CAPÍTULO 14.- Suficientes lilas

1K 125 33
                                    

Josette aún no despertaba y cada día sentía que iba perdiendo la cabeza un poco más

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Josette aún no despertaba y cada día sentía que iba perdiendo la cabeza un poco más.

Los últimos tres días han sido demasiado estresantes. Mis padres estaban alterados y buscaban con quien sacar su estrés, ya fuera conmigo o con las pobres enfermeras que ahora huían de nosotros.

Dan había ayudado a posponer mis citas de esta semana, pero no había podido hacerlo con una convivencia de una línea de maquillaje de la que era la imagen principal. No los culpaba, teníamos un contrato, pero no contaba con que fuera a suceder una situación de este tipo.

Así que ahora me encontraba en mi departamento arreglándome. Bruna es la única que se encuentra conmigo y está enfocada en cubrir las enormes ojeras en mi rostro por pasar mis noches en el hospital.

- Todo estará bien Agnes, tu hermana despertará pronto.

Me mira con preocupación al notar lo distraída que estoy.

- Han pasado seis días Bruna. - Susurro. - No sé si lo vaya a hacer.

- Hay casos de gente que están mucho tiempo sin responder, y un día de repente lo hacen. - Sonríe con animosidad.- Puede parecer poco tiempo para ti, pero su cuerpo se está recuperando. Debes ser paciente.

Paciencia. Está bien, podía hacerlo. Me enfocaría en mi trabajo por la mañana, y en las noches estaría a su lado, esperando a que despertara.

- Paciencia. - Repito en voz alta. - Lo haré, por ella.

Mi amiga me da una sonrisa grande y coloca un poco de rubor en mis mejillas. Se hace a un lado y me permite ver mi reflejo en el espejo de mi tocador. Mi rostro está bastante delgado, de una manera que me hace ver delicada. Sabía que había bajado bastante de peso, pero ni siquiera podía preocuparme por eso.

Bruna ha hecho un trabajo maravilloso, las manchas oscuras bajo mis ojos han desaparecido debajo del corrector y la base, y mi piel se ve radiante. Todas las imperfecciones han desaparecido debajo del maquillaje y ahora era momento de hacer lo mismo conmigo.

La Agnes profesional y feliz saldría a interpretar su papel por unas horas.

- Te ves hermosa, tus ojos son tan azules que te tengo un poco de envidia.

- Quisiera tus ojos marrones Buna. - Me levanto de la silla.- Destacan mucho mejor con las sombras.

Entro a mi vestidor y escojo un vestido con estampado de flores rojas. El evento sería en un jardín, así que era un buen momento para usar algo veraniego. Cuando me lo coloco, noto que me queda un poco grande de la cintura, pero las cintas funcionan para ajustarlo alrededor de mi cintura.

- ¡Ya llegó tu carro Agnes! - Grita Bruna desde la sala.

Sujeto las alpargatas alrededor de mis tobillos y tomo una diadema para mantener en un solo lugar mi cabello. Probablemente habría aire y no quería que mi cabello estuviera volando sobre mi rostro.

NO LO ARRUINESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora