Invitacion

468 51 10
                                    

POV MORTICIA
-Ojalá a esta velocidad llegarás a las reuniones.-
-pues, es que esto es más interesante.- beso mi mejilla.
-no hay caso contigo.- reí mientras arreglaba mi cabello por el espejo.
-Y? ¿Que dijo cuando saliste?.-
-No deje que formulará algo, solo dije que regresaría pronto y así tiene que ser eh.- Farisea soltó una risa enorme.
-pero que es esto, ahora eres Morticia la castiga mujeres calientes.-
-Mujeres no, castigo a una Loba en celo.-
-pero si la del celó eres tú, ¡auch!.- se quejó.
-pues si, pero no lo digas así.- ambas reímos.
-Y pudiste terminar el trabajo con ella el día de la reunión?.-
-¿trabajo?.- fruncí mi ceño.
-cariño déjame decirte que el día de la prueba por mano larga, sentí tus jugos.- Farisea explotó en risa y mi cara seguramente estaba desfigurada. Estaba perpleja no sabía que responder. -pero tranquila.- continuó -no eres mi tipo, sabes que amo a los hombres y no hay por qué avergonzarte pero dios!.- resopló -qué hizo para que TÚ hayas estallado así, ella estaba lejos.- seguía sin poder formular una respuesta -¡qué poder el de tu chica!- río. Que poder el de mi chica.
Un silencio se formó en el carro, estaba avergonzada.
-oye!- me llamó Farisea -nada que yo no haya visto antes.- ambas reímos al recordar de lo que ella hablaba

Flashback On;
La academia había decidió salir de campamento al bosque más cercano del lugar, estudiarían las fases de la luna en el presente y también sería una manera para compartir con todos los alumnos y mezclarse como mejor les plazca.
Era un rato de convivencia armoniosa y relajar los ánimos antes del examen final del segundo trimestre.
Para Larissa y Morticia era el plan perfecto, estar a la luz de la luna, bosque y lo mejor de todo le pedirían a Farisea que se quedase con ellas en la carpa de acampar para que nadie que no fuera conocido y de confianza entrará.
Morticia había pedido irse a Farisea un tiempo, un tiempo prolongado donde Morticia podría venirse las veces que Larissa se lo permitiera, ya que no había tenido sexo durante una semana por su regla. Farisea gustosamente acepto.

Pero Morticia había olvidado el gran detalle, cuando se trata de cuarto, a solas, sexo y Larissa presente, Morticia perdía completamente la noción del tiempo. Y esta vez no fue la excepción, para buena suerte de Morticia y mala de Farisea,  Morticia se encontraba tan entumecida por la lengua de su novia Larissa obligando a hundir más su cabeza a su sexo para que luego se corriera de una forma tan profunda y deliciosa, todo bajo la atenta mirada de Farisea
-¡Morticia!.-
-¡FARISEA TE DIJE QUE A LAS OCHO CON TREINTA!- Morticia respondió malhumorada y embriagada por el orgasmo.
-Morticia te vienes a chorros!-
-¡SALTE!.- respondió Morticia y Farisea salió riendo por todo lo alto.
Flashback Off.

-la imagen de tu rostro quedó grabada mucho tiempo, tuve que recurrir a las más místicas magias samaritanas para borrarla.- Ambas reímos. -llegamos.- avisó.
-ve tú por favor.-
-como tú mandes.- puso su mano en su frente.
-Gracias.- le lance un beso.

Larissa lo siento pero me obligas hacerlo. Además la culpable eres tú por ser tan deliciosa y buena en lo qué haces. Quisiera tenerte dentro siempre. Mordí mis labios al pensar en eso. ¡Por favor! Me traes loca. Resoplé.

-bien, vamos!.- subió Farisea después de unos minutos.

