Después de dejar de ser un humano, Aldo tendrá que aprender a vivir como un vampiro, deberá aprender a comportarse como humano, a comer como humano y beber sangre. Pero no todo es un cuento con un final feliz, descubre las nuevas circunstancias por...
Aldo comenzó a caminar por el bosque, max dentro de la casa lo comenzó a buscar pero no lo miraba, salió y cerró sus ojos, inhaló fuerte y aroma lo llevó hacia el. Max corrió velozmente en el bosque y fue en búsqueda de él. Lo pudo ver a lo lejos — Aldo, espera! — grito mientras corría hacia el.
Aldo se detuvo y miró que Max venía hacia el. — Qué pasó todo bien? — preguntó Aldo — Te estaba buscando dentro de la casa pero no te pude ver, me di cuenta que te habías ido, en verdad no quería que tu novio se enojara perdón. — dijo — No te preocupes, todo está bien, solo que a veces no entiendo a Steven, no se que es lo que le pasa o porque se comporta de esa manera. — dijo Aldo
Max se acercó a él y se sentaron en un tronco para platicar. — Sabes, no conozco a tu novio pero se ve que te sobre protege mucho de todo y todos. — dijo max
Aldo lo miró, agachó su mirada y suspiró, pues sabía que Steve lo sobre protegía mucho más que cuando era humano. — Steve y yo nos conocimos cuando yo era humano. — dijo Aldo — Eras un humano? — Preguntó Max — Si, Nos conocimos poco a poco, así como yo me enamoré de él, Steve se enamoró de mi, me protegía mucho pues siendo un humano corría muchos peligros, Thiago era el principal peligro para mí cuando yo era un humano, pues estaba obsesionado conmigo, después Steve se fue a España por un juicio en el que lo culparon. —
Aldo le seguía contando todo por lo qué pasó antes de ser un vampiro para que Max entendiera un poco de su historia.
— Vaya, entonces no te transformó el, si no Thiago, que loco, por algo está como que enojado porque no fue él quien transformó al amor de su vida. — dijo Max
— Algo así, pero bueno me iré a casa, tengo que hacer unas cosas. — se paró del tronco. — es mejor que regreses a la casa de los Miller pues andar en el bosque solo ahora hasta peligroso es para nosotros. — dijo aldo mientras salía corriendo hacia su casa.
Max corrió hacia la casa de los Miller, Aldo llegó a la casa de su madre y entró, se detuvo en medio de la sala pues podía escuchar la voz de su madre con otras 2 voces que no le eran familiar, poco a poco camino hasta la cocina y entró. Vaya sorpresa, miró a su madre con unos amigos de su trabajo y el vecino Renato que era el asistente de su madre.
— Hijo, ya llegaste, pásale. — le dijo — Vaya Aldo, que cambiazo has tendido, pareciera que fueras otro. — Dijo Renato mientras caminaba hacia el. — Te has puesto más atractivo. — dijo con voz pícara mientras intentaba tocar su brazo.
Aldo salió caminando hasta donde estaba su madre, dejando a Renato con la mano estirada, este lo giró a ver con cara de pocos amigos.
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— Solo vengo por un vaso de agua, se quedan en su casa, mucho gusto. — dijo Aldo mientras caminaba hacia su recámara.
Renato camino y lo miró mientras subía a su recámara, le dio un trago a su vaso mientras lo observaba y se dio la media vuelta para continuar con la plática en la cocina.
Aldo llegó a su cuarto y abrió la puerta, vaya sorpresa pues Steve estaba sentado en la cama de Aldo. — Qué haces aquí? — preguntó Aldo Steve se puso de pie y lo miró. — Podemos hablar? — preguntó con una mirada llena de tristeza
Steve se acercó a él y lo tomó de la cintura, su mentón lo recargó en la cabeza de Aldo.
— Aún me sigues amando, a pesar de que te sobre protejo mucho? — preguntó Steve
— Sabes que amo que me cuides y estés al pendiente de mi, pero siento que ahora eso lo estás hacia di cada vez un poco más exagerado, pues ahora soy como tú y me puedo cuidar solo. — respondió
— Yo se, pero sigo teniendo miedo a que te lastimen o algo. — dijo
— Estaré bien. — dijo Aldo
Steve abrazó a aldo, este cerro los ojos y pudo ver como Franco se metía al bosque, el aroma de su sangre llegaría hasta los demás vampiros que están en la zona buscando a sus familiares. Aldo abrió los ojos. — ¡Franco! — dijo mientras corría hacia la ventana para salir al balcón. Steve lo miró y fue tras de él, aldo brincó las bardas y salió corriendo hacia el bosque, pues franco estaba en peligro y tenía que ayudarlo. El aroma de Franco llegó hasta la nariz de Max, cerró los ojos y salió corriendo para ver de donde provenía ese delicioso olor a sangre.
Max comenzó a correr y brincar por los árboles para poder llegar hasta donde su presa estaba, Aldo miró a lo lejos a Franco pero se desvió para detener a Max, este lo miró brincar a los árboles y brinco para poder detenerlo, los 2 cayeron al suelo dando vueltas una tras otra, Max quedó arriba de Aldo mirándolo, sus miradas se clavaron y Steve llegó.
— Aldo estas bien? — preguntó Aldo lo miró y como pudo se puso de pie. — Estamos bien, solo fue un pequeño rasguño. — dijo — Porque me detuviste, estaba cazando. — preguntó Max. — No iba a dejar que le hicieras daño al chico nuevo de Douglas. — dijo Aldo — No me digas que es tu amigo. — preguntó Aldo lo miró y le respondió que si moviendo la cabeza, Max lo miró y tomó su mano. — Perdón, no lo sabía aldo. — dijo Max apenando. — No te preocupes, solo debes saber donde cazar. — dijo Aldo.
Steve miraba como Aldo hablaba con su amigo Max. A lo lejos un grito desgarrador se escuchó, Aldo giró rápidamente y cerró los ojos, pudo ver como una pareja de vampiros estaba siendo atacados por el cazador. — ¡El Cazador! — grito Aldo. Steve abrió los ojos y lanzó un gruñido para que todos escucharan.
Thiago, Regina, Giselle, Chris y Ely escucharon el llamado de Steve, todos salieron corriendo veloz hacia el bosque. Aldo comenzó a correr para llegar hasta donde estaba el cazador atacando.
Max aumentó su velocidad y llegó brincando encima del cazador. Este lo tomó de su gabardina y lo elevó alto para después aventarlo.
