antes y estaban en todas las esquinas de la zona.

El aire muerto era lúgubre.

El hombre de negro estaba de pie en el alero de la casa, mirando la escena de abajo, con una sonrisa en la comisura de los labios, y entonces la sombra negra desapareció por encima del alero.

Base Guangming.

Cuando el pueblo promedio dispuso por fin de varios puntos de suministro de agua, solo se trataba de agua del grifo purificada con polvo de cal.

A la gente no le importaba demasiado y se lo bebía enseguida.

Algunos incluso se echaron agua en la cara felizmente.

Como gente común, no tenían poderes sobrenaturales, y aunque había unos pocos fuertes, los desfavorecidos eran la mayoría.

Un anciano tomó con urgencia un cuenco de agua y, cuando sus labios resecos tocaron el agua transparente, todo su ser se emocionó y bebió unos cuantos tragos grandes.

Al beber demasiado deprisa, se atragantó y un sabor a pescado se extendió por su boca, el anciano volvió a tragar como si no se hubiera dado cuenta, el líquido se le escurría por las comisuras de los labios.

De repente su cuerpo se estremeció y sus ojos se pusieron blancos por un momento, cerró los ojos y después de un momento, su cuello se retorció haciendo un sonido de craqueo.

El pariente del anciano se acercó a él y su mano tocó apenas el hombro del anciano.

Cuando de repente fue agarrado por la fuerte mano del anciano, y luego le dio un mordisco.

"¡Ah!" – Se escuchó un grito agudo.