Toda mi vida me la había pasado preocupándome por seguir los estereotipos de belleza que la sociedad se había encargado de establecer, pero ya no era así.
Ahora me la pasaba cubierta de grandes sudaderas y pantalones de ejercicio, mi cabello se mantenía unido por una trenza y mi bolsa de maquillaje se mantenía abandonada en un cajón de mi cómoda. No quería llamar la atención si no era necesario.
- ¿Es que has perdido el sentido de la moda? - Wess me mira con una expresión de completo horror cuando me ve llegar al estudio.
Me encojo ante sus palabras y doy un vistazo a mi vestimenta; unos jeans oscuros - que ahora me quedaban dos tallas más grandes - y un suéter de chenille. Hoy me había esforzado por colocarme algo más que mi ropa cómoda, pero parecía que no había hecho un buen trabajo.
- Déjala en paz. - Bruna me defiende.- A ti todo te queda bien, linda.
Asiento y pongo una sonrisa en mi rostro para cubrir mi incomodidad.
- Gracias.
- Ahora, vamos a ponernos a trabajar, las pasarelas serán pronto. - Dice ella mientras revisa una paleta de sombras.
- Claro que sí. - Saca dos vestidos cubiertos perfectamente en guardapolvos para protegerlos. - ¿Recuerdas a estas bellezas? Las probamos hace unos meses para la campaña de invierno de Nina Grey.
Las prendas abandonan sus fundas y Wess las coloca cuidadosamente en dos perchas. Miro el vestido de tonalidades rosa pálido; lleva sobre él una fina cadena dorada que lo hace ver como una obra maestra, y la principal razón por la que me enamoré en cuanto lo vi, el otro conjunto consta de una falda a cuadros a medio muslo y un suéter, ambos en una paleta de colores beige y café, elaborados con una tela que te cubría de las bajas temperaturas. Eran preciosos,los detalles del vestido eran exquisitos, podías notar las horas de trabajo detrás de cada uno, pero tristemente no me sentía emocionada acerca de las pasarelas de esta temporada.
- Anda, entra al vestidor y ponte el vestido, debemos asegurarnos de que aún son tus medidas, y si no debemos ajustarlo lo más pronto posible.
Suspiro y entro el vestidor, enseguida me deshago de mi ropa y me enfundo en el vestido rosa de tela plisada con la cadena dorada con pequeños diamantes colocados estratégicamente a su alrededor, tiene volumen y me hace parecer un miembro de la realeza.
Sin mirar mi reflejo en el enorme vidrio, salgo y enfrento a los únicos dos amigos que me quedan. Tienen unas sonrisas emocionadas en sus rostros, pero en cuanto me ven, su expresión cae. Frunzo el ceño y subo a la pequeña pasarela que hay. Puedo notar que Bruna me mira con preocupación y Wess se ve angustiado mientras sube detrás de mí.
- Agnes... - Finalmente habla Bruna. - ¿Te has sentido bien estos últimos días?
- Si. - Río sin entender sus expresiones. - ¿Por qué?
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NO LO ARRUINES
RomanceCuando la vida te da una segunda oportunidad, no huyes o te escondes, la tomas y solamente tienes algo en mente... no lo arruines. [Libro 2: Trilogía Reflectores]. Obra protegida por derechos de autor, se prohíbe su copia, adaptación o distribución...