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LA NOCHE HABÍA CAÍDO Y GAIA SE ENCONTRABA EN LA habitación de Stiles, desde que su hermano le había dicho sobre Derek en el bosque se quedó pensando en el hombre e intentaba recordar en dónde había visto sus ojos.
—Lo qué pasó con Derek es muy triste— soltó la ojiazul mirando al techo.
—así es, creo. Deja de pensar en eso, mejor veamos una película. ¿que te parece Star War y la guerra de las galaxias?— se dejó caer aún lado de Gaia y la abrazó. Un trueno se hizo presente haciéndolos sobresaltar.
—¿Chocolate caliente?— propuso sonriente.
—Chocolate caliente—afirmó su hermano.
—El que llegue último a la cocina lo hace—sin más salió corriendo de la habitación de su hermano.
Al final ninguno hizo nada ya que al bajar las escaleras corriendo con Stiles detrás de ella no fue nada bueno, un jarrón acabó roto, despertaron a su padre quien los regañó y los devolvió a sus habitaciones ya que al día siguiente tendrían clases y ya era muy tarde para que siguieran despiertos. Volvieron a su habitación mientras se golpeaban mutuamente.
A la mañana siguiente Gaia despertó en el suelo de su habitación, extrañada se levantó y casi pega un grito molesta cuando vio a Stiles en su cama. Al parecer su hermano se había colado en su cuarto por la madrugada, la dejó en el piso y él se acostó en su cama.
Hizo respiraciones para calmarse y no golpearlo, ahora le dolía la espalda y estaba segura de que hoy no sería el mejor día.
—¡Stilinski!— su mellizo despertó sobresaltado, se reincorporó en la cama con una mano en su pecho por el susto.
—Ah, eres tú— le restó importancia hasta que se dio cuenta de la situación.
—Me tiraste al piso...— se acercó a su hermano tomó una almohada y empezó a golpearlo.
—¡No me golpees!— se tiro a la cama mientras esquivaba los almohadazos.
—Dios...— en el marco de la puerta su padre los miraba con cansancio, ya estaba acostumbrado a sus hijos y sus peleas mañaneras—Me iré a trabajar—avisó y se marchó, no sin antes darles la última mirada a sus mellizos.
—Te espero en el auto. Si no sales en quince minutos te irás caminando a la escuela— Stiles se paró y le lanzó una almohada a la cara de su hermana para después salir corriendo.
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Llegó al campo cuando Scott ya se había preparado para jugar, por lo que sólo llegó a sentarse. Se dio cuenta que se había sentado justo a lado de Allison por lo que disimuladamente se separó un poco.
—¿¡Cuál es tu problema, Jackson!?— se levantó molesta cuando el chico empujó a Scott tirandolo al piso.
—¡Gaia Bilinski!— el entrenador llamó su atención—¡Es lacrosse, Bilinski, ahora siéntate!— molesta se volvió a sentar, Scott hizo un asentimiento hacia ella dándole a entender de que estaba bien.
