Un cierto estudiante de la UA [QHPS]

Capítulo 64: Juicio Injusto (Segunda Parte).

"- Adivina qué. Tengo otra pelea.
- ¿Contra quién?
- No lo sé, pero ganaré."
De la película: Cinderella Man. El hombre que no se dejó tumbar.

"Siempre me sentí un poco diferente a los demás. Así que hice lo que haría cualquier extraño, hice arte raro."
Abbi Jacobson - Katie Mitchell

Shinsou el cual se había quedado dormido con lagrimas en sus ojos no fue despertado en la mañana para ir al kínder ya que no tenía kínder al cual ir y por lo tanto durmió hasta casi el medio día.

Después de despertar Shinsou camino hasta su baño donde se lavo la cara y los dientes para tratar de empezar este nuevo día con buen pie, todo esto sin saber que desde hace mucho eso no era una opción.

Al bajar las escaleras escucho a su padre hablando a gritos con alguien, en el pasado pudo haber creído que era otra persona, pero desde que escucho esos mismos gritos el día anterior estuvo cien por ciento de que el que gritaba era su padre o bueno su padrastro.

También sabia que muy probablemente el receptor de esos gritos no era nadie mas que el insufrible abogado Garuki. Acercándose mas al comedor donde se encontraban pudo escuchar un poco más de la conversación entre ambos.

—¡SOLO TENIAS QUE HACER UNA COSA! Y aun así te las arreglaste para arruinarlo. —Oliver comenzó a lanzarle a Garuki cualquier cosa que tuviera a la mano y para su suerte solo eran servilletas y un mantel decorativo.

—Si, Si, Si, el que madruga dios lo ayuda, pero como demonios iba a saber que Vegano estaba metido en esto y no solo eso, incluso madrugo antes que yo así que dios lo ayudo a él no a mí.

—¡Tu maldito trabajo es saberlo! —Justo cuando Oliver consideraba arrojarle la silla en la que estaba sentado, sus ojos brillaron en un verde neón antes de detenerse y mirar a la puerta.

—*Suspiro* Shinsou sé que estás ahí, por favor entra. —Siguiendo las palabras de su padrastro Shinsou entro al comedor con la mirada baja esperando un regaño o algo por el estilo.

—¿Aun no comes nada verdad? —Sin esperar una respuesta Oliver llamo a Yinliang y le pidió que le preparara un rico desayuno.

—Pequeño canario tenemos un imprevisto. —Shinsou abrió en grande los ojos al escuchar como Oliver lo llamaba por el apodo creado por Darna.

—No te preocupes no es un gran problema, pero ahora solo requeriremos de un poco de tu ayuda. —Oliver se apresuro a explicar la situación al creer erróneamente que su hijo había malinterpretado las cosas y se había asustado.

—¿Cómo puedo ayudar? —pregunto Shinsou sin saber muy bien cómo debería sentirse.

—Me alegra que lo preguntes pequeña paloma, solo tienes que dejarme ver tus recuerdos delo sucedido —dijo el insufrible abogado que muy posiblemente moriría si no pudiera decir algo irritante por más de dos minutos.

—¡CALLATE! Te dije que no haremos eso para este caso.

—Esa es la manera más rápida de solucionarlo todo, ¿No siempre lo resolvemos de esa manera?

—Esta vez es diferente.

—¿Diferente?

—Esta vez entrarías en la cabeza de mi hijo y eso es algo que no voy a permitir.