The Last Black Moon

Lovers. - 146

Jake miró a Aldo y tomó su mano.
— Bravo. — dijo steve mientras caminaba hacia ellos aplaudiendo.

Aldo lo miró
— Que patético te escuchaste Jake diciendo todo eso, en verdad crees que Aldo se va poder fijar en ti? Sabes hasta pienso que en verdad eres tonto. No estás viendo que soy yo el amor de su vida. — dijo Steve
— Tu te fuiste y lo dejaste aquí solo sin darle alguna explicación, ahora no vengas a querer a tomar algo que claramente tú dejaste. —
— Si, yo me fui pero ya regrese por lo que es mío, aldo es mi novio y eso nada y nadie lo va cambiar. — dijo Steve

— Ya no es tu novio, pues yo lo he cuidado todo el tiempo que te fuiste. — dijo Jake
— Pues muchas gracias por cuidarmelo en el tiempo que yo no estuve, ya te puedes marchar por donde llegaste. — dijo Steve

Los dos seguían discutiendo, aldo los miró y se puso en medio.

— ¡Yaaaaa! Pausa! Parecen 2 adolescentes en serio, que tanto me pelean? Yo no soy juguete de nadie y tampoco voy a dejar que me hagan como quieren. — dijo Aldo molesto

— Yo solo quiero que le quede claro aquí a ricitos de oro que tú amor es mío, que ni haga tanto pedo porque yo aquí soy el bueno. — dijo Steve muy seguro.

Aldo lo miró y se puso frente a cantú.
— Pero que dices? Si tú le dijiste a Giselle que no querías volver a saber de mi, qué ya no te llamara para contarte cosas de mi, a qué estás jugando Steven? Ahora si me quieres? En verdad no se ni que es lo que quieres. —

Aldo se dio la vuelta y se fue caminado, Steve se quedó parado en el bosque, sus ojos se empezaron a llenar de lágrimas. Pues lo que le había dicho Aldo era muy cierto. Jake lo miró y se acercó a él.
— En verdad si un día lo amaste es mejor que lo dejes ir, no te hagas más daño y no se lo hagas a él también. Es lo mejor para los 2. —

Steve lo miró, sabía que Aldo sería imposible volver a recuperar después de eso. Steve tocó el hombro de Jake y se marchó.

Aldo cambiaba por el bosque rumbo a su casa pues lo que le dijo a Cantú sabía que lo había lastimado en el fondo. Pero tenía que sacar su coraje y desahogarse desde aquella vez que lo escuchó. Jake se fue corriendo tras del Aldo para ver si lo podía alcanzar.

Mientras que Steve caminaba por el bosque, a su mente llegaron miles de Flashbacks cuando estaba con Aldo, era imposible aguantar el llanto, se detuvo y miró al cielo, se dejó caer de rodillas y comenzó a llorar, pues el amor de su vida ya no sabía si lo seguía amando.

Chris y Max miraron a Steve llorar, pues sabía que algo había pasado con Aldo. Se acercaron a él y lo ayudaron a ponerse de pie.

— Vamos Steve, no tienes que dejarte doblar pues si lo amas, debes luchar por él antes de que Jake te gane la partida. — dijo chris
— No me lo va quitar, porque el amor que le tengo es mucho más fuerte que cualquier problema. — dijo Steve
— Entonces demuéstrale que en verdad lo amas y que si regresaste fue por el, que le quede claro que lo amas como un loco. — dijo Max

Aldo llegó a su casa y cruzó la calle para poder entrar, Jake corrió detrás de él.
— Aldo, espera. — dijo

Se detuvo y giró para ver a Jake
— Qué pasó? — preguntó
— Quiero que hablemos sobre lo qué pasó en el bosque, en verdad no quiero agobiarte con esto pero sabes que me gustas mucho. — dijo Steve.
— Jake, no tengo ganas de hablar de esto, solo quiero estar solo un tiempo, en verdad amo todo lo qué haces por mi, en verdad, pero necesito un tiempo para mi y yo estar bien. — dijo Aldo

Jake lo miró y tomó su mano, lo acercó a él y sus miradas se juntaron.

— Te daré tu espacio, el tiempo que necesites para que pienses las cosas pero cuando te decidas aquí estaré, para pedirte que estés a mi lado toda la eternidad. — dijo Jake

Aldo lo miró y este lo besó, Jake lo pegó a él y el beso se prolongó tanto que acabaron recargados en la camioneta de Aldo.

— Espero y con esto te quede claro lo mucho que me gustas y lo loco que me tienes. —

Aldo lo miró y pudo ver en los ojos de Jake que su amor era puro y sincero, se pegó a su pecho y este lo abrazó.

— Aquí siempre vas estar bien, nuca te faltará nada, solo espero que me elijas a mí para estar contigo a tu lado toda la vida. — dijo Jake mientras le daba un beso

— Me tengo que meter ya es algo tarde. —
— Si, descansa, mañana nos vemos pues tenemos que encontrar a Giselle. — dijo Jake
— Si, me preocupa donde puede estar. —
— Te dejó, descansa y nos vemos mañana. —

Aldo se metió a su casa y Jake se quedó ahí, pues lo espero a que entrara a su casa. Después de que se metiera a su casa, Jake camino para ir a la casa de su hermana, su felicidad se notaba desde lejos pues sabía que aldo sentía muchas cosas por él y las tenía de ganar contra cantú.

— Solo espero que me elijas a mí para que nuestras vidas se junten y vivamos felices para siempre. — dijo Jake

Steve brinco del árbol y camino hasta la puerta de la casa de Aldo. Iba a tocar el timbre pero se detuvo, recordó cuando entraba por la ventana, camino hasta la barda y comenzó a subir para entrar al cuarto de Aldo.

Después de subir, brinco al balcón y camino hasta la puerta y miró que aldo se estaba quitando la ropa, estaba desnudó pues se iba a duchar. Steve contemplaba aquel cuerpo desnudó qué tantas veces fue suyo. Poco a poco abrió la puerta y camino hacia donde estaba el.

Aldo sintió aquellas manos recorrer su cintura, subió su mirada y vio a Steve por el espejo.

— Qué haces aquí? — preguntó