༻My Angel༺ [DSMP/Quackity]

Mascotas no deseadas

-Me estas diciendo... que descubriste que se podía hacer té de flores... y decidiste intentarlo solo...- oliendo un poco una de las varias tazas que contenía la sustancia.

-si- Tubbo jugaba mientras con sus manos deido a los nervios

-E hiciste té con flores que encontraste en uno de mis cofres... - agarro una de las flores que estaba en la mesa.

-... si...- dijo en un tono bajo pero audible.

Quackity quería morirse, su cuerpo había mejorado así que decidió salir por su cuenta a las calles de su país esta vez siendo acompañado con alguien que sí estuviera al tanto de él.

Para que luego al volver encontrará a su hijo en pánico mientras intentaba despertar a su yerno y nieto.

-¿¡Acaso enloqueciste!?- hizo un ademán brusco ante la situación.

-¿¡Yo que iba a saber!? ¡No tenía ninguna nota de advertencia!-

-Pero son MIS cofres ¿¡eso no te dio la advertencia necesaria!?-

Quackity se tragó sus insultos para despues, agarro la flor para escanearla, había guardado varias cosas al azar que no se acordaba de que era esa flor ni de como chingados sobrevivió al agobio y falta de agua de su cofre, aunque nada en este lugar tenía algún sentido.

-Um... eso es una valeriana Quackity- respondió Foolish, este fue la compañía del pato más terco que un niño.

El último nombrado estaba pensando, ¿como rayos su cabrito malcriado hizo el té?.

-Eres un tonto hijo...- tiro todas las flores en el bote de basura.

-Podrías por favor dejar de regañarme y decirme ¿como solucionarlo?- quería que su esposo e hijo despertasen.

-Solo dejémoslo así, hasta que el efecto del sedante termine, ya despertaran- limpiando sus manos con un paño -Por cierto ¿donde está Milo?-

-¡Ugh! Charlie se lo llevo a no se donde solo dijo que volverían en unas horas- also a Michael del sillón para llevarlo a su habitación.

Big Q miraba como Tubbo se retiraba a regañadientes, soltó un suspiro de cansancio ¿qué iba a hacer ahora? Charlie se fue con su bebé, Purpled y Fundy andan de incógnito por una misión que el mismo les mandó y Foolish aún debía de tomar esas estúpidas pastillas a la hora exacta a menos que quiera verlo nuevamente toser sangre coagulada.

Ver que apenas las cosas mejoraban, sabía muy bien que algo se avecinaba, tal vez alguien no deseado o alguien ya olvidado.

Sacó de su bolsillo un sobre arrugado, este sería el décimo sexto que le llagaba en la semana, al principio pensó que para la segunda carta dejaría de mandar pero tal parecía que este era insistente.

Todas las cartas las había leído y nunca respondió, engañandose a él mismo de que no tenía el tiempo suficiente y quería arreglar su relación con su rara familia.