Adeline
En la mañana siguiente me desperté y no ví a Luka, me levanté y bajé a desayunar.
–Gracias– murmuré.
Las sirvientas me llevaron el desayuno, había nuevo personal y eso me gustaba, desayuné y subí a darme una ducha, salí y me puse ropa deportiva y me hice una cola alta, bajé y salí a correr, mi celular sonó y contesté.
–¿Adeline?– escuché la voz de Giselle.
–Princesa– hablé.
–¿Estás corriendo?– preguntó.
Asentí.
–Salí a hacer ejercicio– respondí– ¿Qué estás haciendo?
–Oh mira, estoy haciendo mi tarea– me enseñó.
Sonreí.
–Muy bien, sigue así y seguirás teniendo tu laptop eh– hablé.
–Wiiii– sonrió.
Miró a los lados como si buscara a alguien y se acercó a la cámara.
–Te cuento un secreto– susurró.
Asentí.
–La tía tiene novio– susurró.
Sonreí.
–¿Quién es?– susurré.
–Se llama Francesco Regnault– respondió– Me compró un unicornio.
Me tensé y suspiré.
–Amor, te llamo al rato ¿sí? Luka me está llamando– murmuré.
–Ok, te quito Deline– habló.
–Sigue haciendo tus tareas– sonreí.
Asintió y colgó, corrí hacia la oficina de Luka y entré a la empresa, subí a su oficina pero lo ví con un inversionista, me senté afuera y el inversionista salió feliz, se fue y entré a la oficina.
–Bonita– habló.
–Tenemos un problema– murmuré.
Dejó lo que estaba haciendo y me miró.
–¿Qué pasó?– preguntó.
–Mi tía Adalia está con Francesco Regnault y ya vió a Giselle– respondí
Se tensó y se acercó.
–Vamos por ella– habló.
Estaba por hablar pero salió rápido, lo seguí y bajamos al estacionamiento, subimos al auto y manejó más rápido de lo normal.
–Luka– murmuré.
Llegamos al avión y nos fuimos a Londres, Luka me dejó en el avión y él fue por Giselle, al rato llegaron y Giselle corrió a abrazarme.
–Mi niña– murmuré.
–Vamos– indicó Luka.
–Deline, Francesco es malo– susurró Giselle.
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Together Until Death
Teen FictionPara Adeline Koch no a sido fácil tener una vida normal, no desde que sus padres se volvieron los mafiosos más temidos del lugar, Adeline Koch se queda sola gracias a un terrible accidente donde mueren sus padres, todos la apoyaban pero no era igual...