El camino a casa fue a gusto, hablamos de todo, eche tanto de manos a Farisea y su sentido del humor, no quiero dejarla más fuera de mi vida, Farisea formó parte muy especial de mi vida y quiero que lo siga siendo. 
//

-déjame aquí, si le daré celos a Larissa se los daré bien.-
-¡esa es mi chica!.- yo reí  -toma.- me entrego la cajita -sabes cómo usarla verdad?.- preguntó.
-por supuesto.- respondí -Gracias querida, tenemos una cena pendiente.-
-lo sé.- sonrió -te quiero, las quiero, mejor dicho Los quiero.- yo sonreí.
-y nosotros a ti.-

Baje del auto a una considerable distancia de la casa, y camine.
Cuando ya me acercaba divisé a Larissa guardando unas cosas en el coche.
Ella estaba inclinada metiendo unos papeles a una caja en la parte trasera del carro.
Me apresuré hasta donde ella y le di una nalgada.
-¡me encanta esta vista!.- ella sobresaltó.
-has regresado.- dijo con indiferencia.
-así es y Tyler.-
-adentro, será que ya nos podemos ir?.-
-claro, pero antes, espera ya vuelvo.- y corrí directo a la cocina saludando a todos antes, por supuesto.
Saque un poco de jugo de naranja y lo puse en dos copas una para Larissa y una para mi. Ella aún seguía en el auto así que tuve que ir hasta el.
-toma.- extendí su copa
-¿que es esto?.- frunció su ceño
-vamos a brindar, esta noche le diremos a los chicos y pues, para que todo salga bien.- sonreí amplia. Larissa entrecerró sus ojos. -toma Lari, es jugo.- dije con suplica. Larissa dudosamente lo llevó a su boca y lo bebió todo. Sonreí Victoriosa. -no aguanto a estar sin ti, así que hablaremos hoy.- dije firme. Larissa viró sus ojos.
-ve a llamar a los chicos, es hora de ir a dejar Tyler su madre debe de estar preocupada.- me dio la copa que ya estaba vacía.
-un gusto mi loba.- susurré y salí de allí.

Llame a los chicos y después de un tiempo todos subimos al auto.
Enid era quien entretenía a todos los chicos con su charla. Es tan fácil acostumbrarme a esto. Estoy decidida a hablar con mis chicos cuando vengamos de la casa de Tyler, sea lo que sea que pase, estoy decidía a afrontar las consecuencias.

//
-¡aquí!.- avisó con felicidad Tyler.
-deja me orilló.- respondió Larissa
Todos bajamos y Tyler corrió a tocar el timbre, al cabo de unos segundos
-Oh! Hijo!!!.- la mujer pelirroja lo recibió emotivamente. -estás bien!!.- besaba su rostro -estaba preocupada!!.-
-Larissa y su familia me ayudaron.- mis ojos se abrieron como platos. Giré disimuladamente y pude ver cómo los chicos escucharon lo que Tyler dijo, sin embargo no noté expresión alguna. ¿Tengo que preocuparme? Larissa me lanzó la misma mirada.
-Muchas gracias!!!.- ahora vino hacia nosotros la mujer.
-un gusto, hicimos lo que cualquier persona hubiera hecho.- la señora tomó la mano de Larissa en saludo y luego se dirigió a mi.
-No hay nada que agradecer.- extendí mi mano, la mujer gustosamente la tomó y la beso. Quede estática, ¿por qué lo hizo? Vi a Larissa con confusión y Larissa no tenía una cara tan simpática que digamos.
-Gracias, no sé cómo pagarles.-
-Ya lo hizo, nos dio las gracias.- hablé con cierta incomodidad, la mirada asesina de Larissa y la mirada ¿coqueta? de esta mujer sobre mi.
-Les parece si los invito a cenar, es lo menos que puedo hacer-
-Ayyy siiiiiii!!!!.- interrumpió Enid emocionada pero esa emoción así como subió así bajo al ver la cara de Larissa. -ay no.- corrigió con angustia.
-Por favor.- suplico la mujer que ahora veía a Larissa, esperando la respuesta. -no acepto un no.-
-supongo que sería descortés no aceptarla.- soltó al fin.
-a las 7, aquí, será un gusto compartir nuevamente.-
Cordialmente nos despedimos y nos dirigimos al carro rumbo a casa.
//
Entramos a casa y antes que los chicos subieran a sus cuarto los detuve.
-A la sala, necesito hablar con ustedes.-
-Creo que será en otra ocasión.- susurró Larissa.
-no.- fue lo único que respondí.
Los chicos se sentaron...

¿Estrellas? ¿Comenta? Feliz día. xoxo

✨Larissa✨ Un Nuevo Amanecer🖤. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora