La deuda del Loto

Segundo Round

La siguiente vez que se encontraron fue en otra reunión entre lideres en la cual se anunciaba oficialmente la boda entre Yunmeng Jiang y LanLing Jin. La hermana de Jiang Cheng finalmente se comprometía con Jin Zixuan, lo cual era realmente una excelente noticia para todo el mundo de la cultivación ya que implicaba la unión de dos sectas principales. Lan Xichen miraba de reojo al Líder Jiang y podía notar lo orgulloso que estaba por su hermana quien dirigía levemente algunas miradas hacia quien era su prometido. Le agradaba verlo así, se notaba que estaba mucho más tranquilo que la última vez. La conferencia continuó hasta que finalmente se dio por finalizada por ese día, ya que no había mucho más para tratar. Se levantó mientras pensaba si sería bueno acercarse al menor... Aunque era mejor no molestarlo ese día, seguramente aun quería hablar con su hermana. Dio algunas pequeñas indicaciones a los discípulos que lo acompañaban y decidió caminar un poco, todavía faltaba para la cena y el clima era bueno... En eso estaba cuando...

— Zewu-Jun...- escucho que lo llamaran y al voltear, sonrió. Se trataba de Wanyin.

— Líder Jiang- lo saludó haciendo un arco con las manos y luego llevó una mano detrás de su espalda- Nuevamente felicidades por el compromiso de su hermana.

— Si... Gracias...- le agradeció levemente- Yo... Tengo que disculparme...- tosió un poco al ver que el otro ladeaba la cabeza sin entender- La última vez... Estaba borracho y lo arrastré a... una situación extraña.

Era raro verlo así, estaba acostumbrado más a cuando se quejaba, lo insultaba o simplemente maldecía. El hecho de solo disculparse, lo hacía ver... Lindo. Sonrió tomándolo de las manos ya que estaba haciendo una reverencia.

— No es necesario que se disculpe...- le dijo con suavidad- Yo también le debo un poco unas disculpas... Debo admitir que quizás... tome ventaja de la situación.

— TU... - y escucharlo decir eso lo irritó- ¿Quién diría que el tan amable y cordial líder del clan Lan sería desvergonzado? – siseó

— No lo sé...- y se agachó para susurrar divertido- ¿Más o menos desvergonzado de arrastrar a alguien a tu habitación privada y seducirlo?

— Estaba borracho...- se escudó mirando a un costado claramente avergonzado

— Mm...- y solo sonrió ante eso, miró hacia los costados y con suavidad lo tomo de la mano para llevársela a los labios sin dejar de mirarlo- Entonces... ¿debería pedir una compensación?

— ¡¡TU...!! – y eso hizo que se le subieran los colores, miró alrededor algo asustado pensando que podían verlo. Para su (mala) buena suerte no había nadie- Deja de hacer estas cosas en público... - intentó recuperar su mano, pero no pudo.

Lan Xichen se acercó un poco para hablarle en el oído.

— Me gustaría repetir... aunque créeme, he leído que se siente mejor usando algún aceite o ungüento...

Y eso fue suficiente para que los colores del otro aumentarán apartándolo de un empujón y recuperando su mano. Al inicio no dijo nada, no sabía que responder.

— Ya he dicho lo que quería decir... - y dio media vuelta pensando realmente en irse, pero fue detenido nuevamente.

— Wanyin... ¿Qué tal esta noche? Solo tienes que venir a mi... Te esperaré.

La voz en su oído no presagiaba nada bueno, así que volvió a apartarse sin responderle y se fue, no sin antes llevarse una mano al oído. Odiaba que le diera escalofríos cuando le hablaba así... Lo había estado haciendo muchas veces durante esos encuentros y ahora su cuerpo se había acostumbrado. Al regresar a su habitación su hermana lo esperaba...