Cara de Póquer

12° Trago amargo

Después de asegurarme de Kyle estaba completamente dormido, me fui directamente al edificio y le regresé el auto a Elliott, fue obvio que le sorprendió verme llegar... tal vez esperaba algo más pero decidí no decir nada, ni dar ninguna explicación, suficiente tengo con el conflicto mental que tengo. Rose fue la única que permaneció conmigo en el dormitorio y en el momento exacto en el que tome asiento en la orilla de mi cama me  preguntó qué había sucedido, pero... ni siquiera fui capaz de poder responderle.

Todo dentro de mi esta vuelto un huracán de malditas emociones y sensaciones que no sabía que podía sentir... o más bien que no sabía que podía tener por Kyle, pero en cuanto dijo lo que dijo y cuando yo... lo besé... algo cambió, algo dentro de mí hizo clic y yo no puedo permitir que eso pase porque Kyle es prácticamente todo lo que he intentado olvidar; problemas. Lo quiero y hasta hoy no sabía cuánto, pero lo quiero y no puedo permitir que eso siga así, no si quiero otra vida para mí.

A la mañana siguiente Rose insistió en querer saber qué había sucedido porque yo me comportaba extraña y al parecer en cuanto amaneció y Kyle también despertó lo hizo de muy mal humor y casi golpea a Elliott en el rostro solo que se cruzó un cuadro pegado a la pared antes que él y pagó las consecuencias.

—  Emily Sanderson — me detiene Rose con tono severo antes de poder entrar las instalaciones de la universidad. — sino me dices que sucedió para antes de que termine el día me voy a enfadar mucho contigo — advierte

—  Rose... — suplico

—  Soy tu mejor amiga — me recuerda — pero Elliott es mi novio y Kyle casi lo quiso matar esta mañana solo porque si, así que tengo derecho a saber el porqué.  — de hecho si lo tiene, pero soy yo la que no quiere hablarlo. Suspiro resignada ante sus advertencias y asiento.

—  Te veo al llegar al dormitorio — digo y frunce el ceño

—  ¿No nos veremos en el almuerzo? — pregunta confundida, así que sacudo la cabeza, no quiero arriesgarme a encontraría y si recuerda todo de anoche sabrá que me fui y que no me quedé a su lado a pesar de que me lo pidió... creerá que no siento nada por él y es mejor así.

—  No tengo mucha hambre — miento — te veo más tarde — me excuso y salgo de su camino para ir hacia mi primera clase.

Decir que no pude concentrarme en los temas de los profesores es decir poco porque realmente ni siquiera pude ser capaz de procesar el saludo al iniciar con cada una de ellas ya que mi mente siempre estuvo en otro lugar; Kyle.

Me estoy comenzando a sentir demasiado confusa y frustrada que no tengo ni idea de que es lo que voy a hacer para remediarlo... ahora Sam se ha vuelto el último de los pensamientos en mi cabeza y eso me hace sentir tan culpable porque hay algo... no lo hemos definido pero hay algo y aunque no me sienta segura de muchas cosas, él no se merece que siga haciéndole creer que algo más podría suceder y tampoco debo engañarme... sé que necesito a alguien como él en mi vida pero Sam no se siente correcto... y Kyle tampoco se siente correcto pero al menos siento algo. ¿No?

Como le dije a Rose, no fui a la cafetería y en lugar de eso me fui directamente a un espacio alejado de todos en los jardines del campus. Busqué el menos transitado y me senté en el césped junto a un árbol.

Debo solucionar el desorden en mi cabeza antes de que me vuelva loca. Resoplo y dejo recargar mi cabeza contra el árbol, abro mi mochila y saco mi teléfono de una de las bolsas para teclear el número de la señora Norris.

—  Hola, querida — me responde casi al instante con la voz llena de emoción

—  Hola — suspiro — ¿cómo estás? — le pregunto