Estoy criando bebés lindos en los últimos días (2 Parte)

Capítulo 335

Aunque esta tecnología aún es inmadura, asustar a la gente de esta manera ha hecho que muchos solo se atrevan a decir la verdad, y el efecto ha sido bastante bueno.

La fila era muy larga, el gran grupo había estado esperando desde la mañana hasta el mediodía, y aún faltaba la mitad. "Tenemos que mejorar la eficiencia."

Sus compañeros estuvieron de acuerdo, sacaron algo de comida y se sentaron a esperar con calma.

Los primeros en la fila ya habían entrado en la ciudad, y alrededor de las dos de la tarde le tocó al gran grupo.

Lan Shiru dejó que las mil personas pasaran primero y ellos fueron los últimos.

Pasó otra hora antes de que el gran grupo se presentara ante Maomao.

Lu Chaoyang manipuló al pequeño aparato unas cuantas veces y lo convenció de cambiar de bando. "Maomao no dirá nada, Maomao no sabe nada."

Unas manos mecánicas tapaban su cara redonda, como si intentara engañarse a sí mismo.

Le Bao estaba encantado. "Mamá, ¿podemos llevar a Maomao a casa para jugar?"

Lan Shiru lo pensó y, dado que no vendría nadie por el momento, decidió llevarlo de vuelta para que Lu Chaoyang lo mejorara. "Está bien, llévalo."

"¡Guau, genial! Vamos, Maomao, vamos a jugar juntos." La manita gorda se agarró a la mano mecánica y realmente se hicieron buenos amigos.

Maomao también quería a su pequeño dueño. Cuando creció, el pequeño dueño ya se había ido. Solo lo había visto en sus recuerdos, donde era muy pequeñito. "Maomao jugará con el pequeño dueño."

Los niños también adoraban a Maomao, rodeándolo y parloteando.

Maomao tenía muchas cosas en su cabeza. Fang Dengwen era su creador, y su estilo de actuar se parecía mucho al de Fang Dengwen. Pero luego llegó Yun Hengfei, de carácter muy juguetón, y Maomao adoptó su naturaleza traviesa e infantil, lo cual agradaba a los niños. Todos jugaban muy bien juntos.

Lan Shiru le pidió a Fang Tongtong que ocultara a Maomao para que no lo descubrieran. Y le pidió a Yun Shuiyao que creara una ilusión en el lugar.

Luego tomaron el tranvía turístico hacia la ciudad sin problemas.

Al entrar en la ciudad, todos fueron ubicados en casas de piedra. Eran personas desconocidas, por lo que no podían ser introducidas en el núcleo interno de inmediato; primero debían ser observadas.

Al llegar, todos aún estaban reunidos en la ciudad de piedra, en un desorden evidente, claramente insatisfechos con la situación y exigiendo marcharse.

Algunos pedían alojamiento y comida adecuada; tenían recursos para alquilar o intercambiar.

Otros querían pasear por la ciudad de piedra para conocer el lugar y decidir si quedarse o no.

Wang Hu y sus mil personas echaron un vistazo a la ciudad de piedra. Efectivamente, era igual que en los rumores, un lugar inhóspito. Sin embargo, no les importaba, porque sentían que si les había sido encomendada una gran misión, entonces eso era parte del proceso, y sus líderes se habían forjado en ese ambiente, así que ellos también debían hacerlo.

Tan Chong estaba preocupado. Este lugar no parecía adecuado para cultivar.

El gran grupo no pudo evitar una sonrisa ante estos pensamientos.

Xia Xun, con los brazos cruzados, observaba tranquilamente la algarabía. En su hombro, un loro malhablado soltaba improperios, al parecer citando escenas de alguna serie de televisión, lo que molestaba a muchos.