Ya se quien eres. - 143

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Jake salió del lago con Aldo en brazos, parecía está inconsciente, Jake lo llevó a uno de los troncos y lo recostó.
— Aldo, me escuchas, Aldo. — lo llamaba preocupado.
— Parece que está inconsciente. — dijo Julie
— Debemos llevarlo a su casa. — respondió

Los chicos llegaron hasta donde estaba el lago y miraron a Jake junto a él.
— ¿Que es lo que le pasó? — preguntó Gis
— Cuando llegue Aldo estaba en el fondo del lago, no sé si está bien o que, pero no reacciona a nada. — dijo preocupado
Chris camino hasta donde estaba él y se acercó, puso sus manos en el pecho y cerró los ojos. Aldo arrojó el agua y comenzó a toser, se empezó a mover y todos se acercaron.

— Pero que intentaba hacer Aldo. — preguntó Regina preocupada.
— Vi a mi mamá, se despidió de mi. — dijo

Todos se quedaron sorprendidos pues parecía que Aldo estaba quedando loco.

— Pero que dices. — dijo Gis
— Aldo vino al lago de las lágrimas. — dijo alguien detrás de ellos.

Carl llegó junto a Lia pues habían visto que todos salieron corriendo hacia el bosque.

— Pero que dices papá. — preguntó Steve
— Este es un lago que cura la tristeza del corazón, te sana y te hace fuerte, Aldo tuvo la despedida con su madre por eso entró al agua para verla, se pudo despedir sin saber que estaba yendo muy dentro del lago. —

— Llevémoslo a su casa, pues mañana es el entierro del Cuerpo de su madre y tiene que descansar. — dijo Julie

Todos comenzaron a caminar para salir del lago pero Carl se quedó parado, Thiago pasó por un lado de él y este lo detuvo.
— Podemos hablar Thiago? — le preguntó

Jake llegó a la casa de Aldo y lo llevó hasta su recámara, estaba mojado, tenían que quitarle toda la ropa mojada y cambiarlo.

Jake fue al closet y sacó su playera manga larga y unos bóxer para aldo. Lo comenzó a cambiar para recostarlo en la cama. Steve estaba en la puerta mirando todo lo que Jake hacía.

— Ya se que estás en la puerta Cantú. — dijo
Steve entró y se acercó a la cama.
— En verdad piensas que me lo vas a quitar? —
Jake lo miró y levantó su ceja. — Yo no fui quien se fue y lo dejó aquí solo. — respondió

— Si me fui, fue porque él me lo pidió, estaba harto de que lo sobre protegiera, quería vivir su nueva vida como vampiro, por eso lo hice, no me fui para dejarte el camino libre. —

— Pues no entiendo porque regrésate entonces, si tanto lo quieres como dices, porque no lo sueltas y deja que haga su vida como él quiera, que decida a quien va amar, si en verdad te ama te lo dirá, pero si no te ama, entonces seré yo quien lo conquiste y luche por el día con día. — dijo Jake

— Estas equivocado, Aldo me ama a mi, solo a mi. — dijo Steve mirándolo frente a frente
— Pues eso no dijo cuando hicimos el amor en Mexico y sus ojos me miraron llenos de Amor. — respondió Jake

Steve lo tomó del cuello y Jake lo tomó de la playera, Lia y Giselle entraron al cuarto de Aldo para separar la pelea.

— Pero qué diablos le sucede a los dos, como se pueden estar peleando en este momento, no ven lo que acaba de pasar, Aldo perdió a su mamá y ustedes peleando como si él fuera un juguete. Háganme el favor de salir de la recámara de él por favor. — dijo Lia enojada

Jake y Steve salieron del cuarto de Aldo, Lia se quedaría a cuidarlo por la noche.

Al día siguiente...
La carroza salió de la funeraria rumbo al panteón donde el cuerpo de Gina sería sepultado. Una caravana de carros iba detrás de aquella Carroza pues en Mexico esa era la costumbre para despedir al cuerpo. Después de unas horas el cuerpo llegó al panteón, todos estaban ahí para despedir a la madre de Aldo. El se acercó al ataúd y le dio un beso, pues aldo estaba más tranquilo después de aquel encuentro en el lago.
— Vuela alto mami. — dijo mientras dejaba la rosa blanca en su ataúd.

The Last Black MoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora