JEONG [Tk/Vk]

XIII

Jungkook se mantenía tirado sobre su silla en aquella enorme sala de juntas, mirando el techo mientras pensaba en la reunión que había tenido anteriormente con sus socios, haciéndoles saber que había un comprador importante que deseaba adquirir algunas de sus acciones a cambio de una suma generosa.

Aquello sin duda había generado conflictos en la sala, discusiones y evidentemente malas respuestas, sin embargo, terminó por conseguir el trato con dos de ellos.

Dejó salir un largo suspiro y se puso de pie, saliendo de la sala de juntas y yendo directamente a su oficina, viendo a Minji acercarse hacia él.

– Señor, le recuerdo que tiene una reunión de padres más tarde en la escuela de su hija – dijo Minji, viendo su agenda mientras seguia a su jefe – después de eso tiene programada una comida con sus socios para hablar sobre el nuevo lanzamiento y después asistir a la conferencia de prensa donde hablará sobre su producto recién lanzado.

Jungkook asintió.  

– Y también tiene una visita – murmuró, viendo a su jefe detenerse en la puerta.

– Te dije que no permito visitas, Minji ¿A quien demonios dejaste entrar?

Taehyung se mantenía recostado sobre aquella silla cómoda del empresario, sus pies descansando sobre el escritorio de madera mientras movía uno de ellos con impaciencia, esperando por la llegada de Jeon.

– ¿¡A quien!?

Kim levantó una ceja tras oír la voz de Jungkook del otro lado de la puerta, viéndolo entrar poco después a la oficina, un rostro consternado siendo lo primero que vio.

– ¿¡Qué haces aquí!? – exclamó atónito, cerrando con seguro la puerta de su oficina, acercándose de prisa hasta su escritorio.

– ¿Se supone que no puedo venir al trabajo de mi esposo?

– Espo- ¡Esposo un demonio, Taehyung! ¿¡Qué haces aquí!? ¡Baja tus pies de mi escritorio!

Taehyung se rio, obedeciendo la orden de Jungkook.

– Te dije que te enseñaría lo que es un buen lavado de dinero... ¿Tienes las acciones que pedí?

Jungkook suspiró molesto.

– Pensé que lo haríamos en mi casa.

– Lo haremos pero el trato se hace aquí – murmuró divertido.

– ¿Ah? – Jungkook le miró confundido, no entendiendo del todo lo que había querido decir.

Taehyung se rio.

– Olvidalo – murmuró poniéndose de pie, llevando sus manos hacia atrás, tomando su muñeca derecha con la mano izquierda, haciéndose a un lado y señalando la silla con la cabeza.

Jungkook fue hasta su silla, sentándose en ella de mala gana, volteando hacia arriba para ver a Taehyung.

– ¿Conseguiste las acciones?