Capítulo 2: No more

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Claro que ver un asmático en pleno ataque era algo nuevo para el mayor, algo demasiado nuevo, algo que daba miedo, pánico, y terror. Aquellas eran las palabras que definían el estado del castaño al presenciar el ataque de asma de Mark Lee.

Su primera reacción fue espantarse y comenzar a hablar sin parar.

-¿Qué- Qué sucede? ¿E-Estás bien? ¿Qué te pasa? ¡Rayos! ¿Qué-Qué hago!?-No sabía como se suponía que se tratara a un asmático, pero para su fortuna, Mark Lee había vivido con aquel problema toda su vida, sabía muy bien como tratar sus ataques de asma cuando no poseía su inhalador, exactamente como en esta ocasión.

Una vez que Mark se recuperó, tan solo un poco, no dudó en burlarse del contrario.-Oye... Habla más despacio o a ti te dará un ataque de asma.-

El castaño efectivamente se enfada, pero no es capaz de soltar ninguna grosería al menor, pues aún se sentía asustado.-Deja de decir tonterías, ¿Estás bien?-

-Claro que estoy bien, esto es común en mí.-Responde mientras se acomoda en su lugar, ambos se encontraban sentados, en el frío suelo, enfrentados, admirando al otro en detalle.-No debiste arrastrarme así.-

El contrario bufa molesto.-Lo lamento, si hubiese sabido que eras asmático, te hubiese dejado ahí tirado mientras el dueño de la tienda llamaba a la policía y te arrestaba.-Contesta cruzado de brazos.-Sí, hubiese sido divertido, quizá debería haberlo hecho.-

Mark se encontraba algo confundido, ¿A qué rayos se refería?-¿Qué quieres decir con eso?-

De inmediato el mayor esboza una sonrisa, una sonrisa que inquieta de inmediato a Mark.-Mi querido amigo, le robamos al tipo de la tienda.-

El shock no tarda en aparecer en el rostro del pelinegro de manera muy obvia, pues se había congelado en su lugar de una forma muy graciosa, para el mayor, quien pronto estalló en risas. Pero Mark no solo se sentía en estado de shock por haber sido cómplice de un robo en una tienda, lo cual era un claro delito del que podían acabar en la cárcel, sino que el castaño acababa de usar el término "amigo" con él.

¿Ya eran amigos?

¿Así de rápido?

Por una parte, se sintió emocionado por aquel hecho, pero ¡Rayos! ¡Habían robado!

-¿Qué hicimos qué?-Preguntó para asegurarse de estar escuchando correctamente.

El contrario, con una sonrisa en su rostro, le enseñó las cosas que había guardado en los bolsillos de su chaqueta, un chocolate, gazas, una loción para heridas, y una bolsita de hielo.

-Tú-Tú robaste...-

-Sí, pero tú estabas ahí distrayendo al tipo de la tienda con tu linda carita llena de curiosidad.-Responde el mayor con una sonrisa en su rostro, se estaba divirtiendo demasiado con aquella conversación y el shock del contrario, por lo que mientras Mark procesaba la información recibida, él se dedicaba a curar sus heridas con las cosas que había robado.

-¿Cuánto crees que salió todo eso que robaste?-Pregunta de repente, captando de inmediato la atención del anteriormente herido, quien no dudó ni un segundo en desviar su mirada de la bolsita de hielo para dirigirla al pelinegro.

-¿Hablas en serio?-Mark asiente, y el contrario solo puede suspirar aburrido.-Tú en serio necesitas vivir cosas emocionantes.-

-Sí, ya ves como eso salió de bien.-Contesta Mark admirando como el mayor cura sus heridas con una facilidad y naturalidad que le hace preguntarse si aquello es normal en él.-No creo que sea lo mío vivir cosas emocionantes, no si voy a robar y tener un ataque de asma luego.-

MarkHyuck | free🍃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora