C A P I T U L O 16

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CAPITULO 16

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CAPITULO 16

Un año y cinco meses mas tarde


El tiempo pasa, no se detiene por nada ni por nadie, mucho menos por mi. Ha pasado un largo tiempo en el que pude recuperarme, acudir con un medico para que me diera un punto de vista mas acertado sobre mi cuerpo y mi estado de salud, que por supuesto, era deplorable en un principio. Despues, con el tiempo y con una basta dosis de medicamentos y vitaminas, ejercicio, y mejor alimentacion, pude ejecutar un cambio. Tenia mas fuerza, mas vitalidad, incluso mas, de la que carecia mucho antes de la desgracia.

Una mañana me levante con la noticia de que mi padre había tenido un accidente. Esa mañana de Mayo habia nubes grises en el cielo, estaba a punto de llover y en medio de todo el aire y la calidez de la mañana, mi madre contesto su celular. Esa mañana cambio el resto de nuestras vidas, esa mañana mi padre habia fallecido en un accidente de auto. La policia que en ese momento era una mujer hablando al telefono, le habia explicado a mi madre que en el trayecto, el auto de mi padre se habia estrellado contra la parte trasera de un trailer, causando una muerte instantanea en él. Sin dolor. Rapido y fugaz. Esa mañana, mi madre lloro y colgo. Ese dia habia cambiado algo en nuestra vida. Despues de haberlo asimilado ambas, conmigo sin poder llorar una lagrima por el, admiti que fue una muerte facil, yo en el fondo hubiera preferido que sufriera, que le doliera cada centimetro de su cuerpo, que pudiera ver con sus ojos lo que era la sangre y los moretones, pero no, el no habia llorado, creo que solo grito, pero no pudo hacer nada al respecto. Solo murio; no quisimos ver fotos, no queriamos inspirar mas decepcion y lastima. No hubo funeral, no teniamos mas familia o amigos a quienes avisarles sobre su deceso. Mi madre opto por cremarlo. A la semana ya habiamos llevado sus cenizas al parque y las esparcimos en un rincon alejado de la zona. En donde no pudiera nadie perturbarnos. Ambas estuvimos en silencio un momento, luego nos fuimos.

Ella termino aceptando la situacion, y yo tambien. Pasado el tiempo, rehicimos nuestra vida, como debia de ser.

Claro, las cosas habian cambiado dentro de mi entorno y lo que conocia. Ella era mas feliz, y sonreia a menudo con gracia ante la vida. Es mi madre. Y lo unico que deseo para ella es que este bien. Yo me sentia igual, pero, la diferencia entre ella y yo, era que mi padre estaba muerto. Para ella ya no habia ningun impedimento, pero para mi, el todavia seguia vivo. Aun habian esperanzas, al menos ya no estoy ahi. Ahora tengo un trabajo de medio tiempo, estoy recibiendo un pago por ello. Ahora todo tenia una tonalidad mas distinta. Ya no tenia miedo a nada, y la gente en donde vivo, suele meterse en sus propios asuntos. Mi madre se desarrolla en su entorno como debe de ser. Las tormentas dentro de mi mente se habian calmado un poco. Asi como mis pesadillas. A excepcion de mis cicatrices. Esas jamas podria borrarlas de mi cuerpo, nunca.

Hoy, una mañana de domingo, lo unico que empece a hacer fue ordenar mi habitacion. Mi madre preparaba la comida y escuchaba musica en la cocina. Me movia de aqui para alla moviendo cosas, la cama y ordenando mi ropa. Me sente en el suelo revisando lo que tenia guardado aun dentro de la maleta, despues de mucho tiempo, al fin habia decidido abrirla. Con calma la abro y me encuentro aun con la poca ropa y cosas que habia dejado, rehusandome el segundo dia despues de que llegue, a sacarlas, porque los recuerdos estaban ahi y por supuesto, no me exigiria volver a mirarlos nunca mas. Hasta el dia de hoy. Pero en el suelo habia un poco de polvo, y tenia que sacar lo viejo para meter lo nuevo, entre ello, mi maleta sin abrir. Sonrei tomando mi chaqueta verde y la saque del interior oliendola, la traje hacia mi con ambas manos, y lentamente comence a doblarla encima de mi regazo, la deje de lado en el suelo y enseguida tome el pantalon de mezclilla, al momento de sujetarlo por la parte de arriba, algo reboto y cayo al suelo en seco. Alarmada deje el pantalon encima de la chaqueta sin doblar y tome la USB color morada que aun yacia dentro desde ese dia. El silencio se apodero de mi alrededor mientras la observaba. Solte un largo suspiro y recorde a Jack, mire fijamente mi chaqueta y recorde temerosa lo que habia conducido hasta aca.

|Inestable|Libro1|"Violenta obsesión"|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora