La Confusion. - 147

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Steve lo miró, se acercó y lo pegó a él.
— Mi ser te extraña. — dijo algo nervioso
— Pero dijiste que ya no me querías, que ya no querías saber de mi. — dijo Aldo

Steve tomó sus mejillas y lo besó, mientras con su manos recorría todo su cuerpo, Aldo lo abrazó y steve lo cargo llevándolo a la cama, los 2 cayeron y seguían besándose mientras la luz de la luna iluminaba el cuarto.
— Te quiero hacer mío. — dijo Steve
— Cogeme. — dijo Aldo algo excitado

Steve comenzó a quitarse su ropa para quedar totalmente desnudo, se sentó en el sillón del cuarto y Aldo fue hasta donde estaba, miró que su pené estaba erecto, lo comenzó a tocar y dar pequeños besos. Aldo miró la cara de STEVE y este se metió el pené a la boca. Steve apretaba fuerte el sillón pues no había nadie mejor que Aldo para chuparlo, tomó su cabeza y lo empujó para que se la tragara toda.

— Metemela. — dijo Aldo
Steve se puso de pie y recargó a Aldo en el sillón para penetrarlo, este soltó un gemido de placer cuando entró.

Jake llegó a la casa de su hermana, sacó sus llaves y abrió la puerta, entró y miró que todo estaba apagado. Al parecer Julie no estaba, subió a su cuarto y se acosto en la cama, no dejaba de pensar que estaba a nada de que Aldo fuera su novio.

— Si el se decide por mi, seré el hombre más feliz, no dudaré en pedirle matrimonio, quiero que estemos juntos toda la vida. —

Steve se metió al baño y Aldo se quedó ahí en el sillón, tenía mucho que nadie la hacía sentir eso, steve salió y tomó su bóxer.
— Te vas a bañar? — le preguntó
— Si, me bañare para descansar. — dijo Aldo

Steve comenzó a vestirse y Aldo entró al baño, se miró al espejo y pudo recordar lo que había pasado en México. Agachó su mirada y Steve entró, pudo notar que Aldo estaba raro. Se acercó a él y tocó su mano. Aldo rápido la quito pues sabía que Steve podía ver todo si lo tocaba.
— Estas bien? — le preguntó
— Si, solamente me asuste cuando me tocaste, pero estoy bien me tengo que bañar, ya te vas? — preguntó Aldo
— Si me tengo que ir, te veo después, cuídate mucho por favor. — le dijo Steve

Steve salió del cuarto de Aldo, se quedó parado pensando porque había quitado su mano, tal vez Aldo no quería que él viera algo, volteó y miró el baño, camino hasta la ventana y salió.

Aldo se quedó en el baño, pues no sabía que es lo que estaba pasando por su cabeza, subió su mirada y se miró en el espejo.

— Porque me siento tan confundido, porque siento que no puedo tomar una decisión, tengo que saber que es lo que en verdad quiero. — dijo Aldo

El agua comenzó a caer y Aldo metió su cuerpo, pudo ver muchas cosas, Jake pero por otro lado a Steve. Las cosas estaban empeorando, pues de los 2 estaba enamorado. Recargó sus manos en la pared, era una decisión muy difícil pues no quería lastimarlos.

Steve caminaba por el bosque despreocupado, pero algo pensativo porque Aldo se estaba comportando raro. Algo tenía que ver Jake porque sabía que lo tenía confundido.

Steve camino y sin espéralo alguien paso corriendo velozmente a un lado de él, este salió disparado hacia los árboles, se puso rápido de pie y salió tras de él, pues un vampiro que no era de la zona estaba en el bosque. Los demás salieron corriendo de la casa de Steve porque habían sentido la presencia de otro vampiro. Corrían para encontrarlo

— Va por allá. — dijo Max
Todos corrieron hacia la orilla del bosque, Thiago corrió mucho más veloz y pudo someterlo, los 2 cayeron al suelo.

— Pero qué diablos haces? — preguntó
— Qué haces tú aquí? — preguntó Thiago
— Vengo por el llamado que hicieron, no soy el único más vampiros vienen para acá, pues el llamado que hicieron es para pelear. — dijo

Todos se quedaron viendo aquel vampiro pues el llamado de Aldo había funcionado

— Si, mi novio hizo el llamado porque ocupamos de su ayuda, ocupamos que nos ayuden a destruir al cazador. — dijo Steve

— Pues cuenten conmigo y con los demás vampiros a lo que han llamado, pues la pelea contra el cazador la tenemos que ganar. —

Varios vampiros comenzaron a llegar al condado de Douglas, corrían por el bosque pues el llamado de Aldo los había alertado que una gran batalla está por iniciar, Aldo cerró sus ojos y miró como corrían por el bosque, este los abrió y salió corriendo hacia el bosque, Aldo los comenzó a seguir pues todos se dirigían a la casa de los cantú.

Al poco tiempo Aldo llegó a la casa de Steve y miró a muchos vampiros fuera, que es lo que pasaba por que había tantos vampiros. Aldo miró a Chris platicar con unos y se acercó a él.

— Chris. — lo llamo
— Aldo, que bueno que estás aquí. — respondió
— Porque hay muchos vampiros aquí, de donde son, porque están aquí? — preguntó
— Tu los llamaste, ellos vinieron por tu llamado, todos están dispuestos a pelear contra el cazador. — dijo Chris
— Mi llamado los trajo aquí? — le preguntó
— Si, ellos están aquí por ti, aún faltan más Por llegar. — respondió chris

Giselle en la guardia del cazador pudo ver cómo llegaba y llegaban vampiros a su casa pues Aldo estaba creando el ejército de Vampiros muy grande, el cazador la miró y se acercó a su reja.
— Que es lo que viste. — preguntó
— Nada, no puedo ver nada porque me tienes encerrada aquí, mi don no es fuerte. — dijo
— Me tienes que avisar todo lo que veas, pues de eso dependerá si acabo o no con ustedes—

Giselle lo miró y se puso de pie.
— Que es lo que quieres para terminar con todo esto. — le preguntó Giselle

El cazador se detuvo y la miró. Camino hacia ella lentamente y sus miradas se juntaron.
— En verdad quieres saber. — le preguntó
— Solo así, podremos evitar una pelea. —

El cazador la miró. Sonrió y agachó su mirada. — Solo entréguenme a Aldo, hagamos un truque, yo regreso a todos los vampiros desaparecidos pero me dan a Aldo. — dijo
— Estas loco si crees que te van a dar a Aldo, Steve y Jake te harían garras si lo tocas. —

— Eso está por verse. — dijo el cazador

The Last Black MoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora