Together Until Death

†Capítulo 3†

*Rusia*

–¡Luka no!– reí.

Él rió y me lanzó una bola de nieve.

–Hey, mi cara es sagrada– murmuré sonriendo.

–Per...– le lancé una bola de nieve a la cara– ¡Adeline!

Reí mucho y caí a la nieve.

–¿Estás bien?– preguntó Luka riendo.

Asentí.

–Está fría pero cómoda– reí.

Estábamos en el bosque y Luka dejó de sonreír.

–¿Qué?– pregunté.

–No te muevas– murmuró.

–¿Qué, por qué?– preguntó.

–No te muevas Adeline– indicó.

Voltee y ví a un lobo.

–¡No te muevas!– gritó Luka.

Miré al lobo y me estaba gruñendo.

–Luka...– murmuré– Es un...

–Lobo– habló Luka.

Moví mis pies sin querer y el lobo avanzó un poco.

–¡Joder Adeline, quédate quieta!– gritó Luka desesperado.

–No me hará nada– murmuré.

Me moví y el lobo avanzó más.

–Lobito lobito– murmuré.

–¡Adeline!– gritó Luka– ¡Carajo deja de moverte!

Me arrodillé y el lobo corrió hacia mí, sentí que caí a la nieve y ví a Luka encima mío.

–¡Vamos!– gritó.

Nos levantamos y corrimos hacia afuera del bosque.

–¡Corre Adeline!– habló Luka.

Llegamos afuera del bosque y corrimos a la casa, entramos y cerramos la puerta.

–Dime que estás bien y no te hizo nada– murmuró Luka.

–Estoy bien– me abrazó.

Lo abracé y suspiré.

–¿Por qué te desesperaste? Podía levantarme y correr– murmuré.

–Adeline, mi hermano menor murió por culpa de un lobo, estábamos jugando en el bosque, así como tú y yo, el lobo apareció y...– una lágrima salió de su ojo.

–Shhhh, tranquilo– murmuré.

Lo abracé y escondió su cara en mi cuello, se tenía que agachar un poco ya que él era muy alto y yo era bajita.

–Tranquilo– murmuré– Estoy bien, estoy perfecta.

Me abrazó y sonreí, se separó y me miró.

–Ven, vamos a comer algo– murmuré.

Negó.

–No tengo hambre– murmuró.

–Luka por favor, tuvimos el mismo problema hace dos años, no quiero que vuelvas a recaer en las drogas– supliqué.

–Prometí que no lo iba volver a hacer, tranquila– me sonrió.

–Luka...– murmuré.

–Bien, vamos a comer– murmuró él.

Sonreí y fuimos a la cocina, preparamos algo de comer y luego empezamos a comer.

–Eres menor y aún así te hago caso, en realidad debe de ser al revés– habló Luka.