With The First [KookMin]

🦋[19]🦋

El juicio de Jun llego, aún cuando él se declaro inocente había pruebas verídicas que lo ponían en la escena. También estaba su confesión inicial. Al tener las pruebas, un par de testigos y al mismísimo Jimin, Jun perdió el juicio siendo encontrado culpable y obteniendo una condena de tres años y seis meses por el delito de lesiones de forma dolosa. También debía pagar una multa de ochocientos mil won al afectado por los gastos médicos entre otras cosas. Y otra cosa que tenía en su contra era la orden de alejamiento que le había puesto Jimin. Para que cuando saliera de la cárcel no se acercara a él y en el caso de que lo hiciera pudiesen meterlo tras las rejas por unos seis meses o un año más.

Luego de salir del tribunal, volvió a casa junto a los Kim y a Jungkook quienes lo habían acompañado. Al llegar a casa este se sentía cansado mentalmente. Se recostó en el sillón, la señora Kim salio a buscar a JiHyun al jardín de infantes. Tae por su parte subió a su habitación diciendo que tenía algo que hacer aunque solo les daba espacio a los jóvenes.

—¿Estas bien? — le preguntó Kookie sentandose cerca de donde tenía la cabeza.

Tomó esta y la puso sobre su regazo, Jimin quien tenía sus ojos cerrados los abrió para mirar al de piel clara.

—Lo estoy — susurró este mirando al joven castaño y le sonrió levemente antes de volver a cerrar los ojos.

Kook comenzó a hacerle caricias en la cabeza provocando que el menor se durmiera en ese momento.

Me encontraba mirando por la ventana de aquel lugar, al patio donde el viento mecía los arboles y el sol comenzaba a brillar dándole inició a un nuevo día. Sentí movimiento a mis espaldas por lo que me gire a ver. Sonreí mirando al chico que se acababa de despertar.

Jimin quién solo tenía una de mis camisas puesta estaba sentado en la cama restregando sus ojos con el dorso de sus manos. Aquella visión me pareció extremadamente tierna y a la vez sexy.

—¿Que haces despierto tan temprano? — me preguntó haciendo un leve puchero.

—Solo me desperté... — conteste con una sonrisa y este me miro a los ojos.

—Vuelve a la cama — me dijo estirando su mano.

No me pude negar a él y camine de vuelta a la cama acostándome a su lado. Acaricie su mejilla y este me sonrió, mi mano bajo por su cuello recorriendo su brazo, el contorno de su cintura y su cadera para luego terminar en su desnudó muslo.

—Tu piel es muy suave — dije en un susurro.

—Siempre me dices lo mismo — respondió de igual manera.

Lo vi morder su labio inferior y yo solo acorte la distancia entre nosotros y uní nuestros labios en un lento beso el cual fue intensificándose segundo a segundo. Mi mano acariciaba pulcramente toda su pierna hasta que me detuve en su trasero.