Volumen XX: Epílogo

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[ Vivan felices para siempre, nurujuju~] 

[ Vivan felices para siempre, nurujuju~] 

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7 años después.

—Mis padres... Dicen que Gak... Gakuhoū ya... está impa...ciente. ¡Asano! —empujó a su novio para que dejara sus labios en paz.

—Me gusta besarte, pero no me gusta oír que todos ya están esperando por nosotros. No me gusta llegar tarde —rodó los ojos.

—Pues besándome no vamos a llegar más temprano —rió, acomodando su ropa—. No me gusta usar traje, me veo raro —frunció la nariz mientras se veía al espejo.

Gakushū apareció detrás de él y lo abrazó por la cintura.

—Te ves precioso, Karma. Si pudieras verte a través de mis ojos...

El pelirrojo no pudo evitar sonrojarse; Gakushū tampoco pudo evitar burlarse de él. Ya era algo común entre ellos cuando Asano hacia un comentario que avergonzaba al contrario.

—Tú sí que te ves increíble —se giró para acomodar el cuello de su camisa. Gakushū, sonriendo, se dejó tratar por su pareja—. Creo que es cosa de los Asano ser tan guapos.

El gesto de Gakushū se enserió y frunció las cejas.

—¿Estás... Diciéndole guapo a mi padre en frente de mí?

—Jo~ Yo no dije eso~ —sonrió mostrando la punta de su lengua.

—Sí, claro. Ve y mudate con mi padre, entonces —rodó los ojos, haciendo que Karma soltara una carcajada.

—Ya vamonos, señor celoso —dio un beso en su mejilla—. Mis padres y mi futu... Digo, Gakuhoū nos están esperando.

—¡Karma Akabane!

[...]

La cena iba bien —obviando unos cuantos regaños de parte del mayor de los Asano, recalcando la importancia de la puntualidad. A pesar de que nunca lo demostraba, y para la sorpresa de casi todos en la mesa, Karma se desenvolvía bastante bien en ambientes elegantes y sobrios.

—¿Tienen planes para más tarde? —preguntó la señora Akabane.

—De hecho, sí —Karma sonrió—. Gakushū va a llevarme a la pista de patinaje del centro para que yo pueda demostrarle que patino mejor que él.

Y ahí estaba, el competitivo chico del que se había enamorado cuando apenas tenían quince años.

—Sí, cómo no —Gakushū lo miró amenazadoramente—. Terminarás sentado en el hielo, ya verás.

Cómo comenzar a salir con un delincuente [Asakaru]¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora