El color del alma [Caitlyn x Vi] **En edición**

Capítulo 23: Indigo

Vi - 25 años

- ¿Cuál es el primer recuerdo que tienes de la vida Violet? -

Vi miro delante de ella y se encogió en el sillón acolchado, aferrándose a la manta tanto como pudo y pensando con seriedad la pregunta

Su primer recuerdo eran los gritos de su madre

Se estremece en su memoria, pero está ahí, con ese señor de pelo rosado arrastrando a la mujer de pelo azul morado por la sala, zarandeándola atroz y abusando de su fuerza bruta. Entonces, la hacía chocar contra la desvencijada mesa de madera estrellando su cabeza detrás y luego, atrapando su garganta hundiéndola hasta que el tono de su madre pasaba a ser pálido, los labios morados, los ojos hinchados, los gorgoteos impávidos, hasta que la mujer perdía fuerzas y Vi podría jurar entonces, que había muerto

Su segundo recuerdo, era neblina

Vi debía tener unos tres años y su casa olía a tabaco y maltrato

Violet odiaba profundamente a su supuesto padre, odiaba parecerse tanto a él de manera física, había sacado su altura, sus pecas, su pelo rosa, lo único que verdaderamente tenía de su madre, eran los ojos grises

La bruma es pesada cuando intenta mirar a como era todo antes de que el mundo se quebrara

Recuerda despertarse en la madrugada con gemidos impetuosos proviniendo en algún lugar detrás de la puerta de su habitación

Violet primero, despertaba llorando bajito "Mamá" Y entonces, lloraba mucho y gritaba "¡Papá! ¡Papá! ¡Para no la mates! ¡Mamá! ¡Te quiero!" - Por si esa era la última vez que podía decírselo-

Entonces su padre aparecería en la puerta de su cuarto con los calzoncillos mal puestos y las manos llenas de rabia, levantándola del cabello para estrellarla contra el suelo y golpearla brutal y desmedido, haciendo arder su piel y llenando sus pulmones de miedo

Pero como los golpes nunca han calmado a los niños, Vi lloraba todavía más, entonces, aparecía su madre con el cabello enmarañado y el cuerpo morado y desnudo. Entonces corría hacia ella, oliendo a sexo y con los dientes apretados, uniéndose a la paliza

Llovían golpes en una cama empapada y la peli-rosa no podía recordar si era la sangre o sus lágrimas, porque estaba encogida y tan dolorida que no podía discernir entre ninguna

Cuando Violet vocalizo esto, 20 años después, entendió que hay cosas que se comprenden mejor con el tiempo, y se le quebró la cara en tres por las lágrimas

El terror innato de irse a dormir y despertar en una cama empapada de miedo

Pero ella amaba a su madre, la amaba aunque le pegara, aunque le destrozara la cara por parecerse demasiado a su padre. La amaba aunque le hubiera dejado el cuidado de Powder cuando ella aún eran una niña

- ¿Porque la amabas si sólo te hacía daño Violet? -

- Porque... Era mi mamá -

- Violet - Cecilia la miró con ojos honestos - ¿Crees que merecías todos esos años? ¿Todo el abuso de tus padres? -

Vi dejó la mirada en el suelo. Una sola lágrima rodó fuera de sus mejillas

- Creo que he aceptado que no lo merecía pero - Su voz tembló, la dejo romperse - Yo... Solo quería que mi mamá se quedara, no quería quedarme sola -

- ¿Te da miedo quedarte sola, Violet? -

- Es mi peor pesadilla -

Cecilia dijo entonces que somos nuestros traumas de la infancia, y Vi supo que tenía razón, porque el miedo tácito de que las personas que la aman la abandonen es algo de lo que Violet nunca pudo curarse