Vivir y saber vivir es la esencia de la vida. Caminar con libertad por las calles de tu ciudad, de tu país y de las del resto del mundo sin tener que dar explicaciones de lo que haces o dejes de hacer.
Privilegio divino que nos otorgamos a conciencia sin herir a los demás, con cada paso que damos en la Tierra. Gatear, dar pasitos lentos y temblorosos, correr, saltar como si pudiéramos tocar el cielo.
Gritar o cantar a todo pulmón en cualquier escenario abierto o cerrado. Reír a carcajadas plenamente sin escondernos para expresar nuestras alegrías, a veces para ocultar nuestro sufrimiento.
Acontecimientos tristes o alegres que se nos imponen que debemos aprender a soportar. Llevarlos a cuesta el tiempo limitado para sanar las heridas que nos marcan y no nos dejan avanzar.
Enfrentar y desechar circunstancias dolorosas que nos pueden llevar a la terrible depresión, por vernos atrapados en un laberinto eterno que no tiene salida. Solo porque nos cegamos, sin ser ciegos.
Pedir perdón a las personas que herimos, sin darnos cuenta, es la manera más efectiva para aliviar las tensiones de nuestro corazón. Solo a las agradecidas, que no se regocijan con nuestras desgracias.
Vivir y saber vivir es la esencia de la vida.
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La vida en versos.
PoetryMediante letras y vocablos se reflejan vivencias personales, de seres humanos que me rodean y de la naturaleza. Reflexiones, pequeños relatos a través de poemas, mi manera de ver al mundo.
