𝑇ℎ𝑒 𝑀𝑎𝑧𝑒 𝐺𝑖𝑟𝑙 | 𝑁𝑒𝑤𝑡 [𝑇ℎ𝑒 𝑀𝑎𝑧𝑒 𝑅𝑢𝑛𝑛𝑒𝑟 𝑇𝑟𝑖𝑙𝑜𝑔𝑦]

The Maze Runner | Capítulo 2: El primer infectado

Mientras los chicos disfrutaban en la hoguera que habían preparado para darnos la bienvenida al novato y a mi, yo me senté alejada apoyándome en un tronco mirando a las puertas del laberinto. No tenía ganas de estar con todos, era intimidante ser la única chica en un claro lleno de chicos. Newt se acercó a mi y se sentó a mi lado.

—Un primer día cojonudo verducha—me dijo el rubio.

—Sí, el mejor día de mi vida—dije con una sonrisa falsa.

—Me encanta tu sarcasmo, pero no cuela—dijo Newt—¿Qué pasa?

—¿Estamos atrapados aquí?—pregunté.

—De momento, pero ¿ves a esos tíos?—me preguntó girándose para mirar al resto—Ahí, junto al fuego. Son los corredores y el tío ese del medio, ese es Minho—dijo señalando a un chico de rasgos asiáticos—Es el guardián de los corredores. Cada mañana, al abrirse esas puertas, corren por el laberinto haciendo mapas, memorizándolo, buscando una salida.

—¿Cuánto llevan buscando?—le pregunté.

—Tres años—me dijo Newt.

—¿Y aún no han encontrado nada?—le pregunté.

—Es más fácil decirlo que hacerlo—me dijo riendo_Escucha—dijo Newt intentando hacer silencio—¿Oyes eso? Es el laberinto... Cambiando. Cambia cada noche.

—¿Y eso cómo es posible?—dije mirándole a los ojos.

—Si conoces a los cabrones que nos trajeron aquí, pregúntaselo—dijo con una sonrisa preciosa—Escucha, la verdad es que los corredores son los únicos que saben de verdad lo que hay ahí. Son los más fuertes y rápidos de nosotros y si no vuelven antes de que se cierren esas puertas, se quedan atrapados ahí toda la noche—dijo Newt mientras se le borraba la sonrisa—Y nadie ha sobrevivido una noche en el laberinto.

Mi cara pasó de asombro a terror.

—¿Qué les pasa entonces?—pregunté asustada.

—Los llamamos laceradores, claro que nadie a visto uno y sobrevivido para contarlo... Pero están ahí—dijo Newt mirando al frente—Suficientes preguntas por una noche—dijo girándose a mirarme y volviendo a tener esa preciosa sonrisa en su rostro—Venga, se supone que eres la invitada de honor.

—Oye, no...—intenté hablar.

—No, no, vamos que te enseño todo esto—insistió Newt.

—De verdad que no hace falta—dije sonriendo.

—Venga, vamos—dijo cogiéndome de la mano y levantándome.

La insistencia de Newt acompañada de su preciosa sonrisa me hizo acceder. Nos acercamos a todos aún cogidos de la mano.

—Ahí están los constructores, muy buenos con las manos, pero con pocas luces en la azotea—dijo Newt a lo que reí—luego está Winston que es el guardián de los cortadores. Y tenemos dos mediqueros, Clint y Jeff.

—¿Qué hay?—dijo Jeff.

—Hola Newt—saludó Clint.

—Se pasan la mayor parte vendando a los cortadores—terminó Newt.

—¿Y como se sabe el trabajo perfecto para cada uno?—le pregunté.

—Primero pasarán unos días hasta que te acostumbres al claro y luego empezarás probando trabajos hasta que uno te guste y se te de bien—dijo Newt.

De repente vimos como Gally y el nuevo "jugaban" a ver quien salía antes del circulo de arena. Iba ganando Gally hasta que el nuevo lo tiró al suelo y para defenderse, Gally lo tiró de los pies haciendo que se diera en la cabeza.