The Last Black Moon

La Advertencia - 118

Max soltó al cazador y este cayó de lo más alto, cómo pudo se levantó y comenzó a correr, steve lo invistió arrojándolo hacia un árbol, chris y Thiago corrieron hacia él pero el cazador los tomó del cuello arrojándolos lejos de él, este salió huyendo del lugar por los árboles mientras Regina y Ely se acercaron con los vampiros. — ¿Están bien? — preguntó Regina. Los chicos afirmaron que si moviendo la cabeza.

— Maldita sea, se nos escapó el maldito. — dijo Thiago.
— Es más fuerte de lo que me imagine. — dijo Chris
Steve llegó rápidamente hacia ellos. — ¿Donde está Aldo? — preguntó algo asustado.
Todos se miraron y nadie sabía donde estaba su amigo. — No lo vimos. — dijo Thiago
— ¡Aldo! — grito Steve en el bosque.
Aldo estaba en el lugar donde el cazador atacó a los chicos, a lo lejos pudo ver como el cazador había dejado una gran pista, Aldo se acercó y se agachó para tomar la colilla del cigarro, pues era un marca de cigarros que nuca había visitó.

— Aldo, te estamos buscando. — dijo Max tras de él
Aldo giró. — Necesitamos llevarle esto a Carl. —
Steve llegó corriendo rápido y lo tomó de las manos.
— Amor, pensé que te había pasado algo. — dijo
— Estoy bien, solo que encontré esto que nos puede ayudar, necesito mostrárselo a Carl. — dijo

Todos se fueron a la casa de los cantú, pues era necesario mostrárselo a Carl, Aldo y los demás chicos entraron a la casa, Lia los miró desde lejos y camino hacia ellos. — Buenas noches chicos, a que debemos su visita. — preguntó Lia
— Hola, Necesitamos hablar con Carl. — dijo Aldo
Lia los miró y se acercó — Esta en su oficina. -—

Steve camino hacia la oficina de su padre y tocó la puerta para poder entrar. — Pasen. — dijo Carl

Steve y Aldo entraron y se pusieron frente al escritorio de su padre. — A que debo su visita chicos. — preguntó.

— Carl, Aldo encontró una pista que nos puede servir para saber quien es el cazador. — dijo
Carl se paro de su silla y Aldo se acercó dándole la colilla de cigarro. — Está marca de cigarros nuca la había visto aquí. — dijo Aldo mientras le daba la colilla a Carl.

Carl, sacó una lupa pequeña de uno de sus cajones, la comenzó a mirar, en efecto, era una marca de otro país. — Pues si, esta marca de cigarros no la venden Aquí, es importada desde Mexico. Pero gracias a esta colilla de cigarro podremos encontrar ADN del cazador que andamos buscando. — dijo Carl.

Los otros chicos estaban afuera platicando cuando escucharon un grito estremecedor, Todos se pusieron de pie y se miraron entre ellos, pues el grito escucharon provenía del bosque. Ely salió corriendo al bosque y los demás la siguieron corriendo detrás de ella. Ely corría muy rápido hasta que se topó con lo menos impredecible. Ely se quedó pasmada, los demás chicos llegaron y miraron lo que había dejado en shock a Ely.

Habían encontrado el cuerpo de uno de los vampiros que habían salvado hace unos minutos muerto, estaba colgando de un árbol. El cazador había dejado un mensaje en la espalda del vampiro. Regina se acercó y miró lo que decía.
"Se metieron con la persona equivocada. "

Todos se quedaron pasmados al leer el mensaje del cazador.

Aldo camino y miró al vampiro muerto, todos se quedaron sorprendidos. — Aldo no te acerques. — dijo Max.

Aldo giró y los miró. Pues era algo sorpréndete para el. — Que vamos hacer? — dijo algo temeroso

— Vayamos a casa, el cazador está enojado porque nos hemos metido en su plan, no va descansar hasta cumplir su cometido. — dijo Ely asustada

Todos los chicos comenzaron a correr hacia sus casas pues sabían que el cazador estaba furioso, el cuerpo del vampiro ahí se quedó, estaba recargado en un árbol pero alguien desde arriba lo tomó.

Aldo algo asustado llegó a su casa y camino hasta la recámara para acostarse, tenía un poco de miedo pues no sabía de lo que podía ser capaz él cazador.
Comenzó a quitar su ropa y se metió rápido a la cama. Miraba hacia el techo pues no podía creer lo que estaba pasando. Pasó sus manos por la cara y suspiró. — Solo espero que no le pase nada a uno de los nuestros. — dijo mientras miraba la ventana.

Steve estaba en su cuarto mirando por la ventana hacia el bosque, pues sabía que el peligro una vez más ahí estaba. — Tengo que avisarle a Jerónimo lo que está pasando en Douglas, tal vez necesitamos meter presión. — dijo Steve.

Giselle estaba en su recámara estaba a punto de acostarse cuando llegó una visión a ella.

La visión era confusa pues se podía ver al cazador entrar a una cueva. Giselle salió del trance y jalo aire. — Que diablos fue eso? — se preguntó.
Había quedado confundida, porque había entrado a una cueva el cazador? Acaso ahí era su guarida.

Thiago estaba en su cuarto sentado en su sillón, mirando las fotos de la cuenta de Instagram de Aldo. Miraba la galería donde tenía fotos de él algo atrevidas, no se pudo aguantar las ganas y se sacó el pené para comenzar a masturbarse. Lo hacía despacio y escupía su mano, la pasaba lentamente para poco a poco ir subiendo la intensidad de la masturbación. — Trágate mi leche Aldo. — dijo en el punto de su orgasmo. Thiago se vino, el placer era fuerte pues ha tenido tantas ganas de hacer suyo aquel humano que le robó el corazón.

Se puso de pie y camino al baño para limpiarse, mientras que Max en el cuarto no podía dormir pues el ver al vampiro muerto era una amenaza para ellos, pues ya se estaban metiendo en un problema qué tal vez no les correspondía resolver.

El cazador llegó a su guardia y venía arrastrando el cuerpo del vampiro que había matado para advertir al clan que se dejara de meter en sus asuntos. Lo arrojó y tomó un cerveza junto con un cigarrillo, lo encendió y se recargó en la mesa.

— No saben que tan divertido están haciendo este juego niños, ahora he logrado captar su atención pues tengo que desaparecerlos uno por uno hasta dejar sin ningún vampiro a Douglas. — dijo mientras miraba hacia el fondo de su guardia.

Tenía a todos los vampiros secuestrados atados en una tipo jaula de metal