─𝐈𝐧𝐨𝐥𝐯𝐢𝐝𝐚𝐛𝐥𝐞 ⠀𓄼

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...

Desperté en mi cama tapada y sin los zapatos, me desperté a eso de las dos de la tarde. Pero era sábado y no me tocaba trabajar ni tenía ningún plan.

— Buen día dormilona — dijo exe entrando a la pieza.

— Buen día... ¿Que hora es? — dije mientras me estiraba.

— dos y media de la tarde — dijo el sonriendo.

— Uh — me senté en la cama y bostece. — Me voy a bañar — dije y me pare de la cama.

Exe se acostó en la cama mirando la tele y yo agarre la ropa y la toalla.

Me bañe y salí del baño ya cambiada. Me senté al lado de exe.

— Ayer a qué hora volviste? — le pregunté.

— Cómo las dos por ahí — dijo.

— Ah, osea que cuando yo llegue ya estabas? —

El asentio con la cabeza. Se sentó al lado mío y me robó un beso. Estuvimos unos minutos besándonos, hasta que me agarró y me subió a su regazo. Pero no llego a nada porque nos interrumpió el timbre.

— Vas vos? — dijo él.

Asenti y baje. Abrí la puerta y era alma. La pobre estaba llorando a más no poder.

— Que paso? — dije abranzandola.

— Se va a casar. — dijo entre lágrimas.

— Quien? — dije mientras ví que exequiel bajaba las escaleras asustado.

— Bruno, el que te hable — dijo y volvió a llorar.

Lo mire a exe y el me hizo como una cara de que mejor nos dejaba solas y subió de nuevo arriba.

Nos sentamos en el sillón y la intenté calmar.

— Pero explícame bien, cómo que se va casar? — porque la verdad que a ese punto no entendía nada.

— Bueno o se iba a casar, porque después de lo que pasó no creo que se case — dijo secándose las lágrimas.

Resulta que este tal Bruno, estaba comprometido hace un año con una chica española que no estaba mucho en Argentina entonces el acá hacia vida de soltero. Alma lo descubrió mediante amigos en común con el y antes de que la pobre chica se casará la ayudo a terminar con el idiota.

La acobije un rato acostadas en el sillón y trate de calmarla.

— Me puedo quedar a comer? — dijo ella imitando a una ratita.

Asenti y prendí la tele, puse Netflix y charlamos un rato. A la hora y media bajo exe que ya se tenía que ir a la oficina.  Por si se preguntan de que trabajaba es encargado nocturno de administración de carga y descarga en una empresa de maíz. Pero mis sospechas se basan a qué sus horarios terminan a las tres de la mañana y el llega a las 6, capaz soy una paranoica pero ojo de loca no se equivoca.

Volviendo, se fue y nos quedamos solas.

— Que tenés ganas de comer? — dije pero me interrumpio el timbre.