Easy On Me (Parte II de Wildest Dreams)

Llévame Contigo Josh.

Conforme el desayuno estaba listo pronto apareció Toni que sonrió para saludar a la mujer que de igual forma la saludo, luego apareció aquella rubia que había sido objeto de la charla de hacía unos minutos.

— El desayuno está listo, coman – Les sonrió – En lo que lo hacen iré a tomar una ducha y mientras Maddie despierta.

Corrió a la habitación para asearse rápidamente, cuando salió su hija la observaba un tanto apenada, le regaló una sonrisa para vestirse rápido y acercarse a ella, le besó la frente y se recostó junto a ella, dejando parte de su cuerpo sobre la niña que soltó una risita, la levantó para vestirla y peinarla y hacer lo propio con ella, salió al comedor donde las tres mujeres les observaron y Taylor sonrió al verlas.

— Hola mi amor ¿descansaste? – Preguntó la periodista.
— Hola mamá – Bostezó – Sí.
— Bien, ven a desayunar, mami hizo el desayuno.
— Pero es tarde para el colegio – Se encogió de hombros.
— Hoy no vas a ir – Le sonrió – Hablaremos con Barbie ¿te parece?
— Okay – Murmuró.
— Entonces me retiro – Se puso de pie Toni – Iré a ver a Cara, de todas formas, puede que esta misma semana te deje libre Kloss – La observó.
— ¿A qué te refieres? – Se giró a verla.
— Ya sabes – Sonrió – El llamado de la naturaleza, me han ofrecido una revista y tengo que viajar a Australia ¿te interesa? – Le sonrió – Sé que hay cierto refugio que preguntó por ti y tiene cierta oferta para ti, bueno piénsalo ¿sí? Me dices que opinas, te dejaré ser mi roommie, hasta luego – Se despidió de las demás.

Bárbara observó a Taylor que observaba la interacción entre ambas, justo acababa de decirle que estaba esforzándose en echar raíces para ser aprobada por aquella rubia que en ese momento parecía haber perdido el apetito, Toni salió y Karlie volvió a la mesa con Maddie, la dejó sentada mientras sirvió desayuno para ambas.

— Cuéntame Maddie ¿Qué paso? – Sonrió tierna.
— No quiero – Expresó tajante.
— ¿Por qué? Te prometo que no tendrás problemas – Sonrió.
— Estoy enojada con Kara – Soltó.
— ¿Qué te hizo Kara?
— Tendrá un hermano ¡Y ella ni si quiera lo pidió o quería! Dijo que los hermanos pequeños tienen más cuidados por los papás y que a uno lo ignoran, que te quitan tus cosas, que eso le había dicho Robert porque tiene dos hermanos y que ella no quería eso y ahora tendrá uno y yo... Yo...
— Tranquila Maddie, sé que es difícil a veces no tener lo que uno desea con todas sus fuerzas – Sonrió – Pero según escuche tus mamis están haciendo todo lo que ellas pueden para que tu estés feliz ¿no te preocupa esas cosas que dijo Robert sobre los hermanos? – La observó.
— Puedo darle mis cosas – Se encogió de hombros – Lo cuidaría.
— Serías una gran hermana mayor – Le sonrió – Pero hay que darles tiempo a tus mamis para que puedan darte un hermanito o hermanita, los bebés son fáciles cuando los papás son un hombre y una mujer, pero cuando se tiene dos mamás o dos papás es un tanto más complicado, hay procesos por los cuales se tienen que pasar y es muy lento eso ¿Por qué quieres un hermanito?
— Solo quiero uno – Gruñó.
— De acuerdo, ven, vamos a jugar un poco.

Tras tal vez una hora estaba más tranquila la pequeña, pero eso no significaba que quisiera dar su brazo a torcer con lo del hermano, los siguientes días en el colegio no se había acercado a Kara para nada y el pobre Jason no sabía qué hacer, iba de un lado a otro tratando de hacerlas arreglar las cosas, pero simplemente Maddie no quería.

Los siguientes días la niña parecía triste y no tenía mucho ánimo de nada, un día antes de salir del colegio aguardo a que llegara Joshua por el pequeño Jason y le tomó la mano, el moreno le sonrió y apretó su mano.

— ¿Qué pasa Maddie? ¿No vendrá el chofer de los Kloss? ¿O Taylor?
— ¿Puedo ir contigo?
— Si papi, déjala ir con nosotros – Sonrió Jason.
— Bien, solo llamaré a Karlie.
— Ok.