Capítulo 263

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Justo cuando ese pensamiento se le pasó por la cabeza, el viento se levantó y Lu Chaoyang gritó: "No lo piensen, corran". Si te pierdes este viaje, tendrás que esperar a mañana, quién sabe lo que te encontrarás esta noche, así que no querrás tener una noche larga, corre.

Duan Jianghe tenía un puñado de pequeños brotes en la mano, listo para volver a investigar.

Sólo tuvieron tiempo de llevar una bolsa, no les dio tiempo a tomar muchas cosas, se pusieron la máscara que Duan Jianghe había empapado con agua medicinal, y se precipitaron hacia el bosque miásmico con frenesí.

El viento soplaba tan fuerte que los cuatro cayeron hacia delante y hacia atrás sin control, y cuando abrieron un poco la boca, la saliva voló junto con ellos.

El día estaba a punto de oscurecer, Lan Shi Ruo llevó a los niños y a las bestias que habían comido para dar una vuelta por la tierra del clan, que es una vasta extensión de gran tierra negra, y me pregunto si esconde secretos que no son conocidos por el hombre. En dos días, habían recorrido bastantes lugares y no habían encontrado pistas sobre el azote que había acabado con el clan en aquel entonces, por lo que parecía que tendrían que empezar por otras direcciones.

"Hermana".

"Shi Ruo."

"Cuñada".

¿Por qué Lan Shi Ruo sonaba como si estuviera sorprendida de haber vuelto de entre los muertos? Los que casi mueren seguían siendo ellos.

Mirando al pequeño grupo de gente que corría hacia ella desde el este y el oeste, Lan Shi Ruo retrocedió en silencio, madre eh, ¿de dónde son estos refugiados?

Por no hablar de los diversos cuerpos sucios y miserables, ¿qué era eso de la nariz magullada y la cara ennegrecida?

"Hermana".

"Shi Ruo."

"Cuñada".

Cuando vieron que Lan Shi Ruo no les prestaba atención, los diez gritaron de nuevo, con sus ojitos llenos de quejas.

Lan Shi Ruo sonrió dos veces, "¿Están bien?"

¿No ves que los jovenes son tan patéticos?

"El tío y la tía apestan". El gordito levantó su carnosa barbilla, con asco en su gorda cara.

Las chicas y los chicos mostraron sus dientes, el mocoso sin corazón, estan heridos por nada, incluso les disgustaba.

La frente de Lan Shi Ruo se crispó mientras saludaba a Cui Zipeng, "Tú y el Hermano Bao regresen y pídanle al Tío Ao que traiga la villa aquí, sean rápidos, los tíos y tías podrían no aguantar demasiado tiempo".

"De acuerdo". Cui Zipeng salió disparado montado en la pantera, las chicas y los chicos miraron a lo lejos y luego a los tres que seguían en su sitio, se sentían tan agraviados, ¿por qué tenían que ser tratados tan mal, por qué?

Los tres pequeños sintieron el brillo verde en los ojos de sus tíos, lo que les dio un susto de muerte y se apresuraron a proteger a las bestias que tenían detrás.

Le Bao dio una palmada con sus manitas regordetas y compartió con sus tíos y tías: "Las bestias fueron contratadas por su hermano y su hermana, y las bestias corrieron tan rápido que las montamos hasta aquí en un santiamén".

Los jovenes que huían tristemente por el bosque "....."

Lan Shi Ruo se apresuró a cargar al pequeño gordito, "Le Bao es un buen chico, lleva al águila, a Shogun y a los hermanos y hermanas mayores a ver qué lugar es adecuado para que papá ponga la villa".

Estoy criando bebés lindos en los últimos días (2 Parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora